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- La tenista ucraniana fue derrotada por la china Shuai Zhang, quien era una de las favoritas de la competencia. Aun así, su historia acaparó los reflectores, pues apenas una semana antes escapó junto a su hermana de la ciudad de Odesa, actualmente sitiada por tropas rusas
Envuelta con la bandera de Ucrania y con lágrimas en los ojos, Dayana Yastremska mira al público que la aplaude con emoción. La tenista de 21 años de edad jugó este domingo 6 de marzo de 2022 en la final del Torneo de Lyon, en Francia, contra la china Shuai Zhang. La ucraniana perdió, pero su participación representó todo un acto de resistencia, pues apenas una semana atrás tuvo que escapar de la amenaza de la invasión rusa a su país.
Aunque comenzó arriba en el primer set, su superada en el segundo y finalmente cayó tras una reñida última ronda. Zhao, quien era la octava favorita y número 65 del ránking mundial, obtuvo un marcador de 3-6, 6-3 y 6-4.
“Toda esta semana no he estado luchando por mí. Sino también por mi país”, declaró al terminar el encuentro. Afirmó que todo el dinero del premio por el segundo lugar se usará para ayudar a los ciudadanos ucranianos. “Son tan fuertes, con un espíritu tan increíble”, destacó.
Esta es la quinta final en un torneo para Yastremska, quien ocupa el puesto 128 del ránking mundial. Previamente llegó a los cuartos de final del Dubai Tennis Championships 2022, a mediados de febrero, y ganó Hong Kong en 2018 y en Hua Hin y Estrasburgo en 2019. Por su parte, es el tercer título de Zhang, luego de ganar también los abiertos de Guangzhou y Cantón.
Huyendo del fuego
La noche del 23 de febrero de 2022, el presidente de Rusia, Vladímir Putin, ordenó un ataque militar contra Ucrania. Horas después, durante la madrugada, las tropas rusas avanzaron desde diferentes frentes, entre ellos el Mar de Azov, donde Rusia ya ocupaba la península de Crimea. Desde allí se dirigieron varios ataques contra las principales ciudades portuarias ucranianas como Mariupol y Odesa, donde vive Yastremska.
Tras dos noches de incertidumbre durmiendo en una estación de metro por miedo a un posible bombardeo, su padre tomó una decisión, y sacó a Dayana del país junto a su hermana Ivanka, de 15 años de edad. Huyeron en un barco a Rumanía, a pocos kilómetros de Odesa en la frontera occidental. Lo hicieron solas, mientras el resto de su familia se quedó en Ucrania. Días después llegó a Francia, donde sin tiempo para procesar lo vivido, asistió a su cita en Lyon.
“Es difícil describir cómo me siento en estos momentos. Físicamente, me siento bien. Pero mentalmente estoy muy cansada. Debemos aguantar, solo queda un partido. Espero tener la misma energía para la final. Estoy muy metida en todo lo que está sucediendo en mi país. Leo noticias hasta altas horas de la madrugada, recibo muchos mensajes de conocidos que están allí. No diría que duermo muy bien. Siempre me despierto cansada. Los ucranianos son fuertes y lo están demostrando. Quizás yo también lo sea”, dijo a los medios de comunicación.
Un torneo difícil
El Open de Lyon comenzó el 27 de febrero de 2022, siendo uno de los torneos más importantes de Francia y un paso previa al torneo Roland Garrós, que se disputa entre mayo y junio. A Yastremska le tocó competir el 1° de marzo contra la rumana Ana Bogdan, en un partido que luego describió como uno de los más difíciles de su carrera. Fue un partido reñido, de tres horas, en el que logró salvar dos bolas y vencer en los últimos sets con un marcador de 3-6, 7-6 (7) y 7-6 (7).
Dos días después, se impuso en octavos de final a la española Cristina Bucsa, quien debutaba en la competición. Al día siguiente, avanzó a la semifinal tras vencer a la italiana Jasmine Paolini, quien era la quinta favorita. Horas antes su encuentro con Zhao, derrotó a la rumana Sorana Cirstea en la semifinal. También era una de las favoritas, y tras dos horas y media de partido, logró vencer en dos de tres sets, con una puntuación de 7-6 (5), 4-6 y 6-4.
Precisamente en el último set casi se desmoronan las aspiraciones de la ucraniana. Desaprovechó varias bolas y se mantenía abajo en el marcador 4-5. Sin embargo, en los últimos momentos consiguió la inspiración para remontar y avanzar hacia la gran final.
“Pensé que iba a perder, pero el apoyo del público fue muy importante. Me recordaron que tenía que pelear hasta el final y que no podía perder de esta manera. Eso me cambió la mentalidad por completo. Esa fue la clave del partido”, declaró. Señala que desde su llegada a Francia, uno de sus soportes es el inmenso respaldo de la audiencia, que asiste con mensajes de solidaridad con Ucrania y la animan en su idioma.
Ucrania en el corazón
En cada partido se hizo notar por entrar con la bandera de su país atada al cuello, y con su hermana Ivanka como única compañía desde las gradas. Igualmente, ha aprovechado cada ocasión para hablar sobre la invasión y apoyar a los soldados y ciudadanos que combaten.
“Para el pueblo ucraniano: son las personas más fuertes del mundo y tienen un espíritu de corazón loco. Son muy fuertes y estoy orgullosa de que estén luchando por nuestras vidas, por una Ucrania libre. Un gran agradecimiento a ellos, a la gente que está allí sobreviviendo y defendiendo realmente el país y cada ciudad, haciendo que Ucrania sea libre. Un gran respeto a nuestra gente. Son héroes”, afirmó tras vencer en cuartos de final.
Mientras Yastremska jugaba la final contra Zhao, en Odesa sus habitantes enfrentan un fuerte asedio de varios días. El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, afirmó que es posible que este domingo la ciudad sea bombardeada. Tampoco se descarta la posibilidad de un desembarco de tropas rusas a tierra. Con barricadas y armas, civiles y militares se preparan para resistir. Aunque no conquistó la copa, con su llegada a la final Yastremska logró la victoria de infundirles ánimos y dar una demostración en la cancha del temple ucraniano.
