- El presidente Gustavo Petro autorizó en una resolución el traslado de Álvaro Córdoba, quien es solicitado por narcotráfico. Se espera que las autoridades estadounidenses envíen un avión en las próximas horas
El gobierno de Colombia confirmó el 23 de noviembre la extradición a Estados Unidos de Álvaro Córdoba, hermano de la senadora Piedad Córdoba. La medida se formalizó en la resolución 272, firmada por el presidente Gustavo Petro y con fecha del 18 de noviembre. Se espera que en las próximas horas llegue un avión de la Administración de Control de Drogas estadounidense (DEA) para su traslado hacia ese país.
El hermano de la senadora oficialista está solicitado por la Corte del Distrito Sur de Nueva York por los delitos de narcotráfico, porte ilícito de armas y asociación para delinquir. Sin embargo, la Corte Suprema de Justicia colombiana solo avaló el primer cargo.
La petición ya había sido autorizada por Petro el 7 de septiembre en la Resolución Ejecutiva Nº 196, pero fue apelada por los abogados de Córdoba. Ahora, las autoridades colombianas descartaron estos recursos y declararon procedente la extradición.
¿Quién es Álvaro Córdoba?
De acuerdo con el diario colombiano El Tiempo, Álvaro Fredy Córdoba Ruiz nació en Medellín y es nutricionista egresado de la Universidad de Antioquía, aunque también cuenta con estudios en Economía. A diferencia de su hermana, Álvaro no tuvo una carrera política destacada. En 2011 fue candidato a concejal en Medellín por el Partido Liberal, aunque sin éxito, pues apenas obtuvo 2.163 votos. Desde entonces, si bien era conocido en algunos sectores populares por su trabajo social y deportivo, mantuvo un perfil bajo.
Actualmente se encuentra recluido en la cárcel de La Picota, en Bogotá. Días antes de la toma de posesión de Gustavo Petro como presidente, en agosto, se difundió un video tomado por Córdoba mientras hacía ejercicio en el gimnasio del complejo penitenciario. Allí, además de insistir en su inocencia, se mostraba confiado de que el nuevo gobierno no aprobaría su extradición, aunque sí terminó ocurriendo.
Conexión importante
El tribunal de Nueva York ha señalado que posee evidencia sólida para imputar a Álvaro Córdoba. El fiscal auxiliar Benjamin W. Schrier, quien coordina la investigación, reportó en la solicitud de extradición que el hermano de la senadora asistió a reuniones de las disidencia de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC). Específicamente con la facción que estaba liderada por Miguel Botache Santillana, alias Gentil Duarte. Aparentemente, habría servido como eje para coordinar el envío de cocaína y armas a Estados Unidos.
Todo la información fue recogida por el agente de la DEA Mathew S. Passmore, a través de un agente encubierto. El funcionario, haciéndose pasar por un narcotraficante, registró las reuniones de Córdoba con comandantes de las FARC y carteles mexicanos. El acusado fungía como intermediario, siendo el contacto para hacer los negocios con las FARC en Bogotá y Medellín. El reporte detalla que Córdoba se caracterizaba por su discreción, evitando ostentar lujos y hablar de sus operaciones por teléfono. Casi siempre acordaba las reuniones presencialmente.
Una vez hecha la mediación, la guerrilla disponía de rutas y vehículos para transportar la mercancía hacia el océano Pacífico, en Tumaco (Nariño), Cauca y Buenaventura (Valle del Cauca). De acuerdo con la revista Semana, uno de los medios para sacar la droga era a través de una avioneta con matrícula estadounidense; o por vía marítima, haciendo escala en México.
Problemas familiares
Álvaro no es el único familiar de Piedad Córdoba que está bajo la lupa de las autoridades colombianas. A finales de octubre, la Corte Suprema le pidió a la Fiscalía investigar los ingresos sin justificar de 13 familiares de la senadora. La revista Semana indicó que el monto asciende a 6.000 millones de pesos (1,3 millones de dólares), los cuales fueron citados a declarar.
El foco de la medidas estaba en el hijo de la dirigente, Camilo Castro, quien debió justificar 1.407.140.806 pesos ($303.470). Esto debido a las investigaciones que pesan sobre Castro como Córdoba por sus presuntos vínculos con Nicolás Maduro y el empresario Alex Saab, actualmente detenido en Estados Unidos y señalado como uno de los mayores testaferros del régimen venezolano. Del propio Álvaro Córdoba también se contabilizaban alrededor de 465 millones de pesos ($100.284) sin declarar.
No obstante, desde 2021 el caso se reanudó con el testimonio de Andrés Vásquez Moreno, antiguo asesor de campaña de Córdoba. Entre los señalamientos que ha hecho, afirmó que la entonces congresista usó su papel como mediadora ante las FARC para obtener beneficios políticos y económicos, retrasando la liberación de personas secuestradas por la guerrilla. Intervino en los procesos de negociación con fines electorales y de propaganda, apoyada por el entonces gobierno de Hugo Chávez desde Venezuela.