- El expelotero jugó 23 temporadas en las ligas mayores
Los Gigantes de San Francisco informaron que murió el expelotero Willie Mays, miembro del Salón de la Fama de las Grandes Ligas e histórico jugador de la franquicia.
“Con gran tristeza anunciamos que Willie Mays, leyenda de los Gigantes de San Francisco y miembro del Salón de la Fama, falleció pacíficamente esta tarde a la edad de 93 años”, indica un comunicado emitido por los Gigantes a través de su cuenta en X, el 18 de junio.
En el anuncio, Michael Mays, hijo del legendario exjugador, indicó que su padre falleció en paz rodeado de sus seres queridos.
“A todos desde el fondo de mi corazón roto agradezco por el amor inquebrantable que le han mostrado a lo largo de los años. Han sido la sangre de su vida», expresó.
Por su parte, el comisionado de la MLB, Robert Manfred, emitió un comunicado en el que reconoció la grandeza de Mays.
“Toda la Major League Baseball está de luto. Sus increíbles logros y estadísticas no comienzan a describir la admiración que provocaba ver a Willie Mays dominar el juego en todos los aspectos imaginables. Nunca olvidaremos a este verdadero gigante dentro y fuera del terreno», expresó Manfred.
En la misiva extendió sus condolencias a la familia del expelotero.
Willie Mays, el «jugador perfecto”
Mays mostró su talento por 23 temporadas en las Grandes Ligas, donde su combinación de herramientas, entre ellas velocidad, poder y bateo, además de su gran defensa y fuerte brazo, lo llevaron a ser catalogado como el “jugador perfecto en el beisbol”.
En su recorrido, Mays completó una línea ofensiva de .301, con 660 jonrones, 1.909 carreras remolcadas y 339 bases robadas, estadísticas que han sido reconocidas por la MLB.
El jugador vistió las chaquetas de los Gigantes, de los Mets de Nueva York y de los Birmingham Black Barons, en las Ligas Negras.
“Willie Mays llevó su brillante talento desde los Birmingham Black Barons de la Liga Negra Americana hasta la histórica franquicia de los Gigantes. De costa a costa, en Nueva York y San Francisco, Willie inspiró a generaciones de jugadores y fanáticos mientras el béisbol iba creciendo y realmente se ganaba su lugar como nuestro pasatiempo nacional”, añadió Manfred.
Mays, quien conquistó el premio de Novato del Año de la Liga Nacional en 1951, evidenció las formas en las que podía aportar al éxito de su equipo. Acumuló la sexta mayor cantidad de jonrones en la historia de las Grandes Ligas (660), mientras recolectó 12 Guantes de Oro por su defensa en el jardín central.
Igualmente, Mays, padrino de Barry Bonds -líder absoluto de jonrones en las Grandes Ligas-, conquistó el premio al Jugador Más Valioso en las campañas de 1954 (.345-41-110) y 1965 (.317-52-112).
“La Atrapada”
Mays marcó su presencia en la Serie Mundial de 1954, cuando en la octava entrada del primer partido ante los Indios de Cleveland (actuales Guardianes), atrapó por encima del hombro un batazo de Vic Wertz, para mantener empatado el juego que se disputó en el Polo Grounds de Nueva York.
“Todos dijeron, ‘Bueno, fue un partido difícil’. Dije que no, que fue una captura fácil», dijo Mays luego de la jugada.
Al recordar esta defensiva, el 29 de septiembre de 2017, la MLB le puso el nombre de Mays al premio al Jugador Más Valioso de la Serie Mundial.
Además de su exitosa carrera en el beisbol, «The Say Hey Kid», como era conocido Mays, también sirvió en el Ejército de Estados Unidos entre los años 1952 y 1953.
Con información de EFE.