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- La coach empresarial Danelli Jiménez Alvis conversó con El Diario sobre los aspectos que pueden facilitar el trabajar desde el hogar
La masificación del trabajo a distancia como mecanismo para mantener la actividad laboral, pese a la pandemia ocasionada por el coronavirus, ha supuesto grandes retos para las organizaciones y también para los empleados.
La necesidad de trabajar desde casa ha obligado a que las empresas comiencen a identificar los desafíos que esto supone, tanto en términos de los requisitos necesarios para poder llevarlo a cabo, como en cuáles son las metodologías más idóneas para mantener la productividad.
Danelli Jiménez Alvis, coach empresarial y directora de la firma Kairos Coach Consultores, explica en exclusiva para El Diario que muchas organizaciones se encuentran actualmente en una fase de aprendizaje, en la que a través del ensayo y error están adaptando sus procesos para hacerlos lo más eficientes posibles.
La clave
Sostiene que parte de este aprendizaje significa comprender que, una vez culmine la pandemia, ciertos tipos de trabajo no necesariamente van a volver a los espacios físicos, sino que por el contrario continuarán desarrollándose desde los hogares.
Explica que esta posibilidad está asociada estrechamente con la eficiencia en el manejo de recursos, pues ante la crisis económica que se ha producido mundialmente, las empresas desean disminuir en la medida de lo posible sus gastos.
“Quizás ahora se plantean, debido a que la economía está sufriendo reajustes y va a seguir sufriéndolos, cómo anticiparse a la imposibilidad de manejo de costos como los que llevaban hasta el 2019. Esto lo vamos a poder ver progresivamente”, dice la coach.
Cuenta que algunas gerencias de recursos humanos, de empresas a las cuales les presta apoyo con su firma, también han iniciado un proceso de identificar cuáles son las personas claves que han manejado el trabajo a distancia de una mejor manera. Esto debido a que ya no ven la opción de que la plantilla entera regrese a los espacios físicos.
Esta nueva visión con respecto al trabajo a distancia, debido a la pandemia, ha propiciado que este deje de asociarse únicamente con organizaciones como el gigante tecnológico Google.
Comenta que este modelo de trabajo ya era aplicado por empresas que habían movido sus actividades fuera de sus países de origen, por motivos como escalabilidad del negocio o la búsqueda de menores costos de operatividad.
Venezuela
La directora de Kairos apunta que un aspecto que dificulta la masificación del teletrabajo en Venezuela es el hecho de que gran parte de la población no tiene acceso a una conexión a Internet que tenga la calidad necesaria para poder trabajar sin contratiempos. nn“Hablar de masificación es hablar de alcances y en Venezuela tenemos serias limitaciones para pensar en un alcance a nivel nacional”, comenta.nnAsegura que esta situación no es exclusiva de Venezuela pues, si bien en menor medida, también ocurre en otros países de la región.nnSostiene que aquellas personas que se esfuercen por estar en capacidad de trabajar a distancia gozarán de mayores oportunidades laborales, pues esa es una característica que las empresas están comenzando a valorar. Cree que en el corto plazo esto se traducirá en un problema, pues se creará una brecha en la sociedad entre quienes pueden hacerlo y los que no.n
Comunicación asertiva
La experta plantea que un aspecto básico dentro de cualquier organización para la consecución de las metas es el contar con una comunicación efectiva, es decir, que los mensajes se transmitan de forma clara y sin espacio para confusiones o malos entendidos.
Afirma que esto cobra una importancia mucho mayor en tiempos en los que el trabajo se realiza de forma remota y no existe una comunicación presencial entre los empleados y sus jefes inmediatos.
Danelli Jiménez Alvis dice que la comunicación también es importante en el hogar para poder definir horarios de trabajo en los cuales se es más productivo y, de esta forma, disminuir a su mínima expresión cualquier tipo de interrupción.
Asevera que la efectividad en la comunicación facilita que no se produzcan escenarios como el hecho de suponer que el trabajar desde casa implica una disponibilidad para atender asuntos laborales durante las 24 horas del día. Considera que este tipo de comportamientos en algunos jefes demuestra una falta de confianza en los empleados y una escasa o nula capacidad de trabajo en equipo.
Aclara, no obstante, que también puede ocurrir el escenario contrario. Aquel en el que el trabajador decide desentenderse de su trabajo, alegando excusas como la falta de internet para no cumplir con sus actividades.
La experta considera errados ambos comportamientos y solo pueden superarse justamente a través de una comunicación efectiva, en la que tanto la empresa como el empleado entiendan que existe un horario que debe ser respetado.
Comprender los retos inherentes a trabajar desde el hogar y lograr adaptarse a las nuevas dinámicas que se requieren para mantener la productividad es una labor que atañe no solamente a las organizaciones sino también a los empleados.
