- El despegue cumplió con la primera etapa, sin embargo, en el ascenso al espacio la aeronave se perdió | Foto: EFE
La empresa SpaceX, del magnate Elon Musk, realizó el séptimo vuelo de prueba de su nave Starship que, tras completar la primera fase y volver con éxito a Tierra, perdió el propulsor Super Heavy cuando iniciaba su ascenso hacia el espacio.
El despegue se realizó el 16 de enero a las 6:37 pm (hora de Venezuela), en las instalaciones de Boca Chica, Texas (Estados Unidos). La maniobra tenía dos objetivos: devolver el propulsor a Tierra y que el Starship llevara por primera vez carga al espacio.
En la primera fase, los 33 motores Raptor impulsaron a Super Heavy y Starship y luego de separarse en la etapa caliente, el propulsor pasó a combustión y regresó al sitio de lanzamiento, donde fue capturado por los brazos robóticos de Mechazilla, la segunda captura exitosa de Super Heavy.
Sin embargo, en la segunda etapa de la prueba, tras encender con éxito sus seis motores Raptor, la nave Starship ascendió al espacio y perdió su telemetría.
Lo que ocurrió
De acuerdo con SpaceX, la nave sufrió un desmontaje rápido e imprevisto durante su ascenso, lo que provocó un incendio en la sección de popa.
“La nave Starship voló dentro de su corredor de lanzamiento designado, como hacen todos los lanzamientos estadounidenses para proteger al público tanto en tierra, agua y aire”, explicó la compañía en una publicación en su página web.
Agregó que cualquier resto de la nave que haya quedado cayó en zona de peligro designada para estas maniobras.
En una publicación de la agencia de noticias EFE, restos de la nave Starship pasaron por el norte de República Dominicana. Usuarios de redes sociales en ese país difundieron imágenes de destellos blancuzcos, verdes y anaranjados desplazándose a gran velocidad sobre las aguas del océano Atlántico cercanas a la ciudad de Montecristi (República Dominicana). Las imágenes también fueron captadas desde la ciudad de Santiago y Valverde.
Anunciaron mejoras para futura pruebas del Starship
SpaceX indicó que se encuentran realizando una investigación exhaustiva, coordinada con la Administración Federal de Aviación de Estados Unidos, además de implementar medidas correctivas que permitan realizar mejoras en futuras pruebas de vuelos de Starship.
“La séptima prueba sirvió como recordatorio de que las pruebas de desarrollo, por definición, son impredecibles”, destacó la compañía.
En esta oportunidad, la nave estaba cargada de decenas de réplicas de satélites de Internet Starlink y debía volar una trayectoria suborbital durante aproximadamente una hora. También se pretendía volar múltiples experimentos orientados a la captura y reutilización de naves.
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