• Con esta muerte aumenta a ocho la cifra de menores de edad que han muerto por inmersión en Lara, en los primeros siete meses de 2022

Un niño de 4 años de edad murió al caer a un tanque de agua sin tapa, cuando jugaba en su casa ubicada en Cabudare, municipio Palavecino (Lara). El hecho ocurrió el martes 23 de agosto.

Familiares del niño, al darse cuenta, le habrían practicado ejercicios de reanimación, pero ya había muerto por ahogamiento.

Efectivos del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (CICPC) trasladaron el cuerpo del niño a la morgue del Hospital Central de Barquisimeto, de acuerdo con lo que reseño La Prensa.

Hasta el momento, la familia del infante no ha ofrecido declaraciones a ningún medio de comunicación.

Accidente recurrente

Con la muerte del niño de 4 años, asciende a ocho la cantidad de menores de edad que pierden la vida por inmersión en el estado Lara en 2022, según datos de La Prensa.

Un caso reciente es el de un niño de 8 años, quien falleció en el río La Tetona, ubicado en el municipio Torres.

El suceso ocurrió luego de que padre e hijo salieran a buscar leña para el fogón de su casa, cerca del río Araque, que había crecido debido a las lluvias. 

Servicios de agua potable

El niño le habría pedido permiso a su padre para meterse en el agua y al no darse cuenta de la profundidad, cayó y murió por inmersión, reseñó La Prensa.

En el año 2020, se reportaron varias muertes de niños por esta causa en diversos municipios del estado Lara.

Un bebé de año y medio murió el jueves 22 de octubre de 2020 ahogado en su casa, en la comunidad de Playa Bonita, Barquisimeto.

A pesar que los familiares del infante se encontraban cerca cuando ocurrió el accidente, no se percataron que el tanque no tenía tapa.

Funcionarios del CICPC acudieron a la vivienda para llevar el cuerpo a la morgue del Hospital Central de Barquisimeto.

Casos en otros estados del país

En el estado Apure también se registró un hecho similar en diciembre de 2021. Un niño de 2 años de edad falleció al caer a un tanque destapado en San Felipe, San Fernando de Apure.

Según declararon sus familiares, el niño jugaba con otros en Paseo Libertador, un espacio habilitado por la Alcaldía de ese lugar para la comunidad.

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El tanque no contaba con ninguna medida de seguridad, estaba cubierto con ramas y una señal de advertencia.

Una de las niñas que jugaba con él alertó a los padres, quienes llamaron a los bomberos, Protección Civil y a la Policía de Apure.

Los efectivos iniciaron la búsqueda, pero como el infante no aparecía, vaciaron el tanque y una hora después encontraron el cadáver. Fue trasladado a la morgue del Hospital Pablo Acosta Ortiz.

Autoridades de San Felipe no se pronunciaron ante este accidente y se desconoce si el tanque de agua se tapó.

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