- De acuerdo con los datos de las agencias de las Naciones Unidas, cada dos minutos muere una mujer embarazada o en proceso de parto en el mundo
La Organización de las Naciones Unidas (ONU) publicó un informe sobre la mortalidad materna en el mundo, en el que se revelaron datos sobre el incremento de este indicador en Venezuela desde el año 2000 hasta 2020.
El documento indica que durante esos 20 años Venezuela registró un aumento de 182,8 % en la mortalidad materna. La tendencia que se evidenció en el país es contraria a la mundial, debido a que en ese mismo periodo se redujo el promedio global de estas muertes.
Los datos de la ONU aseguran que en el año 2020 hubo 259 muertes maternas por cada 100.000 nacimientos, mientras que en el año 2000 el indicador era de 92 muertes maternas por cada 100.000 nacimientos.

Mortalidad materna en el mundo
Pese a que el informe revela una reducción de la mortalidad materna entre los años 2000 y 2020, la ONU alerta que en varias regiones estos números se estancaron, lo que representa un riesgo para la vida de millones de mujeres.
El informe de tendencias de mortalidad materna señaló que en el año 2020 hubo 287.000 decesos de este tipo en todo el mundo. Esta cifra representa un pequeño descenso en comparación con las 309.000 muertes registradas en 2016, cuando se acordaron los objetivos de desarrollo sostenible.
La ONU evaluó ocho regiones, de las cuales Europa y América del Norte presentaron un aumento de 17 % en la mortalidad materna, mientras que Latinoamérica y el Caribe mostró un incremento de 15 % entre 2016 y 2020.
Las regiones con mayores avances
El informe aclaró que hay pronósticos alentadores en otras regiones. Las zonas de Australia y Nueva Zelanda registraron un descenso de 35 % en la mortalidad materna, mientras que en Asia Central y Meridional se redujo 16 %.
La ONU enfatizó en que el acceso a servicios médicos primarios y críticos es fundamental para lograr un descenso significativo en la mortalidad materna para este año 2023.

El documento detalla que las hemorragias graves, la hipertensión, las infecciones relacionadas con el embarazo, las complicaciones derivadas de abortos inseguros y las enfermedades subyacentes que pueden agravarse con el embarazo, como el sida y el paludismo, son las principales causas de mortalidad materna.
Todas estas condiciones son prevenibles o tratables en cierta medida, por lo que, la ONU insiste en priorizar la atención sanitaria respetuosa y de alta calidad para las mujeres embarazadas.