• Desde 2009 este pez comenzó a encontrarse con facilidad en las costas, lo que causó desde entonces una alarma entre los pescadores.. La solución es la pesca para servirlo como plato exótico, pero en tiempos de pandemia y con el parque cerrado, en Los Roques el pez león ha ganado un año de ventaja

A simple vista el pez león es una criatura de belleza exótica. Suele ser de color café o rojo, con rayas negras que forman franjas. Sus aletas pectorales y laterales se abren y crean en conjunto con sus espinas dorsales un abanico que recuerda a una melena, de ahí su nombre.  De cerca no es tan agraciado, las espinas que lo recubren son venenosas y capaces de paralizar de dolor a una persona; por eso su pesca no es popular y los humanos no significan una amenaza real para este invasor. 

Viene del océano Índico, donde tiene depredadores naturales como tiburones y rayas, e incluso es un pez caníbal que se come a crías de su misma especie. En las aguas caribeñas, por el contrario, sin un depredador natural, el pez león se ha vuelto una plaga que ataca desde Estados Unidos hasta Venezuela, especialmente en el archipiélago de Los Roques, donde está aumentando cada vez su presencia y disminuyendo la de otras especies nativas importantes para la pesca. 

Leer más  Luna rosa: ¿cuándo es y a qué hora podrá verse en Venezuela?
Pez León en Los Roques
Foto cortesía

El invasor que acaba con la despensa en Los Roques

Cuando Francisco Odreman llegó al archipiélago en 2013, atraído por el buceo profesional y como chef de la Posada Galápagos, ya conocía la necesidad de fomentar la pesca y consumo del pez león, así como la exquisitez que representaba esta variedad en la gastronomía. A través de su experiencia en el arte del sushi y la comida de mar en otras islas del Caribe, el también llamado Chef foro sabía preparar diferentes platillos con base en pez león, los cuales fueron incluidos en la carta de la posada.

Así como Odreman, al menos una decena de chef y cocineros venezolanos tratan de impulsar el consumo del pez león entre los turistas que visitan Los Roques. Es un plato exótico, por lo que puede venderse a un costo superior, y ese diferencial de precio es un incentivo para los pescadores a ir tras esta especie. De esta manera el depredador pasa de ser cazador a presa.

Caza del Pez León
Foto cortesía

Chef foro alerta que un solo pez león puede engullir docenas de peces pequeños enteros a la vez. Esta especie tiene un apetito voraz, y se necesita mucho alimento para llenar su estómago, capaz de aumentar hasta 30 veces su tamaño normal. No solo come peces, también se alimenta de pequeños cangrejos, camarones, pulpos bebés, crías de langostas, caballitos de mar y hasta caracoles, los cuales contemplan las más de 70 especies marinas que forman parte de su menú. Impactando de manera negativa la biodiversidad de las aguas de Los Roques, así como su economía que se sustenta en el turismo y la pesca. 

Leer más  Clausuraron la mina ilegal Bulla Loca que colapsó en Bolívar

Odreman, quien también es buzo profesional y aficionado a la pesca, alerta que el pez león es capaz de reducir significativamente todas las especias de la zona, pero en especial las crías de langostas y camarones, así como a los juveniles de pargo, mero, corvina y peces loros. En pocas palabras: acaba con las especias que generan beneficio económico a los pescadores de la localidad. 

Los Roques
Foto cortesía

Las cavas de los turistas como solución 

Comerse al pez león amerita de al menos tres pasos: la pesca, que debe hacerse de manera adecuada en vista de las venenosas espinas que este pez tiene en su dorso, evitando el contacto.  La preparación, donde se extraen las espinas dejando un pescado que completamente apto para el consumo. Finalmente, la comercialización, que en Los Roques se instauró rápidamente, ofreciendo en las cavas de consumo para los turistas en los callos opciones con pez león como ceviches, sushi, tiraditos y sashimi. 

Así, diariamente, decenas de ejemplares de pez león salían en las cavas de los visitantes del archipiélago Los Roques como carne exótica y divina para el consumo. La única manera probada de poder disminuir la presencia del pez invasor en las aguas del archipiélago es esta, copiando modelos exitosos como el de la isla vecina de Bonaire, quienes han tenido un buen desempeño en el control de la plaga, promocionando el consumo del pez león como pesca del día y utilizando sus espinas como materia prima para bisutería. 

Leer más  La lucha contra el cambio climático en Venezuela carece de planificación
Cavas de pez león
Foto cortesía

Un año en el que creció la amenaza

Con el decreto de la cuarentena por el coronavirus en Venezuela, y el escándalo por algunos de los primeros contagios por covid-19 en Los Roques tras la grabación de un video de reguetón, el parque nacional cerró sus puertas a los turistas en marzo 2020, paralizando así la actividad comercial por completo, y con ello la urgente pesca y consumo del pez león. 

Algunos emprendedores y pescadores intentaron, a inicios del confinamiento, continuar con la pesca selectiva del pez león y comercializar el producto en Caracas, como delivery de pescado fresco de Los Roques, continuando con la extracción en pro de la erradicación de este espécimen. Sin embargo, a los días el cruce de lanchas hacia La Guaira también fue prohibido. Lo que pudo ser la oportunidad de que el pez león se masificara en consumo en la zona capital, como ya pasa en Bogotá donde el pez se consigue en algunas cadenas de supermercados, quedó en una idea descartada, dándole al pez león la oportunidad de reproducirse y de desarrollarse sin amenazas mientras el archipiélago venezolano continúa libre de turistas.

Según datos que maneja Francisco Odreman, y su equipo de pescadores, durante los meses que el archipiélago está cerrado a los turistas, la pesca del pez león se reduce en más de un 70%. Mientras que en las semanas que Los Roques estuvo reabierto al turismo -durante diciembre 2020 y hasta el 16 de enero de 2021- se había retomado la pesca deportiva por parte de los buzos y se reactivaban los pedidos para el menú de algunas posadas. El parque permanece cerrado desde el pasado 17 de enero, y Odreman estima que, por la conducta reproductiva de esta especie, durante la pandemia el pez león pudiese haber triplicado su presencia en aguas venezolanas.

Leer más  La lucha contra el cambio climático en Venezuela carece de planificación
Pez León
Foto cortesía

Para pescadores, habitantes, dueños de posadas y los cocineros en Los Roques, el año de aislamiento ha representado grandes pérdidas económicas, a las que se le sumará la merma que dejará el impacto de la proliferación –sin control ni plan de acción– de las dos variedades de pez león que abundan en el archipiélago venezolano.

Noticias relacionadas