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- Bendito celular, obra protagonizada por actores con síndrome de Down, ha tenido gran receptividad en las tablas nacionales desde finales de 2021
La Compañía Nacional de Teatro Down Apoye ha encontrado en sus obras oportunidades claras de inserción laboral para personas con síndrome de Down, en las que además el arte se convierte en el medio de expresión para sus protagonistas.
La obra Bendito celular es un ejemplo de los proyectos que emprende la compañía para que sus actores con síndrome de Down cuenten con un ingreso. La obra se estrenó el 3 de diciembre del año 2021, momento en el que el espectáculo venezolano seguía muy golpeado por los casi dos años de inactividad por la pandemia de covid-19.
Daniela Vielman, directora y productora de Bendito celular, reveló que el proceso de readaptación para volver a las tablas fue desafiante y extremadamente lento, porque muchas cosas habían cambiado en los teatros como el aforo y los horarios.
Desde ese momento el elenco de Bendito celular se ha presentado en escenarios como el Centro cultural Chacao, el teatro Rajatabla y el Trasnocho Cultural. Además, la obra ha ganado varios premios tanto por su calidad artística como por la labor social que representa.
“Ganamos el Premio Nacional doctor José Gregorio Hernández a la labor del Teatro Down y ganamos el Piscca, que es un reconocimiento que da la Embajada de Francia y el embajador Romain Nadal a programas con impacto positivo en la sociedad. Pero también obtuvimos el Premio de Teatro Marco Antonio Ettedgui y el Premio Nacional de la Crítica Teatral Venezolana, lo que es muy chévere porque la obra ha sido reconocida en varias maneras”, comentó.
La importancia de un trabajo remunerado para personas con síndrome de Down
Vielman indicó que en más de un año que lleva Bendito celular en los escenarios los actores con síndrome de Down han recibido una remuneración constante y el reconocimiento del entorno cultural venezolano.
La directora aclaró que esta experiencia se ha desarrollado como un empleo estable por ese periodo. Los protagonistas Alberto Sasson, Greyber Rngifo, Maru Bracho y Zamantha Landi cumplen horarios y criterios de trabajo todas las semanas para que el resultado sea el mejor posible.
Actualmente trabajan en la obra cuatro actores con síndrome de Down, quienes se benefician directamente de esta producción. Sin embargo, Vielman comentó que parte de las ganancias son para financiar la formación de 44 personas en la Compañía Nacional de Teatro Down Apoye.
La productora explicó que la compañía apoya a una alumna que también estudia Artes Plásticas y en alianza con el proyecto está diseñando franelas para vender. Vielman señaló que uno de los próximos objetivos de la compañía es el lanzamiento de esa línea de prendas de ropa.
Un proyecto que no se detiene
Vielman aseguró que en los próximos meses el objetivo de Bendito celular es recorrer varios teatros en todo el país y que tanto la historia de la obra como el mensaje de inclusión llegue a más espacios de Venezuela.
La productora define la obra como una “comedia comercial” que ofrece al público venezolano un espectáculo de calidad. Bendito celular retrata una serie de situaciones en las que el excesivo uso del teléfono móvil juega un papel determinante. Además, muestra cómo estos aparatos pueden generar en su dueño sentimientos tan diversos como la dependencia y el odio.
Pese al éxito que ha tenido esta obra, Vielman y el equipo de la compañía están trabajando en otras propuestas escénicas para este año.
Día Mundial del Síndrome de Down
Cada 21 de marzo se conmemora el Día Mundial del Síndrome de Down. Esta efeméride fue asignada por la Organización de Naciones Unidas en el año 2011 y se realizan actividades y campañas de concientización sobre el acceso a la salud y programas enfocados en estas personas en dicha fecha desde el año 2012.
La formación es clave
La Compañía Nacional de Teatro Down Apoye tiene 23 años brindando formación actoral a personas con discapacidad intelectual, específicamente con síndrome de Down. Daniela Vielman lleva cinco años dirigiendo la compañía y participando en el desarrollo de sus actores.
En su experiencia dentro de la compañía, Vielman ha desarrollado un método de enseñanza que parte del juego para lograr la creación de arte. En ese proceso, los alumnos trabajan para crear personajes, cuentos, sketches e incluso sus propias versiones de obras de teatro.
“Ellos están divididos en grupos según sus habilidades, capacidades y condiciones, pero en cuanto al contenido es similar para todos y a la hora de las prácticas no hay ninguna división de grupos”, detalló.
Vielman agregó que la experiencia de formación de personas con síndrome de Down también deja valiosas enseñanzas en los profesores de la compañía.
“Trabajar con cualquier persona que tenga alguna discapacidad deja muchos aprendizajes, pero cuando son personas con discapacidad intelectual esas enseñanzas vienen en distintos niveles. No es nada más lo que uno va a aprender sobre hacer teatro, sino que aprendes sobre sus vivencias, sobre humanidad, compañerismo y solidaridad”, aseguró.
Un llamado a la inclusión
Vielman hizo un llamado a las empresas e iniciativas para que consideren brindan más oportunidades de inserción laboral a personas con discapacidad intelectual.
Alegó que también se puede respaldar a organizaciones como Apoye, su compañía de teatro y sus otros programas de formación para personas con síndrome de Down.
“Todo lo que nosotros hacemos es para que la gente no solamente vea la obra y se divierta sino que además se involucre con el tema del síndrome Down, de la inclusión y que cada vez sea más normal dentro de todos los entornos”, añadió
Instó a quienes tengan dudas sobre estas experiencias que vean proyectos como Bendito celular para ser testigo de una oportunidad de inserción laboral exitosa. Asimismo, invitó a los aficionados del teatro a disfrutar de la obra para que el proyecto siga siendo sustentable.
