- La Familia Real publicó un comunicado con las palabras del nuevo rey del Reino Unido, quien se llamará Carlos III
Carlos, el nuevo rey del Reino Unido, lloró este jueves la muerte de “una soberana querida y una madre muy amada”, en su primera reacción tras el fallecimiento de la reina Isabel II a la edad de 96 años.
“El fallecimiento de mi amada madre, su majestad la reina, es el momento de la mayor tristeza para mí y para todos los miembros de mi familia”, señaló el nuevo monarca en un comunicado.
A statement from His Majesty The King: pic.twitter.com/AnBiyZCher
— The Royal Family (@RoyalFamily) September 8, 2022
El nuevo jefe de Estado del país, que llevará el nombre de Carlos III, según confirmó la residencia de Clarence House, accede al trono tras siete décadas esperando, ya que se convirtió en heredero con sólo 3 años de edad, cuando su madre asumió la corona el 6 de febrero de 1952.
Casado en segundas nupcias con Camilla, duquesa de Cornualles, Carlos llega a reinar cuando ya es abuelo y durante este tiempo de espera ha batido varios récords, el primero de los cuales es haber sido el heredero de más edad.
Carlos y su esposa, la reina consorte, que se habían desplazado como otros miembros de la familia real al castillo de Balmoral al empeorar el estado de salud de la reina, regresarán a Londres mañana.
“Sé que su muerte será muy sentida en el país, los territorios y la Commonwealth, y por infinidad de gente en todo el mundo”, agregó el rey Carlos en la misiva.
Lágrimas entre los ciudadanos
El castillo de Balmoral se halla este jueves entre la desolación de las decenas de ciudadanos que se han acercado para mostrar su pesar y la tranquilidad de un paraje alejado de cualquier población.
A unos 500 metros de la verja de entrada, custodiada solo por un policía, se apostaron los periodistas que consiguieron llegar a tiempo después de que esta mañana los médicos anunciasen su “preocupación” por el estado de salud de la reina.

Las decenas de personas que se desplazaron al lugar se mostraban serenos pero profundamente conmovidos ante una noticia que ha sacudido a todo el país.
Poco después de conocerse la muerte de Isabel II, comenzó a llover a cántaros en el lugar. Algo habitual en esta parte de la isla de Gran Bretaña pero que añadía más tristeza al momento.