Gobierno de Argentina aumentará los servicios básicos y el combustibles: las razones detrás de la medida

• La Administración del presidente Javier Milei busca reducir el gasto público a través de un ajuste fiscal. Con incrementos en servicios esenciales, la medida tiene como objetivo alinear las tarifas con los costos reales de producción | Foto: EFE

El gobierno de Javier Milei anunció incrementos en las tarifas de servicios esenciales que comenzarán a aplicarse en diciembre en Argentina. Estas subas abarcan la luz, el gas, los combustibles y el agua, en el marco de una política de ajuste fiscal destinada a reducir los subsidios y equilibrar las cuentas públicas.

Los nuevos incrementos afectarán a los hogares y comercios de todo el país. La electricidad subirá un 2 %, mientras que el gas tendrá un aumento del 2,7 %, según detalla este viernes 29 de noviembre el medio argentino La Nación.

En el caso del agua, los usuarios del Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) afrontarán un incremento del 3%, lo que se suma a una serie de ajustes realizados a lo largo del año.

Por otro lado, la nafta y el gasoil registrarán subas de hasta el 3 %, impulsadas tanto por el ajuste en las tarifas como por un incremento del 1 % en el impuesto a los combustibles líquidos (ICL).

En las estaciones de servicio, se estima que la nafta súper alcanzará los 1.109 pesos ($1.01 USD) por litro, mientras que la premium llegará a 1.371 pesos ($1.25 USD). El gasoil premium (Infinia) también sufrirá un ajuste, al ubicarse en $1.383 pesos ($1.26 USD).

Razones detrás de los incrementos

El ministro de Economía, Luis Caputo, explicó que estos aumentos forman parte de una estrategia para reducir el déficit fiscal. Desde el inicio de la gestión de Milei, el gobierno ha buscado disminuir el gasto público en subsidios, lo que permitió una reducción del 34,4 % en términos reales hasta octubre.

La idea central, según el ministro, es alinear los costos de los servicios públicos con sus precios reales de producción. Esto implica que los usuarios absorban una mayor proporción del costo total de los servicios, especialmente en sectores como la electricidad y el gas.

Si bien esta medida contribuye al equilibrio fiscal, también genera un impacto significativo en los hogares, que ven reflejados estos ajustes en sus boletas mensuales.

Impacto acumulado en las tarifas en 2023

Este año ha estado marcado por fuertes incrementos en los servicios básicos. Hasta noviembre, las tarifas eléctricas acumulan un alza del 189 %, mientras que el gas ha registrado un aumento del 564 %. En el caso del agua en el AMBA, las tarifas se cuadruplicaron en 2023, con un incremento acumulado del 320%.

Según Aysa, la empresa encargada del suministro de agua, estas correcciones tarifarias fueron esenciales para operar sin depender de transferencias estatales. Sin embargo, el impacto sobre los hogares ha sido profundo, especialmente en un contexto de alta inflación y pérdida del poder adquisitivo.

La política del gobierno también ha buscado rediseñar el esquema de subsidios, trasladando una mayor proporción de los costos a los sectores de mayores ingresos y a las industrias. En electricidad, los hogares de bajos ingresos cubren solo el 26 % del costo total, mientras que los sectores más altos pagan hasta el 93%.

Una situación similar ocurre con el gas, donde los usuarios vulnerables pagan el 23 % y los de mayores ingresos asumen el 64 % de los costos.

Perspectivas para 2024

El impacto de los aumentos en tarifas sobre la inflación es significativo. En octubre, los servicios registraron un incremento del 165 %, mucho mayor que el 89,6 % de los bienes. Se espera que el Índice de Precios al Consumidor (IPC) cierre el año con subas mensuales promedio del 2,7%, aunque los analistas advierten que los ajustes continuos en tarifas podrían seguir presionando la inflación en 2024.

Por su parte, el Presupuesto 2025 ya contempla un aumento mayor en el impuesto a los combustibles líquidos, lo que podría derivar en nuevos ajustes en el precio de la nafta y el gasoil.

Además, si el precio del petróleo sigue al alza en los mercados internacionales, los consumidores enfrentarán un doble impacto: por un lado, el ajuste fiscal, y por otro, la presión de los costos internacionales.