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- La ansiedad en las relaciones es el miedo persistente e infundado de que tu pareja te abandonará, y puede llegar a ser paralizante. Ilustración de Celia Jacobs para The Washington Post
Esta es una traducción hecha por El Diario de la nota ‘Do you still love me?’ The challenges of relationship anxiety, original de The Washington Post.
La mayoría de nosotros tenemos un recipiente de amor que se llena con, entre otras cosas, palabras de afirmación, gestos de cariño físico y tiempo significativo con nuestros seres queridos. Sin embargo, a veces pareciera que el recipiente tiene un agujero. Esa es la realidad para las personas con ansiedad en las relaciones.
La ansiedad en las relaciones no está oficialmente reconocida como un trastorno o un síntoma de una afección de salud mental, y ha habido poca investigación sobre el tema.
Sin embargo, algunos de mis pacientes la padecen. La ansiedad en las relaciones afecta su salud mental y les dificulta establecer conexiones saludables. Pero se puede reducir con terapia, trabajo emocional y apoyo constructivo por parte de las parejas.
Miedo excesivo al rechazo
La ansiedad en las relaciones es el miedo persistente, generalizado y excesivo al rechazo o al abandono inesperado en una relación, incluso cuando históricamente ha sido estable y amorosa, según la investigación de los psicólogos Rainer Romero-Canyas y Geraldine Downey.
Irónicamente, esta ansiedad puede generar problemas que ponen en peligro la relación. Es un caso clásico de “creo lo que temo”.
Entonces, ¿por qué algunas personas desarrollan ansiedad en las relaciones mientras que otras se sienten seguras en sus parejas?
Una explicación se relaciona con el estilo de apego. Durante un periodo crítico en nuestras vidas, los primeros dos años, cuando desarrollamos vínculos, la separación de un cuidador principal podría afectar negativamente nuestro desarrollo emocional y social y provocar problemas de apego y ansiedad, según el trabajo del psicólogo John Bowlby.
Muchos investigadores han estudiado esta teoría para comprender cómo se manifiesta esta ansiedad en las relaciones. La psicóloga Mary Ainsworth notó patrones en los niños que se relacionan con sus “estilos de apego”.
El estilo de apego seguro es el más saludable y es el resultado de un niño que tiene un cuidador principal predecible, cálido y consistente que atiende sus necesidades físicas y emocionales.
Otro estilo de apego, sin embargo, se conoce como el apego ansioso ambivalente. Un niño con este estilo de apego tiene un cuidador principal inconsistente que oscila entre la calidez y la distancia, y se comporta de manera impredecible. El niño se siente inseguro y a menudo lucha por determinar cuándo y cómo obtendrá afecto y calidez de su cuidador.
Muchos niños con apego ansioso ambivalente crecen para convertirse en adultos dependientes, con un miedo al rechazo y al abandono, y una baja autoconfianza y autoestima. Suelen proyectar esas experiencias de la infancia temprana en sus parejas y les exigen que satisfagan las necesidades que no fueron atendidas por los cuidadores principales.
Las señales de la ansiedad en las relaciones
Estas son algunas señales de la ansiedad en las relaciones:
Esfuerzos frenéticos por evitar el abandono real o imaginado: aquellos que luchan con la ansiedad en las relaciones están tan preocupados por ser abandonados que intentan evitar el desacuerdo, la discrepancia o la creación de tensión en la relación. Por ejemplo, uno de mis pacientes dijo que participaba en actividades sexuales no deseadas a petición de su pareja para mantenerlo “suficientemente satisfecho como para que se quede”.
Necesidad recurrente y constante de reafirmar su seguridad: tienen una necesidad insaciable de seguridad y a menudo requieren afirmaciones verbales continuas de que son amados y de que la relación no terminará pronto. Por ejemplo, pueden preguntarle a su pareja: “¿Me segurías amando si aumentara de peso?”
Explosiones emocionales ante pequeñas dificultades: cuando la relación atraviesa un período difícil (sin importar cuán pequeño sea), tienen reacciones emocionales intensas desproporcionadas a la situación.
Dificultad para tomar decisiones: las personas con ansiedad en las relaciones carecen de autoconfianza, no de motivación. Tienen ideas y planes, pero a menudo necesitan consultarlos con sus parejas para asegurarse de que no serán rechazados si continúan adelante con sus proyectos.
Miedo a ser abandonados: por lo general, piensan demasiado sobre cómo sobrevivirían sin su pareja y qué harían si la relación terminara. Esta preocupación puede llevar a pensamientos acelerados, un síntoma cognitivo de la ansiedad.
Malinterpretación de los comentarios como un rechazo: tienden a ver la mayoría de los comentarios, incluso los positivos, como rechazo o como evidencia de que su pareja no está satisfecha con la relación. Por ejemplo, si su pareja dice: “Me gusta tu camisa hoy”, podrían responder con: “¿Significa que no te gusta cómo me visto normalmente?”.
La ansiedad en las relaciones puede ser paralizante
Es normal experimentar ansiedad en situaciones de alto estrés en una relación, como cuando una de las parejas quiere mudarse a una ciudad a tres horas de distancia de la familia y los amigos.
Sin embargo, cuando alguien tiene ansiedad en las relaciones, el principal desencadenante es el miedo al abandono, incluso cuando no hay evidencia visible de que la relación se dirige hacia el fracaso.
La ansiedad en las relaciones y el miedo al abandono que la subyace pueden ser paralizantes. Aquellos que luchan con ella desean cercanía, pero sus síntomas tienden a alejar a los demás, quienes los perciben como necesitados y cansones. Muchas veces, tienen conciencia de su comportamiento. Por lo general, pueden admitir: “Sé que soy mucho” o “Sé que te canso al pedir demasiado”.
Sin embargo, parecen tener poca o ninguna capacidad para detener su comportamiento. Cuanto más tiempo pasan sin recibir reafirmación, más desesperados se vuelven por una dosis de seguridad.
Cómo sanar la ansiedad en las relaciones
Sanar la ansiedad en las relaciones es difícil, pero puede lograrse con esfuerzo. Aquí hay algunos pasos que pueden explorar:
Deja de desahogarte con amigos: desahogarte puede sentirse catártico, pero no te ayudará porque tendemos a desahogarnos con personas afines. También puedes estar desahogándote con alguien que tiene preocupaciones similares y podrías transferir la ansiedad entre los dos.
Estúdiate a ti mismo: ¿cuándo es más intensa la ansiedad? ¿Es justo después de una discusión? ¿Cuando tu pareja está viajando por trabajo? ¿Cuando trabaja hasta tarde? Una vez que identifiques los patrones, puedes usar estrategias de afrontamiento para controlar tu ansiedad.
No conviertas a tu pareja en tu terapeuta: ellos no tienen una visión objetiva de ti, y su historia contigo los hace vulnerables a sesgos que una parte objetiva no tendría. Incluso si tu pareja es un terapeuta profesional, no es tu terapeuta.
Busca terapia profesional: el miedo al abandono y la ansiedad que produce han estado contigo desde tu infancia. Un profesional de confianza puede ayudarte a explorar tu trauma, procesar esas experiencias de la infancia temprana y aprender habilidades de afrontamiento para tu ansiedad.
Considera hacer una pausa en tu relación: solo hay una fórmula para una relación saludable: una persona saludable + una persona saludable. Es mucho mejor hacer una pausa en tu relación, obtener la ayuda que necesitas y luego volver a involucrarte.
Consejos para las parejas
Ser la pareja de alguien con ansiedad en las relaciones puede ser agotador. Las constantes solicitudes para hacer que tu pareja se sienta segura pueden ser desalentadoras y sofocantes. Es posible que te enfrentes a episodios de llanto y explosiones de ira relacionados con el miedo al abandono de tu pareja.
Muchas personas bienintencionadas piensan que si dejan de satisfacer la necesidad de seguridad de su pareja, esta dejará de pedirla. La retención de emociones y afecto, sin embargo, produce el efecto contrario. Disminuye la autoconfianza de la otra persona, que ya era baja al principio, y a menudo se interpreta como un comportamiento cruel y desinteresado. También te coloca en el papel de cuidador impredecible.
Sin embargo, debes apoyar a tu pareja para que busque terapia y pruebe otras formas de manejar su miedo al abandono y su ansiedad. Esto puede sentirse incómodo al principio, pero es la medida más saludable.
Traducido por José Silva
