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- Gran Bretaña, Australia y Canadá se unieron a la decisión de Estados Unidos sobre el evento que se realizará desde el 4 hasta el 22 de febrero de 2022
Los Juegos Olímpicos de Invierno de Pekín 2022 comenzaron a ser noticia, pero no desde la perspectiva deportiva, sino desde la perspectiva política.
Estados Unidos anunció el lunes 6 de diciembre que no enviará ningún representante diplomático al evento en Pekín ante las preocupaciones por las violaciones a los derechos humanos en China. A pesar de esta medida, los atletas sí participarán y contarán con apoyo oficial.
“La presencia de la representación diplomática estadounidense en los Juegos sería como si no hubiera pasado nada, a pesar de las flagrantes violaciones de los derechos humanos y las atrocidades de China en Sinkiang. Simplemente no podemos hacer eso”, dijo Jen Psaki, secretaria de prensa de la Casa Blanca.
Nancy Pelosi, presidenta de la Cámara de Representantes, apoyó la decisión del gobierno estadounidense y condenó la violación de derechos humanos en el país asiático.
Dos días después, Australia, Canadá y Reino Unido se unieron al boicot contra los Juegos Olímpicos en denuncia a las violaciones de derechos humanos en la localidad de Xinjiang en contra de los ciudadanos musulmanes.
“Habrá un boicoteo diplomático a los Juegos Olímpicos de Invierno en Pekín. No está previsto que ningún ministro ni cargo público asistan a esos juegos”, afirmó Boris Johnson en declaraciones a la Cámara de los Comunes.
¿Qué ocurre en Xinjiang?
Autoridades chinas han reprimido a grupos minoritarios en Xinjiang, quienes practican el Islam. La represión incluye prohibir los velos, las barbas largas y los nombres islámicos, entre otras cosas.
Las autoridades también recopilaron datos biométricos de los residentes y realizaron verificaciones al azar en sus teléfonos para buscar contenido que se considere sospechoso.
También hay testigos que han denunciado campos de detención en la región china. Exdetenios relataron que sufrieron abusos dentro de los campamentos, como privación de comida y sueño, inyecciones forzadas, esterilizaciones forzadas, abortos y violaciones en grupo.
El Departamento de Estado de Estados Unidos estimó que hasta dos millones de uigures y otras minorías musulmanas han pasado por esa extensa red de centros de detención.
Emmanuel Macron, presidente de Francia, expresó que había que tener una postura más firme sobre el boicot a Pekín 2022.
“El boicot diplomático es muy pequeño y simbólico. Hace falta ser claro. Solo si se hace un boicot completo y no se envía atletas podrían cambiarse cosas y realizar acciones útiles. Yo soy partidario de hacer cosas que tengan un efecto útil”, dijo Macron.
Boicot a los Juegos Olímpicos
No es la primera vez que la polémica alrededor de unos Juegos Olímpicos no es sobre lo deportivo, sino sobre lo político.
Los Juegos Olímpicos de Montreal 1976 estuvieron marcados en un boicot de 22 países africanos, organizado por Tanzania, en protesta luego de que el equipo de rugby de Nueva Zelanda hizo una gira por Suráfrica, país que se encontraba bajo el apartheid en el que había segregación racial y discriminación hacia los afrodescendientes.
Los países africanos que no asistieron fueron: Algeria, Camerún, Congo, Etiopía, Gabón, Gambia, Ghana, Kenya, Madagascar, Malawi, Malí, Marruecos, Níger, Nigeria, Somalia, Sudán, Suazilandia, Tanzania, Togo, Túnez, Uganda, Zambia.
En la siguiente edición fueron los Juegos Olímpicos de Moscú 1980 en la que Estados Unidos decidió no enviar a ningún atleta. El presidente estadounidense para ese entonces, Jimmy Carter, amenazó a los atletas de revocar su pasaporte si acudían a Moscú.
67 países no participaron y se unieron al boicot liderado por Estados Unidos en reacción a la invasión de la Unión Soviética a Afganistán en diciembre de 1979. Solo participaron 80 naciones que fue el número más bajo desde 1956.
Cuatro años más tarde, la Unión Soviética intentó tomar revancha y liderar un nuevo boicot. Esta vez para los Juegos Olímpicos de Los Ángeles 1984. Pero no tuvo éxito, puesto que participaron 140 países, cifra récord en esa justa olímpica.
En 1988, para la cita olímpica de Seúl, Corea del Sur, Corea del Norte realizó un complot ante la nación fronteriza, en la que solo se unieron Cuba, Etiopía y Nicaragua. Pero esta ocasión 159 naciones marcaron un récord para la época.
Una vez más la historia de una cita olímpica está impregnada con la política entre el conflicto de China contra Estados Unidos y varios países de Asia y Europa. Hasta la fecha sí habrá participación de atletas, pero que puede crear un antecedente para futuras justas olímpicas.
