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- Las autoridades panameñas confirmaron que otras 23 personas que viajaban en el bote siguen desaparecidas
El Servicio Nacional de Fronteras (Senafront) de Panamá confirmó el hallazgo de cuatro cuerpos de migrantes, entre ellos un menor de edad, tras naufragar una embarcación en el Caribe de Panamá el 14 de febrero.
El organismo detalló en un comunicado divulgado el 15 de febrero que en la embarcación viajaban 27 migrantes y que el mayor número de personas era de Afganistán.
De acuerdo con la información oficial, los cuatro fallecidos son un menor de edad, un hombre y dos mujeres.
Los servicios de rescate encontraron los cuerpos encallados en una área de riscos ubicada en Punta Carreto, en el Caribe panameño justo frente a la selva del Darién.
“Nuestro personal llega sobre las 4:00 pm al lugar inaccesible y muy lejos de las áreas urbanas de Carreto. Allí pudimos ubicar cuatro cuerpos sin vida, que producto del oleaje se encallan en la área de los riscos”, indicó el director de Senafront, Jorge Luis Gobea.
Búsqueda de desaparecidos
Las autoridades panameñas señalaron en el comunicado que continuarán la búsqueda de los otros migrantes desaparecidos.
El Senafrontinformó que los migrantes eran trasladados cerca de la frontera entre Colombia y Panamá, en una zona peligrosa del mar, cuando la embarcación naufragó debido al mal tiempo.
Esa área, según indicaron las autoridades, es muy compleja para su navegación debido a los fuertes oleajes producto de las corrientes y los vientos. Dependiendo de la época del año, se registran fuertes lluvias, lo que complica la llegada segura a puerto.
“En esta época del año, el mal tiempo suele ser un factor consistente para las embarcaciones en ambos litorales especialmente para aquellas que se movilizan desde la clandestinidad de la migración irregular y los criminales que se dedican al tráfico ilícito de migrantes”, dice la nota del Senafront.
Ruta peligrosa
El área del mar Caribe es usada por los migrantes desde Colombia para evitar pasar a pie por la selva del Darién, sin embargo, esta ruta también es peligrosa. De acuerdo con las cifras oficiales, en noviembre de 2023, las fuerzas de seguridad panameñas rescataron a 11 migrantes chinos que habían sido abandonados en un bote en el Caribe.
El Servicio Nacional de Migración de Panamá (SMN) adelantó recientemente que se espera que este 2024 aumente en hasta un 20 % el número de migrantes que cruzan por la selva del Darién.
“La mala noticia es que ya en lo que va del año llevamos 40.739 personas que han ingresado por el Darién. Lo más probable es que este año haya un número mucho mayor que el número que tuvimos el año pasado”, dijo el 5 de febrero en una rueda de prensa la directora del SMN, Samira Gozaine.
Medidas para frenar la ola migratoria
Panamá advirtió en 2023 que iba a intensificar las deportaciones y las expulsiones de los ciudadanos irregulares que tengan antecedentes penales, por incumplimiento del perfil humanitario requerido para que sigan su camino hacia el norte.
Gozaine agregó que el país caribeño continuará haciendo los exámenes biométricos para asegurar que los migrantes con antecedentes no se queden dentro del territorio, ni le hagan daño a sus nacionales, ni a la región.
Panamá es el único país de América que toma los datos biométricos a los migrantes en varias estaciones en sus fronteras, en las que además ofrecen asistencia sanitaria y de alimentación.
El aumento de migrantes por el Darién en su trayecto hacia Estados Unidos o Canadá en busca de mejores condiciones de vida ha sido progresivo desde el año 2021, llegando a la cifra récord de más de 520 mil en 2023.
