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- Con plantas termoeléctricas paralizadas y con una producción por debajo de la demanda, la prestación del servicio eléctrico para todo el país cada vez es más difícil
Las constantes fluctuaciones de luz continúan evidenciando el mal estado del Sistema Eléctrico Nacional (SEN) de Venezuela, el cual se ha deteriorado durante la última década debido a la falta de mantenimiento preventivo en las plantas eléctricas.
Desde el apagón nacional del 7 de marzo de 2019, el panorama no ha cambiado y el país sigue sin generar lo que se demanda. “Las inversiones han sido muy puntuales y no han sido de mantenimiento preventivo, sino de mantenimiento estrictamente correctivo, que tampoco ha sido de forma inmediata”, explicó un experto en el sector, quien prefirió no compartir su identidad, en entrevista para El Diario.
El especialista indicó que en el país hay un equipo que sufre “fatiga” por el tiempo de uso y que se debe cambiar para garantizar la prestación y continuidad del servicio eléctrico. Sin embargo, comentó que no es algo que las autoridades estén haciendo y lo que se conoce es que no hay equipo para sustituirlos, debido a que dos grandes suplidores de estos materiales mantienen un embargo contra el país.
A su juicio, no hay razones que justifiquen el estado actual del SEN, ya que se han podido comprar equipos de otros países como Japón para reemplazar los que están dañados por deterioro o porque terminaron su tiempo de vida útil.
“Las inversiones que inicialmente se hicieron, donde se comentó insistentemente que Venezuela había adquirido a través de Cuba una triangulación de unas plantas eléctricas que venían a estabilizar el sistema eléctrico nacional, hoy en día no hay ninguna en servicio”, contó.
El experto indicó que esas plantas, que actualmente no aportan nada, fueron adquiridas a “precios exorbitantes” como nuevas y realmente fueron plantas remanufacturadas.
No se produce lo que se demanda
La demanda de energía eléctrica en Venezuela pasó de 23.000 aproximadamente, con una producción similar, a 17.000 megavatios. De acuerdo con el experto eléctrico, el país solo está generando 14.000 megavatios y a eso se deben las constantes fallas eléctricas, sobre todo en el interior del país.
Además, recordó que actualmente solo la central hidroeléctrica del Guri está produciendo poco más del 70 % de la energía eléctrica que demanda el país, pero debido a que se tiene un sistema de transmisión “viejo”, se continúan registrando múltiples fallas.
“No puede transmitirse más energía a través de las líneas de transmisión de la red Troncal (que consiste en 8 líneas de alto voltaje que transmiten la energía que sale del Guri al resto de Venezuela). Tampoco tenemos cómo hacer nuevas líneas. Al menos, eso es lo que dicen”, aseguró.
Fallas eléctricas en el interior del país
El experto en el sector explicó que en la cola del sistema de transmisión están estados como Carabobo, Falcón, Trujillo, Mérida, Táchira y Zulia, que son los que más sufren las repercusiones de la falta de mantenimiento e infraestructura actualizada.
“La mayoría de los estados del occidente del país, por ser la cola del sistema, no tienen respaldo con sistema termoeléctrico, porque por eso se hizo el anillo, que se desarrolló a nivel nacional para tener una generación termoeléctrica y una hidroeléctrica”, agregó.
Cuando la hidroeléctrica no llegaba con suficiente potencia por la distancia, se compensaba a través de la termoeléctrica. No obstante, especialistas han señalado que las plantas termoeléctricas más importantes, que antes pertenecían a la Electricidad de Caracas, están en ruina por la falta de mantenimiento y de inversión.
Sostuvo que ahora la inversión debe ser mucho más grande para recuperar el sector y se requiere de mucho tiempo para hacerlo.
¿Por qué se generan los cortes de luz?
El especialista detalló que los apagones se producen debido a que se le exige mucho al sistema, que cuando no soporta la carga, ocurren los cortes de luz para que no haya un colapso en el SEN.
“Sacan la energía eléctrica, lo que ellos llaman administración de carga, que no es más que un racionamiento de carga para evitar que el sistema eléctrico nacional salga por completo.
Inclusive una vez que sacan todos esos bloques de carga para mantener el sistema, si el consumo sube mucho, hay una fluctuación importante en el voltaje”, explicó.Precisó que esa es la razón por la que se queman aparatos y hay severos cortes de luz en estados como Guárico, Apure, Táchira, Mérida, Trujillo y Zulia.
Fuga de talento humano
El especialista en el sector eléctrico comentó que además de los problemas estructurales, se ha registrado una importante fuga de capacidades en la Corporación Eléctrica Nacional (Corpoelec) en todo el país.
“Los mejores técnicos, los mejores ingenieros tuvieron que emigrar por una crisis salarial que hay en la empresa que mantiene a todo el mundo pegado a la pared. La gente depende de un bono que se asigna de manera discriminatoria por los altos jerarcas de la empresa”, aseguró.
En este sentido, indicó que los trabajadores del sector subsisten con un sueldo de entre 400 y 500 bolívares, equivalentes a 11,05 y 13,82 dólares, respectivamente, de acuerdo con la tasa del 7 de marzo del Banco Central de Venezuela (BCV). Aparte, reciben un bono de corresponsabilidad de 50 dólares y el de alimentación de 40 dólares.
“Son salarios que realmente no alcanzan para cubrir la necesidad de una familia. Eso ha generado como consecuencia la fuga de talentos al exterior. Hay expertos venezolanos trabajando en Estados Unidos, Argentina, Chile, Perú y en países de Europa”, aseguró.
Más del 76 % de los venezolanos percibe negativamente la calidad del servicio eléctrico
Un informe publicado por el Observatorio Venezolano de Servicios Públicos (OVSP) en noviembre de 2023, reveló que el 76,6 % de los consultados evaluó de forma negativa la calidad del servicio eléctrico que reciben en sus hogares.
La cifra representó un incremento de 33,5 puntos porcentuales respecto al 43,2 % de valoración desfavorable en marzo de 2023.
De acuerdo con el OVSP, la insatisfacción ciudadana con el servicio se debe principalmente a las frecuentes fluctuaciones e interrupciones que persisten en el suministro eléctrico nacional.
Comentó que lo ideal sería equilibrar el sistema trabajando con 50 % de energía generada a través de la hidroelectricidad y otro 50 % por generadores termoeléctricos. No obstante, señaló que reparar o poner en funcionamiento las plantas termoeléctricas en el país necesita de una inversión y tiempo importante.
En este sentido, es necesario una política que garantice que los recursos que se asignen sean verdaderamente gastados en el sistema eléctrico, tanto en la parte hidroeléctrica como en la parte termoeléctrica.
“Si no hay una política clara, no vamos a tener la posibilidad de mejorar el sistema eléctrico”, enfatizó.
