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- Las autoridades de Panamá revelaron que, en lo que va de año, han ingresado a su territorio alrededor de 400 mil migrantes
Al cierre del mes de septiembre, unos 400 mil migrantes de diversas nacionalidades habían atravesado la selva del Darién durante 2023, de acuerdo con las cifras de las autoridades de Panamá. La mayoría de los viajeros eran venezolanos que intentaban llegar a Estados Unidos.
Esta zona entre Colombia y Panamá es, según el director de Medianálisis Andrés Cañizález, el corredor migratorio más grande de América Latina y el Caribe.
Las autoridades migratorias panameñas dieron la cifra de esos primeros nueve meses de 2023 y al compararlas con años anteriores se evidencia el aumento. En 2022, se registraron 248 mil, mientras que en 2021 hubo 133 mil.
De los 400 mil registrados en lo que va de 2023, más de 252 mil eran venezolanos, es decir, más de la mitad del total de migrantes transitaron esa ruta migratoria.
Le siguen los ecuatorianos, con 47.724, colombianos con 13.404 y casi 40 mil provienen de Caribe. Otros vienen de Asia y África : 27.878 y 7.389 respectivamente.
Medio millón de migrantes
Panamá estima que de continuar este ritmo, a finales de año habrán ingresado a través de la zona selvática más de medio millón de personas. Además, advirtieron que a pesar de la medida anunciada el 5 de octubre, sobre las deportaciones aéreas desde Estados Unidos para migrantes venezolanos, no se ha detenido el flujo migratorio.
Esta prohibición se une a la que fue implementada previamente, que consistía en restringir el ingreso a EE UU por la frontera con México si no se contaba con un permiso o una cita. Estas devoluciones a México tampoco frenaron el arribo de venezolanos, señaló Cañizales.
“La actual ola migratoria, sin precedentes en su expresión masiva a través del Darién, originó que las autoridades de Panamá aplicaran una política de mayor control. El gobierno de Laurentino Cortizo anunció el 8 de septiembre el refuerzo de las deportaciones y las expulsiones de los ciudadanos irregulares que tengan antecedentes penales. Durante dos semanas de aplicación, en septiembre, 452 migrantes ya fueron retornados a sus países de origen bajo esta medida, según las cifras oficiales”, indicó el director de Medianálisis en una nota publicada por el medio Radio Fe y Alegría.
Agregó que Costa Rica declaró emergencia nacional, el 26 de septiembre, como medida de limitar el paso de extranjeros por su territorio. Sin embargo, tampoco logró frenar la cantidad de migrantes que llegan.
Cifras de Panamá
Las autoridades de Panamá revelaron recientemente que alrededor del 25 % del flujo migratorio de este 2023 lo constituyen niños, niñas y adolescentes. Este país es el único en América que toma los datos biométricos a los migrantes en unas estaciones situadas en sus fronteras del Darién, en el sur y límite con Colombia, y de Chiriquí, en el norte y fronteriza con Costa Rica.
También ofrece asistencia sanitaria y de alimentación, un operativo en el que ha invertido más de 70 millones de dólares según las cifras oficiales.
Ante este panorama, varios países claman por más cooperación internacional para administrar el creciente flujo migratorio, que ha llevado al límite de las capacidades a las naciones que son usadas como rutas de tránsito.
Denuncias de la ONU
La Oficina de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) para los Derechos Humanos expresó su preocupación por las “múltiples violaciones y abusos” a los que se enfrentan los migrantes que atraviesan el Tapón del Darién.
“Los migrantes están expuestos a múltiples violaciones y abusos de los derechos humanos durante su viaje, incluida la violencia sexual, que supone un riesgo especial para los niños, las mujeres, las personas del colectivo LGBTI y las personas con discapacidad”, indicó Marta Hurtado, portavoz de la oficina de la ONU en rueda de prensa el martes 5 de septiembre.
Entre estas violaciones, Hurtado destacó que la población migrante es víctima de asesinatos, desapariciones, trata de personas, robos, así como intimidación por parte de grupos del crimen organizado.
Por ello, la oficina de Naciones Unidas instó a la comunidad internacional a seguir fortaleciendo sus apoyos y pidió a ambos países que aborden los “factores estructurales” que obligan a estas personas a abandonar sus hogares y emprender estos viajes en busca de una vida “más digna y segura” para ellos y sus familias.
Capacidad de atención médica
La organización humanitaria Médicos Sin Fronteras (MSF) expresó su preocupación por los peligros que enfrentan las personas que cruzan el Tapón del Darién, una cifra que va en aumento pese a las advertencias de las autoridades panameñas y colombianas sobre los riesgos que implican transitar por esta selva.
MSF alertó que el gobierno panameño y las organizaciones humanitarias que atienden en las tres estaciones de recepción de migrantes que hay en el lado panameño no pueden atender la demanda de personas que llegan a este cruce fronterizo.
En agosto de 2023, al menos 79.455 migrantes entraron a la selva. De esta cifra, 18.184 son menores de edad, de acuerdo con estadísticas del Servicio Nacional de Migración y Ministerio de Seguridad Pública de Panamá.
Este organismo humanitario, junto a agencias de la ONU y otras ONG, está en la capacidad de atender a 250 personas, pero actualmente la cifra de migrantes asciende a más de 2.000.
