• A los 16 años de edad llegó a pie a París, donde aprendió el arte de la marroquinería. Sus bolsos y baúles se caracterizaban por una calidad y elegancia únicas, llevándolo a diseñar las maletas de la emperatriz Eugenia de Montijo (esposa de Napoleón III). Foto: Getty Images

Hace exactamente dos siglos nació el diseñador Louis Vuitton (4 de agosto de 1821) en el departamento de Anchay, Francia. El también empresario fundó la compañía de bolsos, baúles y otros artículos (principalmente de cuero) que lleva su nombre. Actualmente se mantiene como una de las más prestigiosas del mercado mundial. 

Hijo del campesino Xavier Vuitton y la sombrerera Coronne Vuitton, Louis decidió abandonar su pueblo natal para irse a París caminando, cuando tenía 16 años de edad. Ya en la capital, se convirtió en aprendiz de Monsieur Maréchal, quien era el encargado de fabricar el equipaje para los huéspedes del Hotel Le Meurice. 

Louis Vuitton, el francés que revolucionó el mundo de la moda
Louis Vuitton, diseñador y empresario | Foto: Cortesía.

En 1854 Vuitton se independizó y se separó de Maréchal; para ese entonces, ya estaba instaurado el segundo imperio y los avances de Francia, tanto urbanos como sociales, eran cada vez más notorios. En este contexto, abrió la tienda Louis Vuitton que lo inmortalizaría décadas después; en ese momento, se ubicaba en la calle Neuve-des-Capucines (hoy en día tiene unas 440 sedes en aproximadamente 60 países). 

Cinco años después, en 1859, inauguró el taller Atelier. En el cual se dedicó a fabricar a mano los bolsos y maletas que él mismo diseñó. Este lugar se convirtió en la casa familiar de París donde se desarrollaron los Vuitton. 

¿A qué se debe el renombre de Louis Vuitton? 

Los diseños únicos de su trabajo, acompañados de un alto nivel de calidad, convirtieron a la marroquinería Vuitton en una de las más lujosas y demandadas. Esto lo llevó a la apertura de una tienda en Londres, Inglaterra, para el año 1885. Un año después mejoró la seguridad de sus baúles por medio de la cerradura Tumbler (que elaboró junto con su primer hijo, George Vuitton), y esto derivó en una atracción mayor por parte del público. 

En el año 1867 fue reconocido con la medalla de bronce de la Exposición Universal de París.

Su trayectoria lo dirigió a clientes de gran relevancia, incluyendo la emperatriz Eugenia de Montijo –esposa de Napoleón III–, quien potenció la comercialización de la marca Louis Vuitton. El artesano se encargó de diseñar sus maletas reales y empacar sus valiosos vestidos.

Louis Vuitton se casó con Clemence-Emilie Parriaux, con quien tuvo tres hijos: Georges, Blanche y Emilie Vuitton. Falleció el 5 de febrero de 1892 en Asnières-sur-Seine, Francia, a los 70 años de edad, debido a insuficiencia renal. Desde ese momento, su único hijo varón se hizo cargo del negocio. 

Louis Vuitton después de la muerte de su fundador

Con Georges Vuitton al mando, la empresa empleó y adoptó varios cambios que la encaminaron hacia lo que es actualmente. Él fue quien comenzó a estampar todos los productos con las iniciales de su padre para rendirle tributo y evitar la falsificación de estos. De esta forma nació el monograma LV. 

Patentó la cerradura que desarrolló con su padre años atrás, Tumbler, y la perfeccionó en un periodo de varios años. Estaba tan confiado de la seguridad que tenía este mecanismo, que retó públicamente (en un periódico) al ilusionista y escapista Harry Houdini, quien era muy popular en ese momento por sus shows. Houdini no participó en el desafío, pero la eficacia de la cerradura era irrefutable y su uso postergado hasta la modernidad lo demuestra. 

Georges Vuitton estuvo casado con Josephine Patrelle hasta que falleció; juntos tuvieron cinco hijos, quienes fueron (en orden cronológico): Marie, Gaston, los gemelos Jean y Pierre, y su hijo menor Marcel Vuitton. 

Louis Vuitton, el francés que revolucionó el mundo de la moda
Georges Vuitton con su esposa Josephine Patrelle y sus hijos Gaston, Pierre y Jean | Foto: Apica.

Cuando murió Georges (en 1936 26 de octubre, en Asnières-sur-Seine, Francia, a los 79 años de edad), el negocio de marroquinería volvió a ser heredado por el hijo mayor (masculino). Esta vez fue Gaston Louis Vuitton. 

Con la idea de respetar y mejorar la iniciativa de su padre, Gaston mantuvo el monograma LV, pero comenzó a elaborarlo con algodón y lino como base. A diferencia de su padre y su abuelo, el nuevo dueño de Louis Vuitton también era afín a la fotografía, jardinería y el arte en general; es por ello que la empresa pasó a fabricar productos de orfebrería y artículos de viaje, además de los bolsos y baúles tradicionales. Muchos afirman que le dio el toque a la marca para que los productos terminaran de ser verdaderas obras de arte. 

“El coleccionista de objetos”, como lo conocían en la época, murió en 1970 a los 87 años de edad. Con él terminó el liderazgo familiar de la compañía icónica. 

En 1987, Louis Vuitton se fusionó con la empresa Moët Hennessy en conjunto dieron inicio al gigante moderno LVMH (por las siglas de cada una, unidas). Desde 1989 quien está a cargo de LVMH es el francés Bernard Arnault.

Noticias relacionadas