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- Theodore John Kaczynski, de 81 años de edad, fue encontrado sin vida en su celda, en una prisión federal de Carolina del Norte. Durante 20 años sembró terror al enviar cartas bomba a empresas y personalidades por su rechazo al avance tecnológico
La Oficina Federal de Prisiones de Estados Unidos confirmó el 10 de junio la muerte de Theodore John Kaczynski, el famoso terrorista conocido como el Unabomber, a los 81 años de edad. Aunque no se reveló la causa de su muerte, desde hace años su estado de salud era delicado, razón por la que en 2021 fue trasladado a una prisión especial en Carolina de Norte.
Antes de eso, estuvo en una cárcel de máxima seguridad en Colorado, donde cumplía ocho cadenas perpetuas sin posibilidad de libertad condicional.
Entre las décadas de los setenta y noventa, el Unabomber fue el sinónimo de terrorismo para un Estados Unidos que aún estaba lejos de vivir los atentados contra las Torres Gemelas. Él fue la razón por la que se intensificaron los protocolos de seguridad en los servicios de correo, pues durante su actividad envió 16 paquetes bomba a empresas y personas, dejando 3 muertos y 23 heridos.
Una mente brillante
Kaczynski nació el 22 de mayo de 1942 en la ciudad de Chicago, en el seno de una familia polaco-estadounidense. Cuando estaba en primaria, sus maestros le hicieron un test de coeficiente intelectual en el que obtuvo 167, siendo considerado como superdotado. En dos oportunidades fue saltado de grado, lo que hizo que sufriera bullying por parte de sus compañeros, varios años mayores que él. Esto lo convirtió en un niño solitario y retraído.
A los 16 años de edad ingresó a la Universidad de Harvard, donde estudió Matemáticas. Allí conoció al profesor Henry Murray, quien trabajaba en diferentes experimentos para la Agencia Central de Inteligencia (CIA), entre ellos el proyecto MK Ultra. Kaczynski se unió como voluntario junto a otros estudiantes a una prueba en la que medía la respuesta humana a altos niveles de estrés. Allí fue amarrado a una silla e interrogado con reflectores en su cara y otros estímulos incómodos, además de recibir ataques psicológicos prolongados. Luego debió ver y escuchar todas las grabaciones de su prueba.
Algunas versiones apuntan a que su comportamiento anterior pudo ser causado por el trauma que le generó la prueba de Murray. Esto porque las evaluaciones previas que se le realizaron antes de unirse al experimento sugerían que aún era mentalmente estable.
Retirado de la sociedad
Kaczynski se graduó en Harvard a los 20 años de edad y realizó un doctorado en Matemáticas en la Universidad de Michigan. Publicó un par de artículos científicos y trabajó como profesor en la Universidad de California entre 1967 y 1969. Ese año, sin motivo aparente, renunció y regresó a la casa de sus padres. Luego se mudó a una montaña en el estado de Montana, donde construyó él mismo una cabaña sin electricidad ni plomería. Empezó a vivir una vida de ermitaño manteniéndose de la caza y recolección.
Desarrolló pronto un pensamiento muy crítico de la sociedad moderna y al capitalismo. Abrazó el neoludismo, un movimiento filosófico que se oponía al desarrollo tecnológico y científico. Afirmaba que la revolución industrial había sido una condena para la Humanidad, pues la alejaba de su esencia natural, además de destruir al medio ambiente.
Señalaba que producto de esta sociedad artificial, los seres humanos vivían en un estado “sobresocializado”. Allí, manteniendo las apariencias para encajar con lo socialmente aceptado, se reprimían los impulsos naturales humanos. Mucho de este este pensamiento quedó plasmado en su manifesto La sociedad industrial y su futuro, el cual se publicó en 1995 en los diarios The New York Times y The Washington Post luego de prometer que abandonaría el terrorismo si lo hacían.
Reino de terror
Curiosamente, a pesar de sus creencias, Kaczynski debió emplear para su causa varios conocimientos técnicos, así como el dinero que recibía de su familia o haciendo trabajos ocasionales. En 1978 armó su primera carta bomba, la cual le envió al profesor Buckley Crist, de la Universidad de Illinois. En su lugar, un vigilante del campus abrió el sobre cuando explotó. Afortunadamente no tenía potencial mortal, aunque debió ser operado de la mano.
En el año siguiente envió más cartas bomba a diferentes agentes de aerolíneas, incluyendo un paquete al vuelo 444 de American Airlines. El avión viajaba de Chicago a Washington DC cuando la bomba comenzó a soltar humo, por lo que hizo un aterrizaje de emergencia y fue neutralizada por escuadrones antiexplosivos.
Estos dos atentados fueron los que le dieron su apodo. Unabomber venía del acrónimo de University and Airline Bomber (bombardero universitario y aéreo). El 11 de diciembre de 1985, envió un paquete a la empresa de servicios informáticos Rustech Computer Store, en Sacramento, California. El dueño del local, Hugh Scrutton, abrió el paquete en el estacionamiento y murió por la explosión. Fue su primera víctima.
Siguió enviando sus cartas bomba a empresas, universidades y aerolíneas con daños menores, pero en 1994 cometió su segundo asesinato. Se trató de Thomas Mosser, vicepresidente de la empresa de publicidad Young & Rubicam, en Nueva York. Abrió el paquete en la cocina de su casa, la cual quedó destruida.
Un año después mató a Gilbert Murray, un agrónomo y presidente de la Asociación Forestal de California. Meses después envió una carta a The New York Times, pero en lugar de explosivos, traía una propuesta: si el diario y The Washington Post publicaban su manifesto, dejaría de cometer atentados.
Cacería
Durante décadas, la identidad del Unabomber fue casi una obsesión para el Buró Federal de Investigaciones (FBI). Sus bombas estaban fabricadas con chatarra y materiales tan comunes que resultaban difíciles de rastrear, y el sistema de correo de la época no facilitaba el proceso para saber desde dónde se enviaban los paquetes. Por años resultó un personaje tan misterioso que alimentó múltiples leyendas urbanas e imitadores.
En 1980, el reconocido investigador John Douglas elaboró un perfil psicológico del terrorista. El experto de la Unidad de Análisis del Comportamiento del FBI tenía un historial exitoso revelando rasgos clave de la personalidad de diferentes criminales a partir de sus acciones y pequeños detalles. Con esto, determinó que el Unabomber debía ser una persona con una inteligencia alta y conocimientos en ciencias. Incluso atinó que se trataba de un neoludita con tintes de ecoterrorismo. Sin embargo, el FBI descartó su aporte, pues privilegiaba más la evidencia física.
Precisamente su manifesto fue el causante de su caída. Un hermano de Kaczynski leyó el texto y de inmediato reconoció su letra. También la frase “No puedes comerte la tarta y seguir teniéndola”, con la que iniciaba y que recordó que era una de sus favoritas. Con el apoyo de criminalista James R. Fitzgerald determinaron que el manifiesto y las cartas habían sido escritas por Kaczynski, por lo que fue arrestado el 3 de abril de 1996.
En su cabaña encontraron los materiales y herramientas que usaba para fabricar las bombas, así como los diarios en los que planificaba cada atentado, además de reflexionar sobre sus ideas antimodernidad. Kaczynski se declaró culpable para eludir la pena de muerte y fue condenado dos años después. Pasó el resto de su vida en prisión intercambiando cartas con algunos seguidores, quienes lo convirtieron en un símbolo del neoludismo y la lucha contra las grandes empresas.
