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- El escalador emigró a España en 2017. Actualmente forma parte de la selección de escalada del país europeo
Faltan menos de dos años para los Juegos Olímpicos de París 2024, y los atletas se están preparando para las diversas disciplinas que habrá en la justa olímpica. Uno de ellos es Erik Noya, un migrante venezolano que sueña con estar en la competición de escalada, pero lo hará representando a España.
Erik Noya nació en Venezuela, pero viene de una familia de migrantes. Sus familiares maternos tienen orígenes alemanes y catalanes. De hecho, su bisabuelo es Félix Cardona Puig, un reconocido explorador de Venezuela, quien además formó parte del descubrimiento del Salto Ángel. Por su parte, sus abuelos paternos son españoles y llegaron a Venezuela luego de huir de la hambruna que dejó la Guerra Civil entre los años de 1936 y 1939.
Noya nació el 9 de febrero de 1994 en Caracas y se crió en San Antonio de Los Altos, en el estado Miranda. El deporte fue algo que siempre le inculcaron sus padres e incluso practicó natación durante varios años en su infancia.
A los 9 años de edad tuvo su primer encuentro con la disciplina de la escalada durante una travesía en el Parque Cuevas del Indio, que está ubicado en el municipio El Hatillo. Allí notó que tenía cierta facilidad para lograr escalar, y luego de ver ese deporte en el Muro de La Morita en Miranda, decidió que quería dedicarse a eso.
“Le dije a mi madre que quería practicar eso porque me llamó la atención y fue como amor a primera vista. Al principio no estaba muy convencida y tuve que estar detrás de ella durante una semana. Luego de una semana, lo intenté y me fue genial, no pude parar y llegué a competir con el equipo de Miranda”, recordó Noya en entrevista exclusiva para El Diario.
Migrar de Venezuela
Desde los 8 años de edad, Noya comenzó a practicar regularmente la escalada. A medida que iba mejorando quería entrar en competencias internacionales y participar en diferentes eventos de la escalada de velocidad, que era la modalidad que más le gustaba.
En 2016 y 2017 debido a las protestas antigubernamentales en el país, a Erik se le complicó seguir entrenando y compitiendo.
“En el Ministerio del Deporte nos decían que íbamos a ir a competencias pero luego no íbamos a ningún lado. No habían competencias nacionales y la federación quedó acéfala, no había nadie que liderará la escalada en Venezuela y nos estabamos atrasando muchísimo”, detalló Noya.
El atleta relató que formó parte de las protestas durante esos años ante la crisis social y humanitaria que había en el país, pero luego de cierto tiempo notó que no quería hacerlo más y que no lo hacía feliz.
“Me fui buscando una estabilidad económica, porque era un país muy peligroso, porque no existe una seguridad jurídica que ampare la seguridad y era un régimen dictador”, detalló. Y así cómo él vino de una familia de migrantes, decidió migrar y vivir también esa experiencia.
Tras migrar a España llegó a la casa de su madrina, Paz Rodríguez Domínguez, quien vivía en Madrid. Allá en la capital española había una modalidad de escalada velocidad para seguir practicando.
Estuvo durante un año en casa de su madrina, para tener dinero tuvo que trabajar como repartidor de comida y también grababa videos en las redes sociales para ayudar a personas durante sus entrenamientos deportivos y ejercicios.
El dueño de un muro de escalada vio uno de estos videos y lo llamó para que diera clases sobre actividades físicas y cómo entrenar tu cuerpo para la escalada. También , mediante un amigo, pudo tener contacto con la Federación Española de Escalada para retomar su camino como atleta en la escalada luego de tener que sobrevivir como repartidor.
En 2018, Noya quedó campeón de España y obtuvo el récord nacional en la modalidad de velocidad. Esta fue su primera oportunidad de demostrar que esta era su pasión.
Al año siguiente volvió a quedar campeón del país europeo y el presidente de la Federación Española de Deportes de Montaña y Escalada, Alberto Ayora, lo tomó en cuenta para darle mayor importancia al desarrollo de esta disciplina.
Desde ese momento, Erik empezó a formar las siguientes generaciones y también a entrenar una selección élite que compitiera al mejor nivel del continente y pudo conseguir el éxito en lo que más le gustaba.
Su mayor éxito lo consiguió en 2021, en el Campeonato Mundial de Escalada en Moscú (Rusia), donde obtuvo el segundo lugar por detrás del ucraniano Danyl Boldyrev.
“El punto de inflexión en el que puedo decir que me puedo dedicar completamente a escalar fue en septiembre de 2021, cuando conseguí el segundo lugar. Me siento muy orgulloso de no haber desistido cuando todo se veía bastante oscuro”, comentó.
Representar a España y no a Venezuela
Erik Noya busca estar en los Juegos Olímpicos de París 2024 con la delegación de España, aunque su formación y desarrollo como atleta fue en Venezuela. Noya reveló que tomó la decisión de estar con la delegación española porque lo valoraron como atleta.
“¿Por qué estoy representando a España actualmente? porque me valoran como atleta y me dan muchas más oportunidades de las que tuve en Venezuela. Hay una cultura deportiva, una cultura de escalada que no había en Venezuela. En Venezuela no había ni competencias nacionales. Yo llegué a ser séptimo del mundo con 17 años de edad, campeón suramericano, campeón de Juegos Bolivarianos y a muy poca gente le importó.
Espero que sea una enseñanza para los venezolanos de valorar lo que se tiene y aquí aplica la frase de ‘no se sabe lo que se tiene hasta que se pierde’. Siempre quise representar a Venezuela y lo hice por muchos años, pero dejaron morir a todos los atletas que crecimos allí y no soy el único caso”, dijo Noya.
El atleta agregó que también que debido a que vive en España tiene más sentido representar al país europeo y no a Venezuela. El país no tiene ningún representante en esta disciplina.
Su preparación para París 2024
Erik detalló que se está preparando diariamente para los Juegos Olímpicos de París 2024, evento que tendrá por segunda vez la escalada como una disciplina deportiva luego de que debutó como competición en Tokio 2020.
El siguiente Mundial será en Berna, Suiza, en 2023. También aprovechará para estar en todas las competiciones a nivel nacional y mantenerse a tono para llegar de la mejor manera a París 2024.
“Es una sensación increíble y que valoro a diario. Que la escalada sea parte del ciclo olímpico me ha abierto muchas puertas y fue una tremenda noticia porque obliga al gremio a tomarnos en cuenta”, destacó Noya.
Su meta está clara y estar en los Juegos Olímpicos representaría uno de los mayores logros en su carrera. Así como sus abuelos emigraron para encontrar una mejor calidad de vida, Erik Noya también lo hizo para poder practicar lo que le apasiona y lo que le hace feliz desde aquella montaña en El Hatillo, donde inició su amor por la escalada.
