- Algunos mártires y otros por su profunda fe en Dios durante toda su vida. El Diario recopiló la historia de algunos de los Santos más jóvenes de la iglesia católica
La reciente beatificación de Carlo Acutis fue sorpresiva entre los católicos, no solo por el poco tiempo que duró en llegar a los altares, sino por la corta edad que tenía al momento de su muerte. Sin embargo, no es el primero en convertirse en beato a corta edad. Por ello en El Diario te contamos sobre algunos de los beatos más jóvenes que existen en la iglesia.
Carlo Acutis
Acutis falleció a los 15 años de edad, es considerado como “el patrón de la web”, debido a que en vida se dedicó a hablar de su fe y a ayudar a las personas a través de la tecnología. Carlo nació en Londres en 1991 pero vivió en Milán y murió en 2006 debido a leucemia.
El papa Francisco lo declaró venerable en 2018 y lo señaló como un ejemplo para todos los jóvenes en su exhortación tras el sínodo dedicado a ellos, “Christus vivit”. Se trata de una de las beatificaciones más rápidas que se han aprobado, pues apenas han transcurrido 14 años de la muerte del joven. Fue beatificado el sábado 10 de octubre de 2020 en la basílica de San Francisco de Asís, Italia por el Cardenal Agostino Vallini.
Solo una cirugía compleja y peligrosa podría haber eliminado el problema. Pero la intervención nunca se realizó porque el niño se recuperó después de una oración especial celebrada por un sacerdote en presencia de una reliquia de Carlo. Un trozo de su pijama.
Beato Pier Giorgio Frassati
Pier Giorgio nació en Turín, Italia, el 6 de abril de 1901. Durante su adolescencia cultivó una vida espiritual y se hizo miembro de la Acción Católica, el Apostolado de la oración, la Liga Eucarística y la Asociación de jóvenes adoradores universitarios. Vivió una vida completamente religiosa.
Al cumplir los 24 años de edad le diagnosticaron poliomielitis fulminante, una enfermedad que lo llevó a la muerte en tan solo una semana. En 1990, el papa Juan Pablo II lo beatificó y destacó lo siguiente: “Pier proclama, con su ejemplo, que es santa la vida que se conduce con el Espíritu Santo, Espíritu de las Bienaventuranzas, y que solo quien se convierte en hombre de las Bienaventuranzas logra comunicar a los hermanos el amor y la paz”.
Santo Domingo Savio
Domingo Savio nació en el Reino de Cerdeña el 2 de abril de 1842 y fue alumno de San Juan Bosco. En 1856, fundó la Compañía de la Inmaculada y escribió el reglamento de esta. La iglesia considera que esa Compañía fue la obra maestra de Domingo Savio y el testimonio de su espiritualidad.
Murió en 1857 a los 15 años de edad de una enfermedad pulmonar. En octubre de 1914, los huesos de Domingo Savio fueron llevados a la Basílica de María Auxiliadora de Turín, Italia.
Fue declarado venerable por el papa Pío XI en 1933 y beatificado por Pío XII el 5 de marzo de 1950. Luego fue canonizado por el mismo pontífice el 12 de junio de 1954. Su fiesta se celebra el 6 de mayo.
San José Sánchez del Río
José Sánchez del Río nació en Michoacán, México el 28 de marzo de 1913. Participó en la Guerra Cristera mexicana en 1926, tras el combate lo tomaron prisionero y más tarde, en 1928 fue ejecutado por los oficiales del gobierno mexicano cuando tenía apenas 14 años de edad.
Fue declarado beato por el cardenal José Saraiva Martins en la ciudad de Guadalajara, México el 20 de noviembre de 2005 y canonizado por el papa Francisco el 16 de octubre de 2016, en Roma (Italia.
