Grupos sindicales en Latinoamérica marcharon el jueves 1° de mayo en varias ciudades para exigir salarios justos, así como la creación de puestos de trabajo para combatir la informalidad y políticas que garanticen la libertad de la organización sindical.
Las movilizaciones se registraron en Venezuela, Colombia, El Salvador, Panamá y Paraguay. En Caracas, manifestantes se concentraron con pancartas para reclamar un aumento salarial acorde a la situación del país y mejores condiciones de vida. “Queremos vivir con dignidad”, expresó un representante sindical del sector docente.
En Colombia, las marchas se desarrollaron de manera pacífica en Bogotá, Medellín y otras ciudades, donde además de exigir empleo formal y seguro, se pronunciaron contra y a favor de la reforma laboral.
En El Salvador y Panamá, los trabajadores denunciaron el aumento del empleo informal y la falta de garantías sindicales.
Paraguay también fue escenario de protestas, especialmente en Asunción, donde los gremios reclamaron respeto a los derechos laborales y denunciaron el acoso sindical.
En Ecuador, Perú y Costa Rica, personas también marcharon para exigir mejoras en las políticas laborales y respetar la edad para la jubilación de ese país.
En Chile denunciaron enfrentamientos entre manifestantes y funcionarios de la policía local. Fuerzas antidisturbios desplegaron cañones de agua para dispersar a la multitud en Santiago. Por otra parte, en Buenos Aires, Argentina, marcharon en contra del mandato del presidente Javier Milei.
El Día del Trabajador se conmemora cada 1° de mayo como una jornada de reivindicación de estos derechos conquistados a lo largo de la historia. En esta fecha, millones de personas alrededor del mundo se movilizan para exigir mejores condiciones laborales. También es un momento para reflexionar sobre los desafíos que enfrenta la clase trabajadora, como la precarización, el desempleo y la creciente informalidad en muchas regiones.
