- A través de la sentencia N° 1.057, la Sala Constitucional determinó la creación de una junta interventora encabezada por Ricardo Cusanno, expresidente de Fedecámaras
El Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) afín al régimen de Nicolás Maduro emitió el 4 de agosto la sentencia N° 1.057, en la cual ordenó la intervención de la Cruz Roja Venezolana. La decisión fue tomada por la Sala Constitucional, a través de la magistrada Tania D’Amelio.
En la sentencia, se cesa de inmediato de sus funciones al Comité Directivo Nacional, presidido por Mario Villarroel Lander. Se establece, en cambio, la creación de una junta reestructuradora ad hoc, dirigida por el empresario Ricardo Cusanno, quien fue presidente de Fedecámaras durante el periodo 2019-2021.
El TSJ encargó a Cusanno una “reestructuración amplia y diversa” de la Cruz Roja Venezolana, para lo cual la junta interventora tendrá una validez de un año prorrogable. La sentencia también le delegó la función de “administrar y ejercer la guarda y custodia de los bienes actuales y futuros que conformen el patrimonio de la Cruz Roja Venezolana y de los derechos y acciones que posea, previo el inventario correspondiente”.
“En las próximas horas, será conformada una junta plural, independiente y proba, que tendrá como primer objetivo de proteger la integridad de los voluntarios y trabajadores de la Cruz Roja Venezolana, e iniciar un proceso de evaluación, reestructuración y modernización de la institución que culmine en una elección transparente de sus autoridades”, declaró Cusanno en un comunicado, minutos después de publicarse la sentencia.
En la mira

La Cruz Roja Venezolana ha atravesado en los últimos años una serie de conflictos internos, los cuales se han solapado con ataques provenientes de diferentes actores del oficialismo, quienes consideran al organismo como “conspirador”. Esto acabó recientemente con una demanda introducida ante el TSJ por parte de la Fiscalía General del régimen.
El problema comenzó el 26 de junio cuando el diputado y primer vicepresidente del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), Diosdado Cabello, acusó a la directiva de la Cruz Roja de formar parte de una “mafia judicial”. Durante su programa semanal Con el mazo dando, también denunció presuntos actos de corrupción por parte de Villaroel, además de testimonios sobre presunto hostigamiento contra los trabajadores del organismo.
Dos días después, el 28 de junio, el fiscal general del régimen, Tarek William Saab, designó a la Fiscalía 34 con competencia nacional en derechos humanos para investigar a Villaroel por acoso y maltrato laboral.
En los últimos días, la Cruz Roja Venezolana había alertado sobre la posibilidad de su intervención. En un comunicado, el organismo desmintió las acusaciones de Cabello, apuntando al principio de neutralidad que posee como filial de la Cruz Roja Internacional. Incluso recordó que la Asamblea Nacional afín al oficialismo reconoció al organismo por su trabajo junto al régimen en las jornadas de vacunación contra el covid-19.
Acusaciones
“No tengo nada en contra de la Cruz Roja sino contra quienes la dirigen, las mafias no me gustan en ninguna parte”, aseguró Cabello. En su programa, acusó a Villaroel de nepotismo, pues su hijo, Miguel Villarroel Sierraalta, es el actual vicepresidente de la institución.
Sobre las acusaciones hechas por el dirigente chavista, el portal El Estímulo consultó a diferentes empleados y voluntarios de la Cruz Roja Venezolana. Bajo condición de anonimato, reconocieron que existe un conflicto interno dentro del organismo. Especialmente durante el último año, donde, aseguran, se intensificó la persecución y abuso de poder contra aquellos que mostraran diferencias con la gestión de la directiva.
Villarroel Lander, quien es abogado de profesión, fue el presidente de la Sociedad de la Cruz Roja Venezolana por 43 años. Entre 1987 y 1997 fue también presidente de la Liga Internacional de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja. En este periodo pasó a llamarse Federación Internacional de Sociedades de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja (FICR). De este ente actualmente Villarroel Sierralta ocupa también la vicepresidencia.
¿Quién es Ricardo Cusanno?

Ricardo Cusanno es un abogado especializado en Derecho Corporativo por la Universidad Santa María (USM). Desarrolló su carrera en el sector hotelero y de acuerdo con el portal Poderopedia, fue cofundador de la empresa de delivery Pikpax, ubicada en Miami, Florida (EE UU).
En 2012, Cusanno fue nombrado presidente del Consejo Superior de Turismo (Conseturismo). Al terminar su periodo en 2015, resultó electo como segundo vicepresidente de Fedecámaras. Durante este cargo, obtuvo reconocimiento por cofundar la emisora digital Fedecámaras Radio, especializada en noticias de economía, comercio y producción nacional.
Finalmente, en 2019 resultó electo presidente de Fedecámaras durante la 75° asamblea anual del gremio. Asumió el cargo en un momento de profunda depresión económica, en el que él mismo estimó que Venezuela había perdido alrededor del 60 % de las empresas privadas que tenía en 1998. Sin embargo, en 2021, durante su último año frente al organismo, protagonizó una serie de acercamientos con el Parlamento oficialista, principalmente para hacer propuestas de reactivación económica y vacunación para el sector privado.