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- La víctima murió de un disparo cuando lo robaron en su casa
El incidente se conoció el 23 de septiembre en la parroquia Teresén cuando el Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (CICPC) fue notificado sobre el ingreso de una persona herida al Hospital Doctor José Antonio Urrestarazu.
La comisión policial, según el informe publicado el viernes 27 de octubre, conversó con uno de los socios comerciales de la víctima, quien explicó que el comerciante fue sorprendido en su casa por desconocidos que le dispararon para robarlo.
“El herido llegó a su vivienda en compañía de su esposa e hijas cuando fue sorprendido por desconocidos armados. Los atacantes lo despojaron de un bolso contentivo de divisas extranjeras en efectivo y le propinaron un disparo que lo alcanzó en su camioneta”, detalló el MP.
Vecinos ubicaron a los presuntos autores del crimen
Durante la inspección del lugar, los funcionarios encontraron dos casquillos de bala de pistola 9 milímetros. Además vecinos de la zona alertaron a los funcionarios que habían ubicado a uno de los responsables.
“En la revisión a López Campos se le encontraron dos municiones de marca Cavim y calibre 38 milímetros que conllevaron a su aprehensión en flagrancia”, explicó el MP.
La comisión del CICPC a cargo de las investigaciones recibió una llamada telefónica anónima en la que les informaron la ubicación del otro presunto atacante en el sector Santo Domingo.
Los funcionarios detuvieron a Adamo López, quien fue descubierto con un bolso que contenía 2.000 dólares en efectivo y un arma de fuego.
A la orden del Ministerio Público
La Fiscalía 4° de Monagas imputó a los detenidos como presuntos coautores de homicidio calificado “con alevosía en la ejecución de un robo en grado de frustración”.
Además, Campos López fue acusado por presunta posesión ilegal de municiones. Mientras que Adamo López enfrenta cargos por presunta comisión de porte ilícito de arma de fuego.
El Tribunal 2° de Control de Monagas ratificó la orden de arresto contra los agresores y fijó su reclusión en el Internado Judicial de Monagas, conocida como la cárcel de La Pica, en Maturín.
