- La organización advirtió que no hay continuidad ni uniformidad en las políticas de prevención de estos casos
Un informe del Observatorio Social Humanitario (OSH) reveló el aumento de 11 % en casos de suicidios registrados en Venezuela desde 2022. Reportaron que de 306 casos en 2020 subió a 341 víctimas en 2022.
El estudio del OSH se basa en datos del Observatorio Venezolano de Violencia, en el que además cuestiona que la falta de estadísticas oficiales confiables impiden que el Ministerio de Salud defina un programa permanente de prevención, y garantice la atención a la salud mental en centros asistenciales públicos.
La organización agregó que las causas que inciden en los suicidios incluyen problemas emocionales por limitaciones económicas, duelo migratorio, enfermedades crónicas y situaciones adversas en la cotidianidad.
De los 48 centros psiquiátricos públicos en el país, varios de ellos afrontan el deterioro en instalaciones, déficit de recursos y falta de personal.
— Observatorio Social Humanitario (@ObservatorioSH_) February 23, 2023
En Zulia, 8 de cada 10 personas reportaron síntomas de estrés.
La salud mental en Venezuela está en estado de Emergencia pic.twitter.com/o00G5fd5ew
Población afectada
El OSH refirió que en el primer trimestre de 2023 ocurrieron suicidios en adolescentes y adultos mayores por ahorcamiento, armas de fuego y envenenamiento.
Aarón Espinoza, presidente del Instituto de Previsión Social del Psicólogo (Inprepsi), explicó que las amenazas de suicidio se agravan por el estilo de vida, considerando que 1 por cada 100.000 habitantes consuma su intento de suicidio.
Agregó, durante un encuentro organizado por el OSH, que las angustias y presiones por la situación socioeconómica tienen gran peso ante la pérdida de la capacidad de tener un medio de vida debido a la crisis actual. A la vez que cuestionó la premisa de que hay que evitar la difusión de este tipo de noticias sin que se mida el impacto en la sociedad.
Víctor Méndez, presidente del Colegio de Psicólogos de Miranda, también participó en la reunión y acotó: “Sin información no se toman las medidas. Se necesitan estudios estadísticos que permitan orientar en la toma de conciencia”.

Prevención necesaria
Méndez señaló que pese a la falta de data oficial, las organizaciones tienen información sobre el incremento de consultas de ayuda psicológica, con los consultorios copados de pacientes. Consideró necesaria la vinculación de familiares de posibles víctimas y de grupos de apoyo.
Indicó que los familiares deben identificar los indicios que empiezan por depresión, tristeza, aislamiento, ansiedad y hasta pérdida del apetito o sueño.
Ambos expertos insistieron en que al panorama se le suma la inexistencia de políticas de salud mental y prevención del suicidio, la escasez y el alto costo de los medicamentos para tratar estos casos.
“Estamos considerando el efecto de la hiperinflación, que tiene un aumento exponencial y el efecto del duelo migratorio ha generado un impacto brutal en la familia, existe una presión producto de la tristeza por la ausencia de la persona”, manifestó Espinoza.
Explicó que todos estos aspectos pueden incidir en la salud mental de los venezolanos y generar un escenario de tristeza generalizada, denominado distimia.

Trabajo de las ONG
Sobre el trabajo de las organizaciones no gubernamentales (ONG) en temas relacionados con salud mental, Mendez destacó que la mayoría está orientada a una estrategia de psicoeducación, pero que la idea es que junto al Estado pueda llevarse adelante una acción coordinada.
Insistió en que existen organizaciones que están realizando acciones preventivas y de abordaje al suicidio, pero si ellas dan un estilo y una forma preventiva que no se concatena una con la otra, no habrá un impacto positivo.

Atención psicológica
Al ser consultados sobre los servicios de atención psicológica en Venezuela, Méndez y Espinoza aseguraron que hay un aumento sostenido de solicitudes para terapia psicológica que se evidencia en los distintos centros de salud en el país.
Sobre las medidas de prevención y atención de casos, Méndez explica que es importante hacer preguntas abiertas, esto también facilita la ventilación emocional de la persona, realizar una escucha activa sin interrumpir, demostrando a la persona que está siendo escuchada, mostrar empatía, la actitud acogedora y el interesarse por necesidades básicas; una buena socialización simplemente puede marcar la diferencia en estos casos.