- El organismo internacional se ofreció para trabajar con los gobiernos de los países donde se realizan los grandes movimientos migratorios para establecer rutas más seguras para los migrantes
El secretario general de las Naciones Unidas (ONU), António Guterres, expresó su “profunda tristeza” por la muerte de al menos 40 migrantes en un incendio en una estación del Instituto Nacional de Migración (INM) ubicada en Ciudad Juárez, México, y pidió una investigación exhaustiva sobre lo ocurrido.
El diplomático portugués ofreció sus condolencias a las familias y seres queridos de los fallecidos, a través de un breve comunicado transmitido por su portavoz, Stéphane Dujarric, el martes 28 de marzo.
Además, Dujarric insistió en el compromiso de Naciones Unidas de trabajar con las autoridades de los países donde se producen movimientos de personas migratorias “para establecer rutas más seguras, reguladas y organizadas”.
Por su parte, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, responsabilizó a una protesta de migrantes por el incendio.
La presencia de migrantes en la zona se ha intensificado este año desde que Estados Unidos anunció nuevas medidas, que incluyen la deportación inmediata de ciudadanos de Haití, Venezuela, Nicaragua y Cuba que lleguen ilegalmente bajo el Título 42.

Críticas contra el gobierno mexicano por el trato hacia los migrantes
El gobierno mexicano también ha sido objeto de críticas por parte de organizaciones de derechos humanos por aceptar las políticas estadounidenses y desplegar a más de 20.000 elementos de las Fuerzas Armadas en las fronteras para tareas migratorias.
Según organizaciones civiles mexicanas, 2022 fue el año más trágico para los migrantes en México, pues unos 900 murieron en el intento de cruzar desde el país hacia Estados Unidos.
La región vive un flujo migratorio récord, con 2,76 millones de migrantes detenidos en la frontera de Estados Unidos con México en el año fiscal 2022.

Otras reacciones internacionales ante la tragedia
La muerte de los 40 migrantes también ha generado reacciones por parte de otros gobiernos, como es el caso de Estados Unidos que ofreció cualquier tipo de ayuda que las autoridades mexicanas pudieran necesitar mientras investigan las causas del incendio.
Patel subrayó que “esta tragedia es un recordatorio desgarrador de los riesgos que enfrentan los migrantes y refugiados en todo el mundo”.

Por su parte, el canciller de Guatemala, Mario Bucaro, responsabilizó a las redes de traficantes de personas, conocidas como “coyotes”, de la muerte de los migrantes.
“Esperamos poder tener identificadas a todas las víctimas en las próximas 48 horas y comunicarnos con sus familiares”, destacó durante una conferencia de prensa.
Bucaro confirmó que las autoridades mexicanas iban a deportar a los 28 guatemaltecos que fallecieron durante el incendio.
Con información de EFE