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- Las autoridades detallaron que la mujer detenida había ocultado su embarazo y luego de dar a luz al neonato, lo introdujo en una bolsa plástica para deshacerse de él
Funcionarios de la División de Investigaciones de Delitos Contra la Mujer, Niño, Niña y Adolescente realizó la detención de una mujer de 23 años de edad por causarle la muerte a su bebé de 24 horas de nacido en Caracas.
Douglas Rico, director del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (CICPC), detalló que el neonato falleció la madrugada del 16 de noviembre de 2023, luego de que familiares lo ingresaran al Área De Neonatología del Hospital Materno Infantil Hugo Chávez Frías.
Rico precisó que las investigaciones permitieron determinar que la detenida, identificada con las iniciales I.P.B.A, había ocultado su embarazo y dio a luz al su bebé en el baño de su residencia. Tras cortar el cordón umbilical con una tijera, la mujer introdujo al neonato en una bolsa plástica para intentar deshacerse de él.
“Sin embargo, familiares de la mujer se percataron de lo ocurrido y lo llevaron al referido centro de salud, donde el bebé falleció. Al realizar la necropsia pertinente se determinó que la causa de muerte fue por traumatismo craneoencefálico severo y también presentaba una herida en la zona del cuello”, se lee en el reporte publicado por Rico en su cuenta de Instagram
La mujer quedó a la orden de la Fiscalía 104° del Ministerio Público.
Otros casos de infanticidios
El 14 de noviembre, Douglas Rico informó que funcionarios de la Coordinación de Delitos Contra las Personas en el estado Yaracuy detuvieron a una mujer por el infanticidio de su hija, de 26 días de nacida, en la parroquia Chivacoa, municipio Bruzual.
El director del cuerpo de seguridad indicó que las autoridades iniciaron la investigación luego de recibir la denuncia por parte de familiares de la infante, quienes al notar su desaparición optaron por trasladarse a la oficinas del CICPC.
De acuerdo con el reporte, la mujer de 30 años de edad salió de la residencia, colocó a la infante en un “tobo con agua”, y luego la abandonó en una zona boscosa. La policía científica utilizó drones y realizó rastreo en la zona, adyacente al embalse Cumaripa, con el propósito de ubicar el cuerpo de la bebé.
Tras conseguirlo, funcionarios del Servicio Nacional de Medicina y Ciencias Forenses realizaron la necropsia en la que se determinó que falleció por asfixia mecánica e inmersión.
Al ser verificada ante el Sistema de Investigación e Información Policial (Siipol) se comprobó que la mujer presenta registros policiales por el delito de trato cruel, por lo que, el caso quedó a la orden de la Fiscalía Octava del Ministerio Público del estado Yaracuy”, puntualizó.
En octubre, el CICPC logró esclarecer tres casos de infanticidio que se llevaron en cabo en los estados Sucre, Nueva Esparta y Bolívar.
Douglas Rico detalló que en Sucre fue detenida una mujer de 18 años de edad por el asesinato de una bebé de 1 día de nacida, caso en el cual tambien estuvo implicada la abuela de la infante. En Nueva Esparta, el cuerpo de seguridad realizó la detención de un hombre de 36 años de edad por asesinar a su hijastra de 3 meses de edad.
La tercera víctima fue una niña de 1 año de edad en el estado Bolívar. De acuerdo con su madre, quien fue detenida por el hecho, la bebé era golpeada frecuentemente por su padrastro., agresiones que le ocasionaron la muerte.
Falta de cifras oficiales
La agencia de noticias EFE reseñó que la falta de cifras sobre el número de niños y niñas asesinados ha obligado a organizaciones como el Centro Comunitario de Aprendizaje (Cecodap) a hacer su propia data.
Según esta organización no gubernamental (ONG), entre 2017 y 2019 se registraron 3.738 muertes violentas de niños y adolescentes, y otros 17 fallecieron en 2020 a manos de un familiar directo, mientras que entre enero y julio de 2021, contabilizó la muerte de 33 menores por “violencia doméstica”.
Carlos Trapani, coordinador de Cecodap, precisó que la escasa información es una de las dificultades para atender y prevenir agresiones a niños. Además, explicó que cuando no hay cifras oficiales, existe “debilidad institucional para dar respuesta”.
