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- La desaceleración de la actividad comercial en 2023 y la inestabilidad cambiaria reduce las ventas en los distintos sectores del país
Los empresarios y comerciantes, al igual que los consumidores, han experimentado los efectos directos del repunte de la inflación en Venezuela que no solo ha reducido la capacidad de compra de la población sino que ha ralentizado las ventas. Es por ello que las promociones y las ofertas en determinados productos se ha convertido en la estrategia a seguir para motivar la salida de los artículos de los anaqueles.
En julio, de acuerdo con los datos oficiales del Banco Central de Venezuela (BCV), la inflación fue de 6,2 % mientras la acumulada llegó a 121,3 %. Solo durante el primer semestre de 2023, el bolívar perdió un 37,34 % de su valor.
Por su parte, el Observatorio Venezolano de Finanzas (OVF) prevé que la inflación en agosto de 2023 pueda continuar su carrera ascendente. Asimismo, la cotización del dólar (referencia para fijar precios en el país) mantiene un ascenso en torno al 7 % durante el mes de agosto de acuerdo con la consultora Síntesis Financiera.
El economista y miembro de la consultora Ecoanalítica, Asdrúbal Oliveros, aseguró en una reciente entrevista que entre julio y agosto de 2023, los precios en divisas de los productos ofertados en el país cayeron, pero no los precios en bolívares.
Advirtió que en las condiciones actuales si suben los precios en dólares, los usuarios simplemente ya no comprarán.
Según los datos del Consejo Nacional del Comercio y los Servicios (Consecomercio), en los primeros cinco meses de 2023, las ventas comerciales cayeron entre 11 % y 68 % (dependiendo del sector) con respecto al mismo periodo de 2022.
Durante ese mismo año, el Producto Interno Bruto (PIB) venezolano creció un 15 %. Sin embargo, la desaceleración de la actividad comercial en 2023 está impactando en gran medida al sector de los emprendedores así como otros servicios más consolidados.
A pesar de las serias distorsiones macroeconómicas, el equipo de El Diario realizó un recorrido para conocer la opinión de los microempresarios de Caracas y constatar cuáles son los principales retos operativos que enfrentan para mantener activas las ventas en cada uno de sus negocios.
“Hay que ofrecer todas las opciones al cliente para que la venta pueda concretarse”
*Aníbal Méndez es el encargado de una tienda de difusores ambientales en el Centro Comercial Ciudad Tamanaco (CCCT) y explicó a El Diario que si bien las ventas han caído, sobre todo en los últimos tres meses, se mantienen a flote ofreciendo promociones puntuales.
Otra de las estrategias que aplican es ofrecer una variedad de opciones de pago que motive al cliente a comprar.
“Hay que ofrecer todas las opciones al cliente para que la venta pueda concretarse. Acá aceptamos tarjetas de billeteras digitales, Binance, Zelle, tarjetas internacionales, pago móvil. No podemos restringirnos porque de por sí nuestro nicho es muy pequeño”.
Asegura que hay días donde no sale ni una venta y eso tiene un efecto negativo en la posibilidad de contratar más personal.
“Cuando comenzó a dinamizarse el comercio en lo que se acabaron las restricciones de la pandemia tuvimos que contratar a tres vendedores porque había un mar de personas que venía y compraba. Todo eso cambió y ahora solo se cuenta con una empleada ya que las cuentas no dan”, explicó.
“Las promociones y los combos son lo que mantiene a flote mi negocio”
Para Esther Ramírez ha sido un trabajo de reinvención constante el mantener operativo su pequeño local de postres ubicado en Candelaria (centro de Caracas), ya que considera que el negocio de la repostería “a veces hay muchos clientes y otras no tanto”.
“Las promociones y los combos son lo que mantiene a flote mi negocio. Cuando veo que en el local no sale nada, ofrezco tortas por ración a todos mis contactos. Incluso, he llegado a ofrecer crédito a oficinas con la finalidad de tener la seguridad de la venta y el ingreso”, dijo a El Diario.
Aseguró que utiliza WhatsApp, Instagram y el boca a boca para que el producto salga y haya retorno de la inversión.
“Las ventas están en neutro, ni suben ni bajan”
El ajuste del precio del dólar es un factor que a juicio de Enrique Barrera afecta la capacidad de reposición de materia prima y condiciona las ventas en su negocio.
Barrera es el dueño de una papelería ubicada en la avenida Urdaneta, y en los últimos dos meses cree que el volumen de ventas está estancado.
“Las ventas están en neutro, ni suben ni bajan. Estamos como estancados. Hay productos que mantienen su ritmo de venta, pero hay otros que solo salen de la tienda si los rematas y ya eso es una pérdida”, explicó a El Diario.
Barrera espera que con el inicio del año escolar 2023-2024 y en la temporada decembrina haya una reactivación de su sector y una recuperación real de la economía nacional.
A su vez, indicó que es importante adecuar los impuestos nacionales y municipales de acuerdo al volumen de ventas.
“No es justo que el comerciante en ocasiones quede con ganancia cero porque tuvo un mes sin salida de productos, pero aún así deba pagar impuestos municipales y nacionales que no paran de ajustarse siempre hacia arriba. Queremos trabajar y generar empleo, pero debe haber condiciones para poder lograr eso”, sostuvo Barrera.
“La gente está comprando menos que antes”
La baja afluencia de clientes y los bajos salarios son, a juicio de Algimiro Altuve, las razones por las cuales su kiosko en la avenida Andrés Bello mantiene un ritmo de ventas más bajo de lo habitual.
“Yo tengo 25 años en este punto y en definitiva estos últimos tres meses han sido una montaña rusa. La gente está comprando menos que antes porque el salario rinde cada vez menos”, contó al equipo de El Diario.
Si bien, sus proveedores incluso le proporcionan los productos que comercializa a consignación las ventas salen muy lento en comparación a 2022.
Pidió al Ejecutivo que se debería aprobar un marco legal que proteja al microempresario sobre todo en momentos de dificultades económicas.
“Tenemos que pagar impuesto sobre la renta, derecho de frente, IVA, aseo, impuestos municipales, toda la documentación al día así no entre un bolívar o un dólar al negocio. Bajo esas condiciones los pocos que aún mantenemos la santamaría arriba somos verdaderos sobrevivientes”, concluyó.
(*) Los nombres fueron modificados por petición de los entrevistados
