Email
- El cardenal Baltazar Porras informó que la causa está a cargo de la Vicaría de la Santidad. Una vez recabada la información, se envía a Roma para su aprobación. Ambos llevarían el título de siervos de Dios. Foto principal: Fe y Alegría noticias
Desde la Iglesia de la Candelaria, en Caracas, el cardenal Baltazar Porras anunció el jueves 12 de mayo el inicio de un nuevo proceso para la causa de la santidad: el de Abraham Reyes y Patricia García de Reyes, cofundadores del movimiento educativo Fe y Alegría.
“Todos los venezolanos sintamos los caminos para servir. Por eso hoy es un día muy especial para todos nosotros en Venezuela, demos a conocer esta causa”, resaltó el cardenal Porras.
Abraham y Patrias Reyes fueron dos venezolanos que, aun teniendo 7 hijos, donaron su casa para la construcción de la primera escuela de Fe y Alegría, con el fin de garantizar la educación de los más pobres y vulnerables.
"@FeyAlegriaVE Se trata de uno de los movimientos de educación popular más grandes del mundo", resalta su Director Nacional, S.J Manuel Aristotena, al tiempo que le da las gracias a este matrimonio venezolano por su muestra de solidaridad y entrega con los más pobres. pic.twitter.com/xMXeu7iLRE
— Arquidiócesis de Caracas (@ArquiCaracas) May 12, 2022
“Abraham, con familia numerosa, ofrece una parte de su casa. Fue el inicio humilde de lo que fue Fe y Alegría. Junto con su mujer creó una familia que fue un templo de adoración y servicio”, destacó el cardenal. Y añadió: “De gente sencilla es que surgen grandes obras. A través de la intercesión de la gente sencilla crece nuestra fe”.
La historia de Abraham y Patricia
Rodeado de los hijos, nietos de Abraham y Patricia Reyes, Manuel Aristomena, director nacional de Fe y Alegría, destacó la historia de la pareja en pro de la educación en Venezuela.
“Cuando ellos entregaron su casa, en el 23 de enero, estaba recién terminada. Tenían siete años de trabajo para construirla. Esperaban su séptimo hijo, quien nació un mes después de que entregaran la casa. Esa fue la primera casa de Fe y Alegría, uno de los movimientos educativos presente en 4 continentes. La buena semilla siempre da fruto”, declaró Aristomena.
La historia de Abraham y Patricia empezó en el año 1995, durante una comunión de setenta niños y niñas. En la homilía, el padre Vélaz habló de la necesidad de profundizar la labor formativa mediante un proceso de educación sistemática, según relatan en la página web de Fe y Alegría. Para ello necesitaban una escuela, que no tenían. Al terminar la misa, uno de los asistentes, el obrero Abrahán Reyes, se acercó al padre y le dijo: “Si usted quiere hacer una escuela, ponga las maestras que yo le regalo este local”.
Según el mismo relato, la construcción de la casa fue toda una proeza. En la zona no había agua, por lo que debían transportarla en latas de manteca que cargaban sobre sus cabezas desde el pie del cerro.
“Si me quedo la casa, será de mi mujer y los ocho hijos. Pero si la convertimos en escuela, será la casa de todos los niños del barrio”, dijo Abraham al padre Vélaz.
Siervos de Dios
El cardenal Porras señaló que, al igual que el ahora beato José Gregorio Hernández, Abraham y Patricia Reyes eran laicos. Explicó que la causa está a cargo de la Vicaría de la Santidad. “Una vez recabada la información, se envía a Roma para su aprobación. Conllevaría al título de Siervo de Dios”, dijo.
"Esta Causa nace en Caracas y está a cargo de la Vicaría de la Santidad. Una vez recabada la información se envía a Roma para su aprobación. La aprobación conllevaría al título de 'Siervo de Dios'", explica @bepocar pic.twitter.com/4Be2rCwmJz
— Arquidiócesis de Caracas (@ArquiCaracas) May 12, 2022
Siervo de Dios es la primera categoría que la Iglesia católica aprueba para la santidad. En esa instancia, el obispo diocesano y postulador realizan una exhaustiva investigación con conocidos y allegados de la persona (en este caso, de Abraham y de Patricia Reyes), para comprobar, a través de sus testimonios, que en efecto tuvieron en vida un comportamiento ejemplar.
El Vaticano, a través de la Congregación para las Causas de los Santos, deberá examinar ahora el informe que presente la Arquidiócesis de Caracas. Posteriormente, dicta el decreto conocido como nihil obstat, diciendo que nada impide iniciar la causa. Una vez cumplido ese paso, el obispo diocesano dicta el decreto de introducción de la causa del siervo de Dios.
De aprobarse cada uno de los pasos y que Abraham y Patricia Reyes se conviertan en siervos de Dios, Venezuela pasaría a tener 22 personas con ese título del catolicismo.
Siervos de Dios de Venezuela
Hermana María Israel Bogotá Baquero; madre Ysabel Lagrange; madre Georgina; madre Lucía del Niño Jesús y de la Santa Faz; Monseñor Sixto Sosa Díaz; monseñor Arturo Celestino Álvarez; monseñor Eduardo Boza Masvidal; monseñor Tomás Antonio San Miguel; monseñor Miguel Antonio Salas; monseñor Salvador Montes de Oca; monseñor Luis Rafael Tinoco; Fray José Zapico; padre Martín Martínez; Arístides y Adelita Calvani; Medarda Piñero; Lucio León; María Esperanza de Bianchini; monseñor Martin Martínez Monsalve; el laico Lucio León; y la niña Amanda Gisell Ruiz.
