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- La víctima se desempeñaba como ayudante de albañil y era el responsable de mantener a su esposa y sus cuatro hijos
El migrante venezolano Marcelo Antonio Larez González, de 21 años de edad, recibió un disparo en el pecho tras sostener una discusión con el dueño de la vivienda donde vivía, supuestamente motivada por una deuda de 100 reales (alrededor de 19 dólares), en Sao Paulo, Brasil.
El presunto homicida se trata de un plomero identificado como Alberto Pimentel de Oliveira, 41 años de edad, que se dio a la fuga tras cometer el crimen, pero logró ser detenido por la la Policía Civil de ese país.
¿Cómo ocurrieron los hechos?
Según la versión del Diario Do Grande, Pimentel de Oliveira fue a cobrar un monto restante relacionado con el espacio que González tenía alquilado con su familia. El valor de la deuda era de 500 reales (96 dólares) y ese mes la familia solo había podido pagar 400 reales.
De acuerdo con la versión de Eliannis Del Valle, de 24 años de edad y esposa de la víctima, en medio de la discusión por la deuda Marcelo le reclamó al dueño de la casa por que él también le debía al hermano de su esposa alrededor de 300 reales (57 dólares).
Luego, la discusión fue escalando en insultos y minutos después Pimentel le disparó al inmigrante en el pecho.
Del Valle explicó que durante el tiempo que vivieron ahí siempre cumplieron con el pago correspondiente y nunca hubo algún malentendido.
Así era la vida de Larez González
Del Valle relató a Do Grande que su esposo llegó a Brasil con apenas 19 años de edad con la esperanza de mejorar su calidad de vida. Se desempeñaba como ayudante de albañil y era el responsable de mantener a su esposa y a los cuatro hijos de la pareja.
Hizo un llamado a las autoridades para que se haga justicia por la muerte de su esposo. “Marcelo era un buen hombre, que trabajó mucho para cambiar la realidad de nuestra familia”, dijo Del Valle.
Explicó que cuando ingresó el casero a su residencia no imaginó que su esposo iba a morir “delante de nuestros ojos”.
