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- Las herramientas aplicadas a través de la tecnología generan preocupación en trabajadores de la industria del entretenimiento
El auge de la inteligencia artificial (IA) no solo consolidó el avance de los chatbots capaces de responder como seres humanos a las inquietudes planteadas por los usuarios en línea, sino que también ha generado incertidumbre en torno a la posible desaparición de varios empleos en el futuro.
Numerosas publicaciones han hecho ver la posibilidad de que la IA sustituya algunos roles laborales, entre ellos se encuentran trabajos de la industria cinematográfica y el entretenimiento.
Un análisis del diario estadounidense NPR reveló que tanto los actores de reparto como las figuras en la industria del cine de Hollywood están expresando su inquietud, debido a que temen ser reemplazados por la tecnología.
Réplicas digitales
Alexandria Rubalcaba, actriz que participó en la serie WandaVision, producida por Disney+, compartió su experiencia durante el rodaje de esta producción y la implementación de escáneres digitales.
“Varios actores se pararon frente a unas cámaras dispuestas en plataformas metálicas detrás de un vidrio para mostrar determinadas expresiones faciales”, contó la actriz a NPR.
A través de este proceso, la empresa productora creó una representación digital de una persona al escanear su rostro y su cuerpo durante 15 minutos.
Sin embargo, más allá de la creación de estas réplicas digitales, lo que algunos especialistas plantean como una amenaza para la trayectoria de los actores, es la falta de claridad sobre cómo se emplearán estas duplicaciones digitales y cómo sería la compensación económica por su uso en producciones cinematográficas.
Los vacíos legales
Rubalcaba aclaró en la entrevista que nunca le informaron sobre el uso que se le darían a su ”doble” digital y que tampoco se le remuneraba por su aparición en la serie.
Además, señaló que no dio autorización para que su representación digital fuera utilizada en segundo plano en ninguna escena.
Ante este panorama, la actriz teme que su imagen sea incorporada en futuras creaciones ficticias en las cuales preferiría no participar.
“¿Qué sucede si no deseo formar parte de “MarioVision” o “SarahVision”? Temo que la IA eventualmente relegará a los actores secundarios. Nuestra presencia ya no será necesaria”, manifestó Rubalcaba.
Inteligencia artificial: otro factor de protesta en el Sindicato de Actores de Hollywood
La capacidad potencial de la inteligencia artificial para reemplazar a los actores secundarios es uno de los temas centrales en la actual huelga del Sindicato de Actores de Cine y Federación de Artistas de Radio y Televisión de Estados Unidos (SAG-AFTRA), marcando el conflicto laboral más significativo en Hollywood desde la década de los 60.
Los actores de reparto no forman parte del llamado “elenco principal”, lo que implica que sus roles suelen carecer de diálogo y se destinan en su mayoría a crear una atmósfera auténtica en las escenas.
Sin embargo, con la llegada de la IA, un negociador sindical declaró a The Verge que los estudios se han ofrecido a remunerar a los actores secundarios después de ser escaneados pero que la imagen digital del actor podría ser reutilizada indefinidamente.
Al mismo tiempo, el diario NPR reportó que los estudios están en contra de esta interpretación, sosteniendo que la representación digital de un actor de reparto solo se utilizaría en proyectos para los cuales el actor fue contratado y no en producciones futuras sin límite definido.
Actores contra la inteligencia artificial
La Comisión Federal de Comercio de los Estados Unidos (FTC), en sus esfuerzos de supervisión, también ha comenzado a indagar en OpenAI, creadora de ChatGPT.
La FTC se encuentra en el proceso de examinar las prácticas de recopilación de datos llevadas a cabo por la compañía, así como su capacidad potencial para difundir información imprecisa entre los consumidores.
En otro caso, la comediante Sarah Silverman inició una demanda contra OpenAI y Meta, alegando que estas empresas violan derechos de autor al supuestamente entrenar sus sistemas de inteligencia artificial utilizando su libro The Bedwetter, reportó el sitio web Wired.
