El gobierno de Panamá creó un “permiso de protección de seguridad humanitaria”, válido por dos años y prorrogable por otros seis años, que permitirá a los extranjeros indocumentados con más de un año en el país regularizar su situación y obtener una visa de trabajo.
El Decreto Ejecutivo Número 6 del 11 de marzo de 2025, firmado por el presidente José Raúl Mulino, establece que el permiso entró en vigor con su publicación el viernes 14 de marzo en la Gaceta Oficial.
El trámite del nuevo visado migratorio y laboral tendrá un costo de 1.250 dólares y el de la prórroga 450 dólares, indica el decreto, que precisa que los montos recaudados por concepto de servicios migratorios serán destinados para ayuda social y seguridad.
De acuerdo con un censo nacional realizado en 2023 en Panamá, se determinó que la población es de 4,2 millones de habitantes, de los cuales hay 249 mil extranjeros.

Procesos de regularización de migrantes impulsados por Panamá
En julio de 2023, el entonces gobierno de Laurentino Cortizo (2019-2024) creó un permiso temporal de protección para dar estatus migratorio por un periodo no prorrogable de dos años a extranjeros que tenían al menos un año en el país de forma irregular.
La medida se debió a que, tras la eliminación en agosto de 2019 del programa de regularización Crisol de Razas, muchos de los permisos obtenidos mediante el mismo se habían vencido, dejando a sus beneficiarios, ya establecidos en Panamá, en un limbo.

La Administración de Ricardo Martinelli (2009-2014), de la que el actual presidente de Panamá fue ministro de Seguridad, creó el programa Crisol de Razas. Mediante este programa los migrantes en situación irregular obtenían un permiso provisional de permanencia en el país.
El Crisol de Razas fue prorrogado en 2015 por el entonces presidente Juan Carlos Varela (2014-2019), quien otorgó un permiso de temporal migratorio de seis años a cerca de 39 mil extranjeros que iban a entrar en la ilegalidad.
Las últimas medidas migratorias de Panamá
En el primer trimestre de 2025, Panamá ha impulsado varias medidas para controlar el flujo migratorio en el país. El jueves 13 de marzo, Mulino anunció el cierre de centros migratorios del Tapón del Darién.
El mandatario panameño explicó que el tránsito de personas que viajaban por esta ruta con destino a Estados Unidos disminuyó un 98 %.
“No permitiremos más migrantes en esa zona del Darién y cerramos una operación que comenzó en el año 2016. Me da mucha complacencia haber cumplido y haber cerrado el Darién, con lo que eso significa para la seguridad regional y panameña”, aseguró en declaraciones recogidas por el diario español El País.

El 2 de febrero de 2025, el secretario de Estado de EE UU, Marco Rubio, sostuvo una reunión con Mulino en Panamá. Los representantes de ambos países acordaron un programa de repatriación de migrantes para reducir el número de personas que cruzan el Darién, detalló el Departamento de Estado de EE UU en un comunicado en su página web.
En octubre de 2024, el gobierno panameño estableció multas de entre mil y cinco mil dólares “a toda persona extranjera” que ingresara de manera irregular al país por el Darién.
Sin embargo, las autoridades panameñas establecieron que, en caso de que la persona no tenga los recursos para pagar la multa, “se procederá con su deportación” de acuerdo con la leyes de Migración.