Así vivió un migrante venezolano el terremoto de Birmania: “Tuve mucha suerte”

Cristóbal Parra relató que en Yangón, ciudad en la que vive, el sismo se sintió como un “vaivén sutil”, pese a estar cerca del lugar del epicentro, en Sagain
Andreína Barreto Jové
8 Min de lectura

Se adhiere a los criterios de

La suerte le jugó a favor. Así describió Cristóbal Parra*, migrante venezolano de 34 años de edad, su vivencia sobre el terremoto de magnitud 7,7 que sacudió el 28 de marzo varias en Birmania (República de la Unión de Myanmar), en el sureste asiático.

“Aún estoy impresionado con lo que pasó, tuve mucha suerte. Todos los que vivimos en Yangón (a 560 kilómetros de Sagaing, lugar donde ocurrió el epicentro) la tuvimos”, expresó Parra en una entrevista para El Diario.

El venezolano contó que el terremoto ocurrió aproximadamente a las 12:00 pm (hora local), por lo que la mayoría de las personas se encontraban en horario laboral, como era su caso; mientras que los niños y adolescentes estaban en las escuelas.

“Sentí que algo extraño estaba pasando. Sentí el movimiento en el suelo antes de que sonara la alarma sísmica y con mucha discreción le pedí a las personas que me acompañaban en la sala que se ubicaran debajo de sus mesas, para seguir el protocolo en caso de sismos”, contó.

Así vivió un migrante venezolano el terremoto de Birmania: “Tuve mucha suerte”
Terremoto Birmania | Foto: EFE

Varios segundos después, notó que en el suelo había un “vaivén sutil”, por lo que asumió que podía tratarse de un sismo menor. Él y sus compañeros esperaron que sonara la alarma sísmica, pero nunca sonó; por lo que aguardaron un tiempo prudente para reubicarse en un área descubierta.

“Al salir me di cuenta de que la gente tenía una mirada rara (desconcertante), porque lo que sentimos fue solo un movimiento de tierra y no la vibración destructiva de un terremoto, por eso nunca temí por mi vida”, aclaró.

En cuanto a la ciudad de Yangón, Parra contó que no sufrió destrozos significativos a pesar de que está ubicada cerca del epicentro del terremoto. 

Sin embargo, recibió mensajes de amigos que viven en Tailandia, país que colinda con Birmania y donde también se sintió el temblor. Sus allegados hicieron énfasis en consultarle sobre su estado de salud y en las condiciones en las que estaba.

“Recibí un mensaje de una amiga que reside en Tailandia preguntándome si estaba bien, eso no era casualidad, algo había pasado ahí también. Luego hubo un vacío en las comunicaciones”, agregó.

Parra confesó que, a varias semanas de que se registró el terremoto, continúa asombrado por lo “afortunado y suertudo” que fue, igual que la mayoría de las personas de Yangón, en comparación a las miles de personas afectadas.

“Yangón es una ciudad que parece atrapada en el tiempo, en el buen sentido de la palabra, porque cuenta con mucha arquitectura tradicional de madera que conserva edificios históricos; mientras que otras ciudades con rascacielos se vieron notablemente más afectadas. Así de grande es la suerte que tuvimos aquí”, relató.

Así vivió un migrante venezolano el terremoto de Birmania: “Tuve mucha suerte”
Terremoto Birmania | Foto: EFE

Birmania, su ventana a la oportunidad

Tras el terremoto, también recibió mensajes de sus familiares y amigos en Venezuela, lugar del que migró en abril de 2019. 

La decisión de irse del país la tomó hace cinco años, cuando ocurrió el apagón nacional de 2019. En abril de ese año, recibió una oferta de trabajo que consistía en mudarse a Birmania.

Leer más  #TeExplicamosElDía | Sábado 19 de abril

Parra contó que se crió en Caracas, dentro de una familia de migrantes, lo que, a su juicio, facilitó su logística para realizar una migración legal y planificada.

“Entendí que la situación que atravesaba Venezuela en ese entonces me impedía trabajar, me impedía existir como una persona sana y luego de recibir una oferta de trabajo decidí irme al otro lado del mundo”, explicó.

Describió que vivir en Yangón es un constante recordatorio de lo diferente que es ese lugar al sitio donde nació y vivió, debido a que se maneja un código moral, ético y de socialización distinto a países de occidente, en especial del Caribe, como es el caso de Venezuela.

“Es difícil describir la alteridad del mundo en el que yo vivo, es como si viviera en otro mundo. Aquí cada región tiene su lenguaje, religión, hasta la forma de vestir totalmente distinta a la del continente americano”, agregó.

Entre las diferencias culturales que destacó está la utilización de faldas o longyi para los hombres y la poca utilización que le dan a los pantalones. Sumado a esto, otra de las brechas culturales que mencionó fue el uso de maquillaje tradicional conocido como thanaka (se extrae de la corteza de un árbol) , usado por hombres y mujeres.

Explicó que la aplicación del maquillaje va más allá de un fin estético, lo utilizan como un cosmético que cubre la piel y la perfuma con toques de sándalo y cúrcuma.

“Del país de donde yo vengo (Venezuela) hay una pequeña diferencia gastronómica entre sus regiones, aquí es distinto. Todo cambia de un sitio a otro porque era un país con variedad de idiomas, etnias, moda, y región que no se podía describir”, concluyó.

Así vivió un migrante venezolano el terremoto de Birmania: “Tuve mucha suerte”
Terremoto Birmania | Foto: EFE

Situación actual en Birmania

A varios días del terremoto de magnitud 7,7 que sacudió a la región centro-norte de Birmania, las autoridades de ese país han contabilizado al menos 3.514 muertos, 4.809 heridos y más de 210 permanecen desaparecidas, para el lunes 7 de abril. 

El temblor se registró el viernes 28 de marzo en la región de Sagaing, a 10 kilómetros de profundidad, de acuerdo con el Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS, por sus siglas en inglés), y con el epicentro entre las ciudades de Sagaing y Mandalay, a 17 kilómetros de ambas.

El USGS calificó al sismo como uno de los más graves de las últimas décadas en Birmania. Además, el movimiento telúrico también afectó a Tailandia, donde causó decenas de muertes, la mayoría a causa del derrumbe de un edificio en construcción.

Sumado a esto, la Organización Mundial de la Salud (OMS) alertó el 4 de abril del alto riesgo de brotes de cólera en Birmania debido al daño en el sistema de saneamiento y la falta de acceso a agua potable por el terremoto.

“En este país hay un riesgo muy alto de cólera”, advirtió Elene Vuolo, jefa adjunta de la OMS a la agencia de noticias EFE.

El cólera, una enfermedad bacteriana que se manifiesta por diarreas aguas y deshidratación, se produce debido a sistemas de saneamiento deficientes y a la escasez de agua potable.

*El nombre del entrevistado fue cambiado para preservar su seguridad

Andreína Barreto Jové
8 Min de lectura