La norma del celibato en la Iglesia católica ha sido uno de los cambios más significativos de la religión en relación con sus representantes a lo largo de los siglos.
Las declaraciones del recién fallecido papa Francisco al medio de comunicación Latinus han reavivado el debate sobre la viabilidad de eliminar la exigencia del celibato en el sacerdocio.
“En la Iglesia católica oriental hay sacerdotes casados, por lo que no hay ninguna contradicción para que un sacerdote se pueda casar. El celibato en la Iglesia occidental es una prescripción (…) que podría revisarse”, expresó el papa Francisco en 2023.
Luego de esta entrevista, Francisco no mencionó el tema de manera oficial.
Los primeros 39 papas estuvieron casados
En un artículo publicado por la cadena de noticias BBC Mundo, se cita un texto del Vaticano que admite que los primeros obispos, diáconos y papas de la Iglesia “eran hombres casados”.
“Los 39 primeros papas eran hombres casados”, afirmó Linda Pinto, copresidenta del movimiento Católicos por el Derecho a Decidir, en una entrevista para la cadena inglesa.
Por su parte, la profesora Kim Haines-Eitzen, de la Universidad de Cornell (EE UU), reiteró que los primeros del catolicismo eran hombres casados.
De acuerdo con su testimonio, la obligación del celibato comenzó a imponerse cuando se extendió desde sus raíces judías hasta la época grecorromana; en el que también se impuso a los sacerdotes las prácticas del autocontrol y la soledad para “seguir el camino de Jesucristo”.
Haines-Eitzen señaló que después de que el emperador Constantino proclamó el cristianismo como religión del Estado, entre los años 306–337, el rol de papa combinó responsabilidades religiosas con políticas.
“Era habitual que papas, obispos y sacerdotes se casaran y tuvieran concubinas. Todo esto, junto con la inmoralidad sexual durante la ‘edad oscura’ del papado, así como el problema de la simonía -la venta de cargos y funciones eclesiásticas para ganar dinero-, impulsó a Gregorio a iniciar importantes reformas en la Iglesia (entre el año 500 y 600)”, explicó Niamh Middleton, profesora de teología y filosofía en la Universidad de Dublín, en Irlanda.
Diarmaid MacCulloch, catedrático de Historia de la Iglesia en el St Cross College de la Universidad de Oxford, afirmó a BBC Mundo que las actuales opiniones de la Iglesia católica sobre el celibato se formaron en gran medida a partir de una “colección de ideas teológicas formadas en los siglos XI y XII”.
¿Por qué actualmente el celibato es una obligación?
Los investigadores coincidieron que la idea de que los sacerdotes sean célibes proviene del Nuevo Testamento y de la forma en la que describe a Jesús, como un hombre “limpio y puro”, del que no se menciona esposa en la Biblia.
Además, en el evangelio de Mateo en el capítulo 19, el propio Jesucristo recomienda el celibato como una forma de alcanzar “el reino de los cielos”.
En cuanto a las escrituras hechas por el apóstol Pablo, recomienda que los curas sean solteros y célibes, sin embargo, sugirió que los obeliscos con mayor rango sí debían casarse.
La imposición del celibato tomó fuerza cuando fue apoyada por San Agustín y Santo Tomás de Aquino, quienes lo promovían como una forma de dedicarse con mayor dedicación a la búsqueda espiritual.
Es por eso que en el año 692, el Concilio de Trullo (reunión eclesiástica) estableció el celibato como requisito obligatorio para los obispos y monjas.
