- La caída del cabello es común, sin embargo, esto puede ser consecuencia de algún problema de salud que se debe tratar con expertos
La caída del cabello es común en muchas mujeres, pero esto puede ser consecuencia de alguna afección mas grave que debe ser evaluada por especialistas de salud. Este problema puede tener distintas causas, como hormonales o hereditarias.
“Las mujeres sufren grandes dificultades para cubrirlos (los espacios donde no tienen cabello producto de la caída) usando agentes de camuflaje como polvos y otros productos para el cabello. A menudo se sienten muy aisladas”, explicó para el blog de la Asociación Estadounidense de Personas Jubiladas (AARP) la dermatóloga María Colavincenzo, directora de una clínica enfocada en los trastornos del cabello y el cuero cabelludo en Northwestern Medicine (Chicago, Illinois, Estados Unidos).

A la caída del cabello se le denomina alopecia y no solo afecta al cuero cabelludo, sino al resto del cuerpo. De acuerdo con la Clínica Mayo (EE UU), la pérdida de cabello puede ser temporal o permanente y se puede deber a cambios hormonales, herencia, afecciones médicas o parte del envejecimiento.
Sin embargo, hay situaciones en que la caída deja de ser un proceso normal y amerita que el paciente asista a consulta con un especialista para detectar el problema.
Las causas comunes de la caída del cabello en mujeres
Genética
Esta causa es usual en las mujeres mayores y se denomina alopecia de patrón femenino o alopecia androgenética. Los genes heredados pueden causar que los folículos capilares se encojan y deje de crecer el cabello.

La Academia Americana de Dermatología asegura que es raro que una mujer pierda la totalidad del cabello, aunque se trate de una condición progresiva. Es decir, las mujeres pueden seguir presentando la caída del cabello.
Algunos tratamientos que se le aplican al paciente que presenta este tipo de condiciones es incluir la solución de minoxidil del 5 % (Rogaine), terapia de láser, medicamentos recetados y varios tipos de inyecciones en el cuero cabelludo.
Presión física
Cuando una mujer se encuentra atravesando por alguna presión física, como lucha contra una infección o recuperándose de una cirugía, puede experimentar la pérdida del cabello.
“Básicamente, el cuerpo no puede manejar hacer demasiadas cosas a la vez. Cuando hay un evento estresante, tu cuerpo dice ‘voy a dejar de dedicar recursos al crecimiento del cabello y concentrarme en esta enfermedad’”, explicó a la organización AARP, el 4 de marzo, la doctora Lauren Eckert Ploch, dermatóloga certificada en Aiken, Carolina del Sur (EE UU).

En ese sentido, el cabello empieza a caer entre dos y tres meses después de pasar por alguna presión física y se puede denominar efluvio telógeno. Las pacientes podrían notar en esta etapa puñados de cabello al momento de bañarse o peinarse.
Algunas de las causas que conllevan a una posible pérdida de cabello puede ser atravesar una gripe o neumonía, así como haberse realizado una cirugía importante o haber perdido una cantidad significativa de peso. Sin embargo, la doctora Ploch aseguró que es temporal y podría volver a la normalidad entre seis y nueve meses tras terminar el tratamiento de afección que esté padeciendo la persona.
Estrés
La angustia psicológica es otra forma de causar efluvio telógeno. De acuerdo con la Clínica Mayo, cuando una persona está afrontando episodios importantes de estrés, el organismo puede provocar que los folículos pilosos pasen a una fase de reposo, lo que conlleva a una repentina caída del cabello. Esto se puede evidenciar cuando las mujeres se están lavando el cabello o peinando.

La dermatóloga María Colavincenzo explicó: “Las personas hablan de las tres dificultades: duelo, ruptura y quiebre. Cualquier persona que tenga un gran estrés en su vida puede perder el cabello”.
Los expertos en el área consideran que es adecuado que al pasar por este tipo de cuadro emocional se busque la ayuda de un psicólogo con el objetivo de recibir tratamiento, de ser necesario.
Desequilibrio en la tiroides
La glándula tiroides juega un papel importante en muchas de las funciones del cuerpo, entre ellas el desarrollo y mantenimiento de los folículos pilosos.
La hormona tiroidea, que compone a esta glándula, puede generar diferentes reacciones en el cuerpo, similares al estrés, si se encuentra en niveles bajos, lo que lleva como consecuencia a la pérdida de cabello.
Para dar con el problema, los especialistas realizan exámenes de sangre a los pacientes que midan las hormonas tiroideas en la sangre y a partir de los resultados, recetar medicamentos que puedan tratar una tiroide poco activa o hiperactiva.
Deficiencia de vitaminas o minerales
La falta de vitamina D, hierro, proteína u otros nutrientes podrían contribuir a la caída de, cabello ya que, según expertos, privan al cabello de los nutrientes necesarios para su crecimiento.
“Las deficiencias de vitaminas o minerales privan al cabello de los nutrientes necesarios, debilitan la estructura del cabello y posiblemente interrumpen el crecimiento normal de este”, comentó la dermatóloga Shoshana Marmon a AARP.
Para dar con el problema, los médicos solicitan exámenes de sangre al paciente para identificar qué exista alguna deficiencia de nutrientes.
En el tratamiento, solo de ser necesario, se recetan suplementos que ayuden al incremento de las vitaminas y minerales escasos en el cuerpo.

Otras causas de la caída del cabello:
-Peinados o tratamientos dañinos para el cabello.
-Alopecia areata, enfermedad autoinmunitaria (el cabello se cae formando áreas redondas).
-Alopecia cicatricial, causada por un trastorno autoinmunitario o inflamatorio.