- El país con mayor número de refugiados en el mundo es Siria, con más de 6,7 millones. Le sigue Venezuela, que ya superó los 6 millones, y luego Afganistán, con más de 2,6 millones | Foto: Acnur.
Los migrantes y refugiados venezolanos contabilizados en todo el mundo pasó de 5.6 millones a 6.024.351, de acuerdo con los datos actualizados de la Plataforma de Coordinación Interagencial de Refugiados y Migrantes de Venezuela (R4V) de la Organización de las Naciones Unidas (ONU).
De esta manera, el país reafirma su segundo lugar entre los países con más cantidad de refugiados a escala mundial, aunque cada vez se acerca más al primero, Siria, que cuenta con más de 6.7 millones.
Asimismo, R4V detalló que los venezolanos que se han desplazado a los países de Latinoamérica y el Caribe son al menos 4.978.078.
Plataforma Regional de Coordinación Interagencial
Se estableció para orientar y desarrollar respuestas a los migrantes y refugiados de Venezuela. Esto fue solicitado por António Guterres, Secretario General de la ONU, a la oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados (Acnur) y la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) el 12 de abril de 2018. nnEn la actualidad, está conformada por múltiples organizaciones: 17 agencias de la ONU, 15 ONGs, cinco donantes, dos instituciones financieras internacionales y el Movimiento de la Cruz Roja.
Todo esto demuestra que se cumplió la predicción de la Organización de Estados Americanos (OEA), que estimaba que para finales del 2021 el número de migrantes venezolanos estaría entre los 6 y los 7 millones.
Los riesgos que enfrentan los migrantes venezolanos
Según el Centro de Derechos Humanos (CDH) de la Universidad Católica Andrés Bello (UCAB), todos los venezolanos se exponen a diversos peligros en su desesperado viaje en busca de una mejor calidad de vida. Sin embargo, las mujeres, niños, niñas y adolescentes son los más vulnerables bajo las condiciones irregulares en las que se ven obligados a movilizarse.
“Bien sea por que tomen rutas regulares e irregulares, o por documentación, sus condiciones les hacen más propensos a ser captados o sometidos a situaciones que se constituyen en formas análogas a la esclavitud moderna”, acotó la institución en un informe que data de agosto de 2021.
En 2018, el CDH de la UCAB profundizó en que la trata de personas para explotación laboral o sexual representa la mayor parte de los casos migratorios, los cuales se agravan en Venezuela debido al éxodo masivo y a las condiciones en las que son recibidos en otros países.
La entidad reveló que, para ese mismo año, alrededor de 40,3 millones de personas en el mundo eran víctimas de esclavitud moderna. De ellas, dos millones se encontraban en Latinoamérica, destacando Venezuela con una tasa de 5,6 víctimas por cada 1.000 habitantes.
Estas realidades se suman a la xenofobia y aporofobia que afrontan los venezolanos que logran llegar a salvo a otros países. Por medio de un informe de 2019, el Alto Comisionado de la Acnur alertó que el 56,72 % de los venezolanos residentes en otros países de Latinoamérica había sufrido algún tipo de discriminación.
La cantidad de refugiados venezolanos va en aumento
Angenila Jolie, enviada especial del Alto Comisionado de la Acnur desde abril de 2012, se ha pronunciado en reiteradas ocasiones respecto al éxodo venezolano. Incluso, en junio de 2019 viajó a la frontera entre Colombia y Venezuela para evaluar y optimizar la respuesta a la situación.
Para el último trimestre de 2015, la Acnur indicó que el número de desplazados de Venezuela comenzó a superar el medio millón (695.000). Sin embargo, la cifra aumentó drásticamente para junio de 2019, superando los 4 millones.
La cifra nuevamente incrementó y llegó a 5.4 millones en noviembre de 2020. En agosto de 2021, Jolie expuso una gráfica en una publicación que hizo en Instagram y allí se puede notar, en orden descendente, a Siria, Venezuela y Afganistán encabezando la lista de los países con más refugiados en Latinoamérica y el Caribe.
La actriz aseguró que cree apasionadamente en los derechos humanos y es esa la principal razón por la que empezó a trabajar con personas desplazadas. “No por caridad, sino por un profundo respeto hacia ellos y sus familias, y por todo lo que siguen superando, a pesar de tanta persecución, desigualdad y justicia”, añadió.