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- Asocoldro indicó que en ciudades como Cúcuta se ha acentuado la escasez de algunas fórmulas y la aparición de falsificaciones, pues los medicamentos son llevados a Venezuela para su reventa en la calle
La Asociación Colombiana de Droguistas Detallistas (Asocoldro) denunció el 8 de mayo la existencia de una red de contrabando encargada de llevar a Venezuela medicamentos del sistema público de salud colombiano. La situación sería especialmente visible en la ciudad de Cúcuta, donde afecta no solo a pacientes, sino también a las farmacias locales.
La directora de la asociación, Yahel Bibiana Bueno, informó que estas medicinas estarían siendo extraídas irregularmente de las Entidades Promotoras de Salud (EPS), encargadas de la administración de insumos y registro de beneficiarios. Luego serían llevadas a las ciudades fronterizas de Venezuela para revenderse, aprovechando la escasez en el Sistema de Salud Pública del país.
“Nos denuncian algo muy delicado. Estos establecimientos, presuntamente, cuando el paciente tiene un tratamiento de 60 días, le dan para 30 días, pero en el sistema aparece que ya le entregaron los de los 60. ¿Qué está pasando con las otras 30 cápsulas, pastillas, inyecciones o la fórmula farmacéutica que sea, que aparecen en los sistemas como recibidos?”, afirmó en una entrevista al diario colombiano La Opinión.
Instó al Ministerio de Salud, y específicamente al Instituto Nacional de Vigilancia de Medicamentos y Alimentos (Invima), a inspeccionar las EPS de la región para encontrar el origen del desvío.
Desabastecimiento de medicamentos
Aunque Bueno no precisó el porcentaje de medicamentos que estarían siendo llevados fuera del país, indicó que la situación se intensificó tras la apertura del intercambio comercial en la frontera colombo-venezolana. Aseguró que producto de esta situación, ahora existe escasez de ciertas fórmulas en ciudades como Cúcuta.
“Asocoldro para ayudar, junto al ministerio y el Invima, para ver qué está sucediendo y no se sigan llevando el medicamento institucional hacia Venezuela, porque es lo que presuntamente ocurre”, dijo.
Compartió un informe de la Policía Fiscal y Aduanera (Polfa) sobre los medicamentos que, de acuerdo con sus investigaciones, estarían siendo contrabandeados a Venezuela. El más incautado en los chequeos de las autoridades es el Saxenda, usado en el tratamiento de la diabetes tipo 2. Le sigue el Erogan, un potenciador sexual, y oxitocina, para ayudar con las contracciones durante el parto.
Agregó que durante el año 2022 se incautaron 191.450 unidades de medicamentos extraídos de forma irregular. Y en lo que va de año, van 6.828 unidades.
Establecimientos comprometidos
Producto de esta situación, Asocoldro sostuvo reuniones con empresarios agremiados en el departamento de Norte de Santander. Indicó que muchos establecimientos pequeños han visto sus ventas afectadas debido al desabastecimiento de medicamentos en la zona. Aunque mencionó el problema del contrabando, también lo atribuyó a otros factores como la expansión de las grandes cadenas comerciales.
“Hoy las droguerías independientes enfrentan grandes desafíos que amenazan su supervivencia y ponen en riesgo la provisión de medicamentos a la población, particularmente en territorios alejados”, acotó.
Bueno también advirtió sobre un aumento considerable en la cantidad de medicamentos falsificados. Afirmó que estos circularían en las calles a través de farmacias de barrio o puestos ambulantes, sin cumplir los controles de calidad y supervisión del Invima.
“Sabemos de casos donde, por ejemplo, inyectan agua o suero, creyendo que tienen un principio activo que soluciona la enfermedad, de un producto de marca o genérico, mientras que a Venezuela se estaría sacando el medicamento que sí está con la composición correcta de acuerdo con el registro sanitario otorgado por el Invima”, advirtió.
