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- La situación económica, política y social de la isla caribeña lleva a los atletas a escapar de la dictadura apenas pueden salir de sus fronteras
El libro Historias de la emigración del béisbol cubano (1960-2018), del periodista Francys Romero, revela que desde 2019 han escapado del régimen cubano más de 100 prospectos deportivos.
Esta deserción data de 1961, año en el que se abolió el deporte profesional con la llegada de la revolución de Fidel Castro. Sin embargo, no fue sino hasta 1990 que las huidas comenzaron a darse en masa.
Según cifras oficiales cubanas, más de 800 deportistas han desertado en la última década.
Temor ante Juegos Olímpicos París 2024
El régimen de Miguel Díaz-Canel se mantiene alerta ante la cercanía de los Juegos Olímpicos de París 2024, que podrían generar “la pérdida de atletas campeones, mundialistas y grandes prospectos”.
“Veremos una merma en los resultados de Cuba en los Juegos Olímpicos, porque renovar y reponer las salidas no es fácil. Los atletas de élite no se forman en cuatro, ocho ni diez años y darles titularidad a segundas figuras no es una garantía de éxito inmediato al primer nivel”, expresó un experto cubano al portal Infobae.
En los últimos meses, Cuba ha preferido no enviar a competencias extranjeras a sus mejores atletas para evitar su deserción.
Uno de los casos conocidos es el de Juan Miguel Echeverría, un saltador de longitud. Su último evento competitivo fue en los Juegos Olímpicos de Tokio.
La información la reveló en Twitter el periodista español Gerardo Cebrían, quién escribió: “Malas noticias. El cubano Juan Miguel Echevarría, magnífico saltador de longitud, ha dejado el atletismo. Me cuentan que Cuba le ha apartado del equipo y que ahora actúa en una banda de música. ¿El motivo? Por esas cosas que pasan en Cuba relacionadas con las fugas de la isla”.
Casos conocidos
En marzo, el piragüista Fernando Dayán Jorge, campeón olímpico en Tokio 2020, abandonó a su grupo en una base de entrenamiento en México.
En junio, Cuba se quedó sin los atletas Jordán Díaz, Andy Díaz y Pedro Pablo Pichardo, este último campeón olímpico y actual líder del ranking mundial.
Un mes después, el Instituto Cubano de Deportes (Inder) confirmó a los medios cubanos que la atleta Yaimé Pérez, lanzadora de disco, abandonó su delegación en Estados Unidos, durante el Mundial de Atletismo de Eugene 2022. Como también lo hizo Yiselena Ballar Rojas, lanzadora de jabalina.
Estas fugas son consideradas por las autoridades deportivas de Cuba como “grave indisciplina”.
En casi todos los deportes cubanos, desde gimnastas, boxeadores, taekwondistas y jugadores de béisbol, se han reportado deserciones. La principal razón que argumentan es la económica, para estos atletas la oportunidad de competir en el extranjero representa la posibilidad de conseguir una mejor vida fuera de Cuba.
En el año 2014, el Consejo de Ministros de Cuba aprobó una política de remuneraciones que consideran insuficiente. “El incentivo se calcula en función de la categoría. Los medallistas olímpicos, que ocupan la cima de la escala, tendrán derecho a percibir un salario equivalente a 62 dólares mensuales, independiente de los bonos y premios que podrían ascender a los 3.547 dólares, en caso de conseguir la presea de oro”, explicó el cubano Emmanuel Reyes Pla al medio El Español.
El beisbol no escapa de esta realidad
El deporte estrella de la isla es el beisbol. De hecho, grandes estrellas cubanas pertenecen a la Major League Baseball (MLB).
Por eso, cada vez que hay un gran campeonato se revelan en los medios de comunicación nuevas deserciones cubanas. Un ejemplo de ello ocurrió durante el Campeonato Panamericano de Beisbol Sub23 en México, en junio de este año. Dos jugadores, Alfredo Fadraga, de 23 años de edad, y Yosvani Ávalos, de 21, quienes abandonaron a su selección durante un día de descanso. El sueño de estos beisbolistas es lograr un contrato millonario y estando en Cuba no pueden aspirar a alcanzarlo.
Fuentes consultadas por el medio El Español aseguran que mientras no se garantice un acuerdo entre la MLB y la Federación Cubana de Beisbol, seguirán ocurriendo casos de deserción. Miguel Fraga, funcionario de la Dirección de Estados Unidos del Ministerio de Relaciones Exteriores, explicó que la actual administración de Joe Biden no ha hecho nada para que se reanuden las negociaciones. Enfatizó que “los jugadores de béisbol cubanos que quieren labrarse un futuro parece que seguirán teniendo como única opción la de renunciar a su país”.
Previamente, existía un convenio que permitía a algunos jugadores cubanos firmar con clubes de Grandes Ligas, sin embargo fue cancelado durante el mandato de Donald Trump en 2018. Este pacto representaba que los peloteros no tenían que fugarse para alcanzar un contrato en EE UU.
