• Los subsidios otorgados por el Sistema Patria suelen ser insuficientes para adquirir productos de alimentación básica

El régimen de Nicolás Maduro comenzó el 11 de octubre la entrega del bono protectores de la salud a través del Sistema Patria.  El subsidio es de 15,40 bolívares o 3,70 dólares, de acuerdo con la tasa oficial del Banco Central de Venezuela (BCV). 

El bono está dirigido a los trabajadores del sector salud que cuenten con carnet de la patria. El usuario podrá confirmar la asignación del subsidio cuando reciba un mensaje texto con la frase “Monedero patria: crédito por Bs 15,40 por concepto Bono Protectores de la salud”. 

Este sería el segundo bono especial otorgado por el régimen tras la reconversión monetaria en el país. La mayoría de estos subsidios son un intento del Estado por complementar el salario mínimo que actualmente es de 7 bolívares o 1,63 dólares. 

Bonos insuficientes para la alimentación diaria 

La Cesta Petare registra el costo de ocho productos básicos alimenticios cada semana. En su actualización más reciente destaca que para adquirir esta lista de alimentos se necesitan 118,20 bolívares o 29,19 dólares. 

Un venezolano solo podría adquirir entre uno y dos productos de la cesta. Los rubros que se pueden comprar con el bono protectores de la salud serían un kilo de harina de maíz, un kilo de arroz blanco, un kilo de azúcar o un litro de aceite.

Bono protectores de la salud: ¿quién lo recibe y qué se puede comprar con él?

El costo de las proteínas de origen animal superan el valor total del subsidio. El kilo de carne de res tiene un precio de Bs 27,90 o $ 6,70, un cartón de huevos cuesta Bs 17 o $ 4,08, mientras que un kilo de queso duro está valorado en Bs 16,59 o $ 3,96. 

El kilo de café molido es el segundo rubro más costoso de la lista. El precio se ubicó en 26 bolívares, lo que equivale a 6,25 dólares. Es decir, que un trabajador necesitaría al menos dos bonos para comprar solo este producto. 

El costo de la vida diaria

Los trabajadores del sector salud han denunciado en reiteradas ocasiones que sus salarios son insuficientes para cubrir los gastos de la vida diaria. Los bonos no significan una mejoría para su situación. 

La demanda del personal sanitario cobra más relevancia en el contexto de la pandemia, debido a que son ellos quienes están en la primera línea de la lucha contra el covid-19. 

Algunos trabajadores han dicho que el salario solo les alcanza para comprar comida o pagar pasaje para trasladarse a sus centros de salud. El pasaje mínimo dentro de los municipios tiene un costo aproximado de Bs 1, por lo que la totalidad del bono podría gastarse en 15 pasajes de autobús.

Bono protectores de la salud: ¿quién lo recibe y qué se puede comprar con él?
Foto: Efe

El Observatorio Venezolano de Finanzas (OVF) reportó que una bombona de gas doméstico puede llegar a costar 62 bolívares en el mercado negro o 14,90 dólares.

Una renta de telefonía celular ronda los Bs 3 y de telefonía fija Bs 1. El costo mínimo de un servicio de Internet ronda los Bs 9. 

La estrecha relación entre la pobreza y la dependencia de subsidios del Estado

La Encuesta de Condiciones de Vida (Encovi) reveló que los ingresos no laborales como transferencias del Estado, pensiones o remesas internacionales cobraron mayor importancia que los laborales. Este indicador subió de 14%, en el año 2014; a 45%, en 2021.

Los ingresos no laborales son mayores en las personas que entran en las estadísticas de pobreza, porque dependen más de esos apoyos. La mayoría de estos ingresos provienen de transferencias de misiones y bonos del sistema patria.

Durante el estudio se determinó que la pobreza en Venezuela llegó a 94,5%, la cifra más alta registrada en los últimos años. Además, la pobreza extrema alcanzó un total de 76,6%.

En medio de esta situación también impera el desempleo. Aproximadamente 50% de los venezolanos en edad productiva se encuentran desempleados de acuerdo con el estudio, es decir 8 millones de personas. Muchos de estos ciudadanos están dejando de trabajar porque en algunos casos es más costoso trasladarse al sitio de trabajo que la remuneración obtenida en el empleo. 

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