Email
- El cannabis puede aumentar la intensidad de todo en el cerebro, incluida nuestra ansiedad. Ilustración: Giacomo Gambineri para The Washington Post
Esta es una traducción hecha por El Diario de la nota Does weed help with anxiety or cause it? Here’s what experts say, original de The Washington Post.
Muchas personas fuman cannabis para relajarse, pero no siempre consiguen el efecto deseado.
La investigación muestra que los efectos que el cannabis puede tener en el estado de ánimo varían ampliamente, provocando tranquilidad y alegría en unas personas, y ansiedad e irritabilidad en otras.
Los efectos de la marihuana incluso pueden variar con cada experiencia y pueden estar influenciados por la cantidad de ansiedad que se tenga al ingerir la droga. Una persona podría fumar o ingerir la misma cantidad de cannabis en dos ocasiones diferentes y tener dos experiencias completamente distintas, explicó Ryan Vandrey, profesor de psiquiatría y ciencias del comportamiento en la Facultad de Medicina de Johns Hopkins.
¿Por qué el cannabis afecta a las personas de diferentes formas?
Los expertos dicen que el tipo de cannabis, la cantidad consumida y la forma en que se usa, ya sea fumada, vaporizada o ingerida, determinan cómo afecta al cuerpo. El cannabis contiene diferentes niveles de distintos compuestos. El THC, o delta-9-tetrahidrocannabinol, es el componente del cannabis responsable del “subidón” de la marihuana. El CBD, o cannabidiol, parece funcionar a través de receptores diferentes en el cerebro y no produce el mismo subidón.
“Tenemos esta manera de hablar del cannabis como si fuera una sola cosa, y no lo es”, dijo Staci Gruber, directora del programa de Investigaciones sobre Marihuana para el Descubrimiento Neurocientífico en el Hospital McLean en Massachusetts. La planta es “increíblemente compleja de la manera más sorprendente”.
El efecto del cannabis también puede variar según la forma en que se ingiere. Cuando se fuma o se utiliza un vaporizador para inhalar cannabis, la droga puede metabolizarse en el cuerpo de “momentos a minutos”, dijo Gruber. Puede tomar 45 minutos o más para que alguien sienta los efectos de un comestible, y el tiempo dependerá de lo que ya hay en su estómago.
Y no todos tienen el mismo “subidón”. Su edad, la frecuencia con la que usa cannabis, su sensibilidad al THC y su capacidad para metabolizar la droga influyen en cómo afecta a las personas.
“Todos diferimos dramáticamente”, dijo Bryon Adinoff, profesor clínico de psiquiatría en la Escuela de Medicina de la Universidad de Colorado y presidente del grupo de defensa Doctors for Cannabis Regulation. “Hay muchas cosas que van a influir en cómo respondemos al cannabis”.
Cómo el nivel de THC impacta en la ansiedad
El cannabis tiene diferentes efectos en dosis bajas y altas. Por lo general, las dosis bajas de THC son bien toleradas, estimulando la liberación de dopamina, mientras que las dosis altas de THC pueden hacer que las personas se sientan ansiosas, dijo Peter Grinspoon, médico de atención primaria en el Hospital General de Massachusetts y autor de Seeing Through The Smoke (Viendo a través del humo, en español), un libro que revisa la última investigación médica sobre el cannabis.
“La principal forma en que puedes meterte en problemas con el cannabis es usando una dosis demasiado alta y provocar que te dé mucha, mucha ansiedad”, dijo Grinspoon, quien también es instructor en la Escuela de Medicina de Harvard.
“Hay algunos pacientes que no pueden usarla en absoluto, ni siquiera un poco, porque cualquier cantidad les produce ansiedad”.
El estado mental importa
El cannabis afecta prácticamente todas las conexiones neuronales del cerebro, incluso más que los estimulantes como la cocaína y los opioides, detalló Judy Grisel, profesora de psicología en la Universidad de Bucknell y autora de Never Enough: The Neuroscience and Experience of Addiction (Nunca es suficiente: La neurociencia y la experiencia de la adicción, en español). Esto, a su vez, significa que el cannabis puede causar una amplia variedad de reacciones, dependiendo de la persona, dijo.
“Va a incrementar la intensidad de todo”, advirtió Grisel, por eso a algunas personas les sabe mejor la comida y la música les suena mejor cuando están drogadas.
Mucha gente afirma que la marihuana tiene un efecto tranquilizante, pero Grisel dijo que no parece haber una “razón molecular” por la que el THC aliviaría los sentimientos de ansiedad o estrés de alguien. En cambio, las personas pueden sentir un efecto calmante o relajante porque la droga puede realzar cómo se sienten en ese momento.
Si estás usando cannabis en “un día bonito, soleado y con brisa”, dijo Grisel, entonces la marihuana va a mejorar el ambiente relajado y tranquilo. Esto también significa que para aquellos que se sienten ansiosos, el cannabis puede hacerlos más sensibles al estrés o propensos a la paranoia.
Sariyah, una joven de 20 años que vive en Georgia, solía fumar cannabis todos los días cuando salía del trabajo. Dijo que sentía que la marihuana la ayudaba a relajarse. Sin embargo, hace unos meses, el cannabis empezó a hacer que se sintiera peor.
“Con el tiempo, empezó a hacer que mi corazón latiera rápido”, dijo Sariyah, quien pidió que no se usara su nombre completo porque su familia no sabe que consume cannabis.
Sariyah señaló que la marihuana a menudo intensifica sus “pensamientos más profundos”. Si está triste o ansiosa, se intensifica el sentimiento cuando fuma. Reveló que ha reducido su consumo y quiere encontrar la dosis de marihuana que le funcione de manera confiable para calmar su ansiedad.
Ahora fuma alrededor de dos veces por semana. “La mayoría de las veces, no tengo ansiedad cuando fumo, pero a veces está allí”, relató Sariyah. “En ocasiones aparece de la nada”.
El riesgo de ansiedad es mayor para los adolescentes
Décadas de investigación clínica han revelado que el THC puede afectar negativamente el cerebro en desarrollo, y el consumo regular de cannabis en la adolescencia se asocia con una mayor probabilidad de desarrollar ansiedad y depresión más adelante en la vida.
“Fumar muy pronto puede catalizar la ansiedad y la depresión”, dijo Grisel. “No está exactamente claro cómo sucede eso, pero la evidencia es muy fuerte”.
Fumar cannabis regularmente durante un periodo prolongado cambiará cómo responde tu cerebro a la droga, dicen los expertos. El uso frecuente y prolongado puede resultar en una disminución en el número de receptores cannabinoides, lo que hace que las personas comiencen a sentir menos efectos de la droga con el tiempo.
Megan Mbengue, una enfermera y educadora de cannabis que también vende su propia línea de aceites y comestibles de CBD, dijo que el problema es que algunas personas dependen del cannabis como “su única herramienta” para manejar el estrés y la ansiedad.
“Vemos una regulación negativa de los receptores cannabinoides. Hay mucho THC flotando, y no hay nada a lo que el THC pueda unirse para crear ese efecto calmante y medicinal al unirse a los receptores”.
Y los usuarios de cannabis de larga duración que dejan de tomar la droga pueden experimentar síntomas de abstinencia, incluyendo ansiedad y depresión, porque el cerebro se ha acostumbrado a esperar la llegada de compuestos de cannabis.
Los efectos calmantes del CBD
El CBD tiene una estructura similar al THC, pero no afecta la circuitaría de recompensa del cerebro de la misma manera, lo que significa que hay menos riesgo de abuso, según Gruber. Existe un creciente cuerpo de investigación que respalda que el CBD puede reducir la ansiedad o el estrés.
“Hay pruebas cada vez mayores de que, al menos para algunos individuos, hay absolutamente algún beneficio clínico”, afirmó Gruber. “Ciertamente necesitamos más datos, que estamos tratando de recopilar con mucho esfuerzo”.
Un pequeño estudio publicado el año pasado sugiere que el cannabis con partes iguales de CBD y THC puede inducir menos ansiedad que la marihuana, que es “dominante en THC”.
Dani Gildemontes-Davila, una joven de 27 años que vive en California y vende productos online relacionados con el cannabis, dijo que durante la semana de trabajo generalmente fuma marihuana para combatir la ansiedad al final del día, a menudo tomando una proporción de 1: 1 de CBD a THC. Gildemontes-Davila aseguró que prefiere la marihuana a otros medicamentos recetados que toma.
“Tengo tres récipes”, dijo. “Puedo decir fácilmente que el que tiene menos efectos secundarios, y el que todavía me hace sentir como yo, es la marihuana”.
El uso regular de CBD puede afectar cómo otros medicamentos se metabolizan en el cuerpo, por lo que las personas deben consultar a un médico o farmacéutico con conocimientos de cannabis si usan otros medicamentos.
Entender los efectos
Fumar un porro de cannabis no es como beber una copa de cerveza o vino, explicó Andrew Koudijs, el dueño de una dispensario de cannabis en Provincetown, Massachusetts. Cada calada de marihuana está “duplicando su dosis” y potencialmente duplicando su efecto.
“Siempre comienza con uno y ve cómo se siente”, dijo Koudijs. “Una pequeña inhalación podría hacer que alguien se sienta realmente colocado”.
Los médicos dicen que vapear cannabis es más seguro que fumarlo. Quemar cannabis y respirar el humo te expone a productos químicos tóxicos de la combustión que pueden dañar los pulmones. Los vaporizadores, conocidos como vaporizadores bolígrafo, calientan el cannabis en un aerosol sin quemar la planta u aceite.
“No obtienes todos los productos de la combustión, como el alquitrán, el benceno y los hidrocarburos aromáticos policíclicos”, dijo Grinspoon. “Es una opción de inhalación mucho más segura”.
El vapeo también tiene sus propias preocupaciones de salud.
Para algunos, la marihuana nunca será agradable, dicen los expertos. Es la misma razón por la que las personas no beben alcohol o cafeína; simplemente no les gusta cómo los hace sentir.
“Hay personas que usarán cannabis y dirán que es lo único que les ayuda con su ansiedad”, dijo Vandrey. “Y hay personas que usarán potencialmente el mismo producto y dirán que fue la peor experiencia de sus vidas”.
Traducido por José Silva
