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- Las autoridades migratorias han registrado un aumento en los pedidos de asilo entre enero y agosto de este año
El gobierno de Brasil anunció que endurecerá las normas para los viajeros en tránsito, con el fin de evitar el uso “abusivo” de las solicitudes de asilo.
Los agentes migratorios obligarán a partir del lunes 26 de agosto a que las personas que desembarcan en los aeropuertos brasileños sin visado de entrada y con destino a otros países continúen su trayecto o vuelvan a los puntos de origen.
Con estas nuevas reglas, el gobierno brasileño busca impedir que pasajeros supuestamente en tránsito desistan de su vuelo de conexión, permanezcan en el aeropuerto y luego pidan asilo para quedarse en el país.
El Ministerio de Justicia de Brasil aseguró en un comunicado enviado a la agencia de noticias EFE que la nueva medida es legal.
El ente judicial agregó que con esta norma se busca combatir el tráfico de personas y proteger el acceso al refugio para aquellos que “efectivamente necesiten protección internacional”.
Pedidos de asilo en Brasil
De acuerdo con las cifras oficiales, actualmente hay 481 extranjeros en el área restringida del aeropuerto internacional de Guarulhos, en São Paulo.
Estas personas tendrán que tramitar sus solicitudes de asilo antes del 26 de agosto, día en el que entrará en vigencia la nueva política migratoria.
La Policía Federal de Brasil realizó investigaciones y concluyó que las organizaciones criminales recomiendan a los migrantes, en su mayoría de países asiáticos, pedir refugio “en sustitución indebida al visado de entrada”.
Para reforzar esta teoría, las autoridades señalaron que han registrado un aumento “drástico” del número de peticiones en el aeropuerto de Guarulhos, donde pasaron de 69 en 2013 a 4.239 en 2023 y 6.329 entre enero y agosto de este año.
Cifras de solicitantes de asilo
De los 8.300 pedidos registrados desde 2023, apenas 117 personas solicitaron el Registro Nacional Migratorio y solo 262 tramitaron el número de identificación con el que se accede a los servicios públicos de salud y de educación en Brasil.
De acuerdo con las investigaciones, esto revela que la finalidad de los solicitantes de asilo no era quedarse a vivir en Brasil, sino continuar el camino hasta Estados Unidos o Canadá de forma irregular.
Las autoridades migratorias también señalaron que en varias ocasiones, a lo largo de los últimos dos años, cientos de migrantes permanecieron durante semanas en el aeropuerto de Guarulhos a la espera de que las autoridades tramitaran sus pedidos de asilo, mientras vivían en campamentos improvisados sin las mínimas condiciones de higiene.
Entre los viajeros acampados, había familias afganas que huyeron de su país después de que los talibanes tomaran el poder y que buscaban iniciar una nueva vida.
En Brasil, hay 477.493 migrantes venezolanos de los que alrededor de 94.500 han solicitado condición de refugio, de acuerdo con cifras de la organización Movilidad Venezuela.
Con información de EFE
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