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- La Mesa Nacional para las Migraciones en Guatemala consideró que la normativa es un “disuasivo del Estado” para desalentar la migración
Un grupo de organizaciones sociales denunció este jueves 23 de febrero que una reforma a la ley migratoria de Guatemala amenaza con el cierre de albergues, tanto voluntarios como religiosos.
El Estado de Guatemala modificó en 2019 el artículo 101 de la Ley Migratoria Nacional para que los albergues que atienden personas en tránsito generen expedientes individuales de cada migrante y los trasladen a las autoridades, según explicaron en conferencia de prensa integrantes del Grupo Articulador de Organizaciones en Materia Migratoria.
Los albergues de migrantes tienen el primer semestre de 2023 para implementar este reglamento, según detalló la misma fuente.
“Exigir a cada migrante datos confidenciales y documentos que posiblemente no tienen es vulnerar sus derechos”, declaró a EFE Julia González, coordinadora de la Mesa Nacional para las Migraciones en Guatemala (Menamig).
González alertó que una decena de albergues ubicados en la Ciudad de Guatemala y en puntos fronterizos con México y Honduras podrían ser clausurados si no cumplen con esta normativa en el transcurso de este año.
Durante la conferencia de prensa, las organizaciones advirtieron que endurecer las obligaciones legales que deben cumplir los albergues perjudica directamente a los miles de migrantes que buscan refugio en su trayecto hacia los Estados Unidos.
Una normativa que busca desalentar la migración
En el año 2022, el albergue denominado Casa del Migrante, ubicado en la Ciudad de Guatemala y operado por la Iglesia Católica, atendió a más de 16.000 personas en tránsito de diferentes nacionalidades, principalmente de Honduras y Venezuela.
A criterio de González, la normativa podría considerarse como un “disuasivo del Estado” para desalentar la migración.
Por su parte, las autoridades guatemaltecas expulsaron a 15.000 personas que ingresaron al país de forma irregular el año pasado y endurecieron sus controles migratorios en las fronteras con Honduras.
Guatemala se ha convertido en la penúltima frontera para miles de migrantes centroamericanos y suramericanos que migran en busca de mejores condiciones de vida.
Además, unos 300.000 guatemaltecos intentan llegar a Estados Unidos cada año, según estimaciones oficiales.
Guatemala rechazó el ingreso a casi 7.000 venezolanos durante 2022
En diciembre de 2022, el Instituto Guatemalteco de Migración (IGM) reportó que el país negó el ingreso a 6.933 venezolanos que intentaron cruzar las fronteras terrestres de forma irregular en 2022.
Además de los casi 7.000 inmigrantes venezolanos, se suman otros 9.000 migrantes de 40 países que no pudieron acceder al país centroamericano.
“Guatemala es un país de contención migratoria, es un muro a servicio de la política de seguridad estadounidense”, declaró a EFE en diciembre de 2022 Ursula Roldán, investigadora especializada en migraciones de la universidad privada Rafael Landivar de Guatemala.
Las cifras de las autoridades guatemaltecas estiman que durante 2022 se expulsaron a 15.000 migrantes, la mayoría de ellos de nacionalidad venezolana.
Con información de EFE
