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- La degradación ambiental, la pérdida del hábitat, así como la contaminación industrial y la acústica están acabando con la especie
El Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF, por sus siglas en inglés) presentó un informe que refleja que el delfín rosado del río Amazonas ha perdido el 65 % de su población.
De continuar la caída de la población, en menos de 50 años el 95 % de la población del delfín rosado del Amazonas desaparecerá, según datos de la National Geographic.
En la reserva de Mamirauá, ubicada en Brasil, la población estudiada se ha reducido a la mitad en los últimos siete años.
Las investigaciones han revelado que entre las principales causas del declive poblacional de este mamífero, considerado el “termómetro de la salud fluvial del planeta” destaca la degradación y la pérdida del hábitat, así como la contaminación industrial y la acústica.
Además del delfín rosado, otras dos especies de delfín de río están amenazadas: el tucuxi, que la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) cataloga como “en peligro de extinción”, y la franciscana o delfín del Plata, que según la Lista Roja de la UICN es “vulnerable”.
La mayoría de estos delfines habita en mares templados y tropicales, así como grandes estuarios, deltas y ríos asiáticos y suramericanos, precisan desde WWF, ecosistemas que sufren la presión de la construcción de diques y presas que fragmentan sus poblaciones y dificultan su reproducción y movimiento.
¿Qué está acabando con los delfines?
Factores contaminantes como la intoxicación por vertidos industriales y de metales pesados, como el mercurio, asociados actividades como la minería ilegal, así como la contaminación procedente de las explotaciones petrolíferas y plásticos, están afectando la posibilidad de capacidad de supervivencia de la especie, advirtió la WWF.
Además, los delfines de río se enfrentan al tráfico marítimo, que presenta riesgos para la especie sobre todo a causa del ruido que generan los buques.
También, la colisión de los animales con embarcaciones, o hasta la posibilidad de atraparlos de forma accidental en las redes de arrastre.
Asimismo, los pescadores cazan los delfines y usan su carne como cebo para pescar otras especies.
La WWF desarrolla acciones enfocadas en la lucha contra la contaminación y campañas de sensibilización y conservación con censos, vigilancia con drones, marcaje y seguimiento vía satélite.
Una de las especies más inteligentes
Dentro de las particularidades de las toninas está su capacidad cerebral, lo que la ha convertido en la especie de río más inteligente. Estudios han revelado que posee un 40 % más de capacidades que los seres humanos.
La base de su alimentación se centra en todas las especies pequeñas que viven en el Amazonas y sus afluentes. Peces como las sardinas, el bocachico, las pirañas, doncellas o corvinas son base de su dieta habitual.
Otra característica diferenciadora con otros de sus familiares en el Amazonas es que son prácticamente ciegos a causa de las aguas turbias en las que navegan. En cambio, los rosados tienen una visión relativamente buena.
El periodo de gestación dura entre nueve y doce meses. Las hembras dan a luz cuando el río Amazonas está en su máximo nivel, entre los meses de mayo y julio. Ellas paren una sola cría cada dos a tres años y la lactancia dura más de un año.
