El Vaticano anunció el jueves 8 de mayo la elección del nuevo papa, quien asumirá tras la muerte de Francisco. La Santa Sede informó que el cónclave concluyó con el consenso de los cardenales, dando inicio a una nueva etapa para la Iglesia católica.
La señal del humo blanco sobre la Capilla Sixtina que apareció a las 6:07 pm, hora de Roma (12:07 pm de Venezuela), marcó el momento en que los fieles reunidos en la plaza de San Pedro comprendieron que la Iglesia ya tenía sucesor. La tradicional fumata blanca, que simboliza la elección del nuevo pontífice, salió de la chimenea instalada especialmente para el proceso.
El cónclave se desarrolló a puerta cerrada con la participación de 133 cardenales electores menores de 80 años de edad y procedentes de al menos 71 países. Tras jurar confidencialidad, los prelados depositaron sus votos en urnas, en una ceremonia que sigue normas establecidas desde hace siglos. El nuevo papa fue elegido por mayoría de dos tercios, tal como exige el protocolo canónico.
Una gran ovación de miles de personas recibió la fumata blanca. Los congregados han prorrumpido en un grito generalizado y grandes aplausos, mientras los fieles y curiosos agitan banderas nacionales.
El cónclave comenzó el 7 de mayo
La elección del nuevo papa empezó el martes 7 de mayo con la convocatoria al cónclave, tras el funeral del pontífice emérito. Los cardenales electores ingresaron a la Capilla Sixtina luego de una misa en la Basílica de San Pedro, donde se ofició la tradicional Pro eligendo pontifice.
Durante el proceso, los cardenales realizaron cuatro votaciones diarias. Las papeletas se quemaban al finalizar cada ronda, y el humo negro aparecía cuando ningún candidato alcanzaba los 89 sufragios requeridos para lograr el consenso.
El anuncio se realizará desde el balcón central de la Basílica de San Pedro, ante miles de fieles congregados en la plaza. La multitud respondió con aplausos al escuchar la fórmula: habemus papam.
Tras haber sido proclamado oficialmente, el nuevo papa se retirará a la llamada Sala de las Lágrimas, un recinto contiguo a la Capilla Sixtina donde se vestirá por primera vez con la sotana blanca. Allí recibirá el saludo de los cardenales electores, quienes le expresarán su obediencia y respaldo antes de su aparición pública.
Luego se dirigirá al balcón central de la Basílica de San Pedro para impartir la bendición Urbi et Orbi, dirigida a Roma y al mundo. En los días siguientes, se celebrará la misa solemne de inicio de pontificado, con la presencia de delegaciones oficiales, líderes religiosos y miles de fieles. Con esa ceremonia comenzará formalmente su labor como jefe de la Iglesia católica.
Los honores al papa Francisco
El Vaticano ofició el 4 de mayo la última misa de las Novendiales, el periodo de nueve días de luto en memoria del papa Francisco, en la basílica de San Pedro, con la presencia de los cardenales de la Iglesia católica.
En la homilía, el cardenal francés Dominique Mamberti celebró la capacidad de adoración de Francisco, así como su vida pastoral, sus encuentros y los momentos de oración que la disciplina ignaciana le había inculcado.
“Nos quedarán en la memoria y en el corazón sus 126 paradas frente a la Salus Populi Romani (un icono atribuido a San Lucas que representa a la Virgen con el niño Jesús en sus brazos). Y ahora que descansa cerca de la querida imagen, lo confiamos con gratitud y confianza a la intercesión de la madre del Señor y nuestra madre”, señaló el cardenal durante la misa.
También recordó el esfuerzo que Francisco hizo en sus últimos días, asomándose a la basílica para la bendición Urbi et Orbi el Domingo de Resurrección y recorriendo la plaza, solo un día antes de morir.
“Todos hemos admirado el modo en que el papa Francisco, animado por el amor del Señor y de su gracia, permaneció fiel a su misión hasta el extremo del uso de sus fuerzas”, resaltó Mamberti.
El sumo pontífice murió a los 88 años de edad luego de presentar varias complicaciones de salud. El religioso, cuyo nombre de pila era Jorge Mario Bergoglio, quedará en la historia de la Iglesia católica como el primer papa de origen latinoamericano.
