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- El italiano, que dirigió la diplomacia vaticana en mediaciones internacionales durante 15 años, falleció tras haber contraído covid-19
El cardenal Angelo Sodano, quien fue secretario de Estado con los papas Juan Pablo II y de Benedicto XVI, falleció en Roma a los 94 años de edad el 27 de mayo.
Vatican News informó que el purpurado, que padecía de neumonía, se encontraba hospitalizado desde la noche del 9 de mayo.
“Anoche falleció el cardenal Angelo Sodano, a los 94 años, quien desde hacía tiempo estaba ingresado en el Hospital Columbus-Gemelli de Roma tras haber contraído covid-19”, indicó la agencia.
Como secretario de Estado, Sodano dirigió la diplomacia vaticana en mediaciones internacionales e iniciativas de paz durante 15 años. Además, fue decano del Colegio Cardenalicio y nuncio apostólico en Chile durante los años de dictadura.
Vida de Sodano
El cardenal nació el 23 de noviembre de 1927 en Isola d’Asti, en la región de Piamonte (norte de Italia). Vatican News reseñó que sus padres, Giovanni y Delfina Sodano, pertenecían a una familia rural piamontesa que realizó notables aportaciones a la vida de la Iglesia y del Estado.
Su padre fue diputado demócrata cristiano en el Parlamento Italiano por tres periodos, desde 1948 hasta 1963.
Sodano realizó sus estudios filosóficos y teológicos en el seminario episcopal de Asti. En Roma, obtuvo su doble titulación en teología en la Pontificia Universidad Gregoriana y en derecho canónico en la Pontificia Universidad Lateranense.
El 23 de septiembre de 1950 lo ordenaron sacerdote en la catedral de Asti. Nueve años más tarde, el cardenal Angelo dell’Acqua, entonces sustituto de la Secretaría de Estado, lo llamó al servicio de la Santa Sede.
Además, asistió a los cursos de la Pontificia Academia Eclesiástica, y luego fue destinado a las nunciaturas apostólicas de Ecuador, Uruguay y Chile, como secretario de nunciatura.
Trabajo como nuncio y secretario de Estado
En 1968 regresó a Roma, donde trabajó 10 años en el Consejo para los Asuntos Públicos de la Iglesia. Como miembro de las Misiones de la Santa Sede, Sodano visitó Rumanía, Hungría y Alemania del Este.
El 30 de noviembre de 1977, San Pablo VI lo nombró arzobispo titular de Nova di Cesare y nuncio apostólico en Chile. Sodano trabajó en el país sudamericano durante 10 años, tiempo en el que visitó casi todas las diócesis de la nación.
Al cardenal se le atribuye la exitosa mediación a cargo del Vaticano en 1978 entre Chile y Argentina para la resolución de la disputa territorial del canal de Beagle.
En 1989, Sodano asumió el título de secretario para las Relaciones con los Estados, dedicándose en particular a la Comisión Pontificia para Rusia, de la que era presidente.
En diciembre de 1990 asumió el cargo de prosecretario de Estado, convirtiéndose en secretario de Estado el 29 de junio de 1991, un día después de ser creado cardenal. En 2002 fue elegido vicedecano del Colegio de cardenales.
Participó en el cónclave que eligió a Benedicto XVI en el año 2005, quien apenas subió al trono papal, el 30 de abril de 2005, lo reconfirmó como secretario de Estado y aprobó su elección como decano del Colegio cardenalicio
Unos meses después, el papa aceptó su renuncia al cargo de secretario de Estado y le sucedió el cardenal Tarcisio Bertone. En 2019, Francisco aceptó la renuncia del cardenal del cargo de decano del Colegio cardenalicio.
Acusaciones en contra de Sodano
El cardenal fue acusado en Chile de haber encubierto los abusos a menores que cometió el sacerdote Fernando Karadima, con quien tenía una relación cercana.
La agencia de noticias EFE detalló que Sodano fue criticado por no informar de las denuncias de las víctimas, así como poner una buena palabra para promover como obispos a aquellos que encubrieron el caso.
“Fue un hombre que hizo tanto daño a tantas personas y encubrió años de abusos en Chile y en el mundo”, indicó Juan Carlos Cruz, una de las víctimas de Karadima, al conocerse la noticia del fallecimiento del cardenal.
https://twitter.com/jccruzchellew/status/1530336012051877890
En el año 2010 fue el arzobispo de Viena, Christoph Schönborn, quien acusó a Sodano de haber ofendido a las víctimas de abuso sexual y de haber encubierto en su momento la investigación de los crímenes cometidos por el entonces jefe de la diócesis vienesa, Hans Hermann Groër.
Según el experto del Vaticano John Allen, en sus últimos años Sodano recibió repetidas denuncias por restar importancia a los casos de abusos sexuales y por bloquear las investigaciones sobre el escándalo.
