Esta nota es una traducción hecha por El Diario de la nota With stress on officers spiking, New York joins wave of police agencies using therapy dogs, original de The Washington Post.

El primer subcomisionado del Departamento de Policía de Nueva York, Benjamin B. Tucker, sabe que lo que un oficial ve en el trabajo puede tener un impacto durante muchos años. Todavía recuerda el incendio provocado mortal relacionado con pandillas cuando era un policía de barrio en Brooklyn en la década de 1970, y el asesinato sin resolver de un hombre que encontró tirado en el pavimento, con la herida de bala detrás de la oreja aún no visible.

En 2019, cuando el departamento de policía más grande del país lidiaba con una ola récord de suicidios de oficiales, Tucker trajo esos recuerdos con él mientras él y otros altos mandos del departamento intercambiaban ideas sobre cómo aliviar el estrés relacionado con el trabajo.

Entran Jenny y Piper, detectives de Labrador retriever amarillo recién creados con la Unidad de Asistencia al Empleado de la policía de Nueva York. Su ternura y su comportamiento cariñoso ayudarán a conectarse con los oficiales queenfrentan una tensión creciente en las calles y pueden estar sufriendo silenciosamente problemas laborales o personales.

Tras el asesinato de George Floyd bajo custodia policial y la violación del Capitolio de los Estados Unidos el 6 de enero, la furia contra la policía es “tremenda” y “exponencialmente más palpable de lo que ha sido en el pasado”, dijo Tucker, quien presidió Ceremonia de juramentación de Jenny y Piper en la sede de la policía a principios de este mes.

Las agresiones a los agentes están aumentando y las comunidades de todo el país se enfrentan a llamadas para “desfinanciar a la policía”. Los policías vencedores se enfrentan habitualmente a abucheos, y a una pared de cámaras de teléfonos móviles configuradas para “grabar”, cuando realizan sus tareas diarias.

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La teniente Janna Salisbury, que dirige la Unidad de Asistencia al Empleado de Nueva York, dijo que los perros y sus cuidadores “responderán a incidentes críticos que involucren a miembros del departamento dentro y fuera de servicio… rompiendo las barreras tradicionales de salud mental, reduciendo los estigmas que a menudo impiden que los oficiales buscando atención “.

Los servicios proporcionados por la EAU son confidenciales, y la unidad derivará a los policías en problemas a consejeros fuera del departamento de forma anónima si así lo desean.

Agencias de aplicación de la ley en todo el país Cada vez más recurren a los perros de apoyo emocional, una desviación de los programas K-9 donde los animales buscan drogas, armas y explosivos, controlan multitudes o rastrean a las personas desaparecidas.

En el mes posterior al 6 de enero, cuatro perros de terapia policial de dos departamentos del norte de Virginia, el condado de Fairfax y el condado de Arlington, pasaron tiempo con oficiales de la policía del Capitolio de los EE. UU. Y soldados de la Guardia Nacional, dijo Allison Cutright, quien dirige el FRK9 con sede en Fredericksburg, Virginia. que entrenó a esos perros. Ella estimó que docenas de departamentos han lanzado programas K-9 en los últimos años.

Los agentes del orden van a trabajar todos los días y hacen un trabajo que la mayoría de la gente no haría por un millón de dólaresu0022, dijo Patrick Yoes, presidente nacional de la Orden Fraternal de la Policía, al describir cómo los agentes de patrulla han sido vilipendiados durante los últimos 18 meses. u0022Que la gente se vuelva contra nosotros de la manera en que lo hizo … creo que a todos los oficiales les pasó facturau0022.
Nueva York
Vivian Rodgriguez participa durante la capacitación en Bedford Hills Correctional Facility, una prisión de mujeres de máxima seguridad. Las agencias policiales de todo el país, incluido el Departamento de Policía de Nueva York, están utilizando perros de terapia para ayudar a los oficiales a aliviar el estrés relacionado con el trabajo. (Jeenah Moon / para The Washington Post)

Un maridaje inusual

Un programa llamado Puppies Behind Bars es responsable de llevar a Jenny y Piper a la unidad de asistencia al empleado de Nueva York. Para aprender a manejar perros.,Cuatro oficiales de la EAU pasaron recientemente dos semanas en el Bedford Hills Correctional Center, una prisión de mujeres de máxima seguridad en el condado de Westchester, donde las reclusas crían cachorros para que se conviertan en animales de terapia y servicio.

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Las mujeres están alojadas en su propia unidad; sus aprendices de K-9 duermen a su lado en celdas.

Tiffany Richway, de 29 años, está cumpliendo una sentencia de 11 años por una condena por drogas de alto nivel en un condado remoto al norte del estado, cerca de la frontera con Canadá. Richway dijo que el programa K-9 le ha dado un propósito mientras trabaja en su sentencia.

“Hace que la prisión sea mucho más fácil”, dijo. “Te da algo por lo que despertarte”.

Richway dijo que ella y sus colegas en el programa comenzaron recientemente a entrenar perros de terapia para su uso en los departamentos de policía. Ya estaban entrenando perros para otros trabajos, incluso para consolar a los veteranos que sufren de trastorno de estrés postraumático o TEPT.

En la prisión, los agentes de la policía de Nueva York se emparejaron con los reclusos que los entrenaron para convertirse en los controladores y los controladores de respaldo de Jenny y Piper. La pareja de entrenadores de convictos y policías fue extraña al principio, según algunos de los presos y oficiales. Pero rápidamente vieron la importancia de su propósito común.

Sargento. Anthony Manza, quien es el manejador de respaldo de Piper, dijo que los perros “tienen una habilidad asombrosa para detectar a una persona necesitada y ofrecer compasión incondicional”. Algunos perros de terapia se utilizan para aliviar el estrés de las víctimas de violencia doméstica y agresión sexual, a menudo con una táctica llamada “cuéntame una historia”, en la que el perro de terapia se sienta en el regazo de una persona enferma mientras se le pide que transmita una situación traumática. evento.

Nuestra intención es llevar técnicas como esta a los policías en crisis, romper el muro que ha construido el estigma detrás de la salud mental, hacer que los oficiales se abran en situaciones en las que normalmente no se abren, incluidos los pensamientos suicidasu0022, agregó. Dijo Manza.

En el condado de Fairfax, tres perros policía hacen varias rondas de controles aleatorios con los oficiales cada semana, mientras también responden a incidentes críticos y cualquier situación que pueda ser difícil para los oficiales, dijo el teniente Christopher Sharp, quien dirige la unidad de Servicios de apoyo a incidentes.

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Los perros tienden a desarmar a los oficiales que podrían beneficiarse de la ayuda pero que de otra manera no se sentirían cómodos hablando libremente con un colega, dijo Sharp. También se utilizan en la comunidad, apareciendo en National Night Out y otros eventos públicos.

Patrick Yoes, presidente nacional de la FOP, dijo que los perros de terapia policial son “muy necesarios”, especialmente si se usan de una manera que evita que los oficiales sientan que enfrentarán represalias por buscar ayuda o asesoramiento. Los perros, dijo, son hábiles para conseguir que grandes policías “varoniles” “se sienten en el suelo y jueguen con ellos”.

Con el estrés en los oficiales aumentando, Nueva York se une a la ola de agencias policiales que usan perros de terapia
La entrenadora Danielle Johnson demuestra cómo entrenar a un perro. El Departamento de Policía de Nueva York utiliza perros de apoyo emocional para ayudar a los oficiales a aliviar el estrés. (Jeenah Moon / para The Washington Post)

Trauma tanto físico como mental

Blue HELP, una organización dedicada a promover la salud mental para las fuerzas del orden, dice que al menos 89 agentes se han suicidado en lo que va de año. Eso se compara con 239 suicidios policiales en 2019, el año en que 10 agentes de Nueva York se quitaron la vida, 174 en 2020 y 182 en 2018.

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Cuatro agentes que estaban en el Capitolio el 6 de enero se han quitado la vida desde entonces.

Muchos oficiales que sobrevivieron a los ataques en el Capitolio continúan sufriendo lesiones mentales y físicas.

Los ataques a oficiales en todo el país están en aumento, según estadísticas compiladas por la FOP, con 185 oficiales baleados, incluidos 35 muertos, hasta julio. La organización dijo que los ataques estilo emboscada aumentaron un 126 por ciento con respecto al año pasado, con 67 policías baleados en 52 incidentes. A principios de este mes, dos policías de Chicago fueron baleados, uno fatalmente, durante una parada de tráfico.

Betsy Brantner Smith, sargento de policía retirado y dueño de un perro desde hace mucho tiempo que trabajaba en los suburbios de Chicago, solía supervisar la unidad K-9 de su agencia.

Ahora, portavoz de la Asociación Nacional de Policía y entrenadora de policía, Smith solía llevar a Marley, su pastor alemán rescatado, a cursos que imparte con su esposo en todo el país.

Marley, que murió recientemente, tenía la habilidad de acercarse a los oficiales en sus sesiones de entrenamiento que habían estado en un tiroteo o que habían experimentado otro tipo de trauma, dijo Smith.

Mientras estaba en el trabajo, sus mascotas siempre fueron una fuente de consuelo. En su reciente período de tratamiento de ocho meses para el cáncer de mama, su par de mezclas de terrier fueron una presencia amorosa que la ayudó a pasar.

“Esa es una de las razones por las que creo firmemente en estos programas, es porque he visto con mis propias experiencias personales lo que los perros significan para las personas, [y] lo que los perros han significado para nuestra familia”, dijo Smith.

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