Email
- El funcionario era el jefe de la Oficina de Seguridad Anticipativa de la Seguridad Presidencial. Encontraron el cuerpo dentro de un vehículo en Teusaquillo, en Bogotá. Foto principal: Revista Semana
La tarde del viernes 9 de junio encontraron muerto a uno de los policías investigados por el escándalo de interceptaciones telefónicas en Colombia, el teniente coronel Óscar Dávila. El informe preliminar, de acuerdo con la Revista Semana, indica que el cuerpo fue hallado dentro de un vehículo en Teusaquillo, Bogotá.
Dávila era el encargado de la oficina de anticipativas, justamente donde se realizó la prueba del polígrafo a Marelbys Meza, la exniñera de la casa de la exjefa del gabinete presidencial, Laura Sarabia. Días antes, el coronel había sido notificado para que declarara ante la Procuraduría General por las interceptaciones ilegales a la línea telefónica de Meza.
La investigación preliminar quiere verificar cómo es que el número de la exniñera apareció en una investigación contra alias Siopas, uno de los jefes del Clan del Golfo.
De acuerdo con la información que recibió la Revista Semana, el coronel Óscar Dávila se movilizaba con su escolta y se estacionó en el sitio donde lo encontraron muerto. Supuestamente le dijo a su hombre de seguridad que le comprara una botella de agua y cuando este regresó lo encontró con un disparo de bala.
Declaraciones de Gustavo Petro sobre los hechos
Gustavo Petro, presidente de Colombia, se pronunció en su cuenta de Twitter sobre este hecho y afirmó que Óscar Dávila murió por suicidio. De acuerdo con el mandatario, Dávila usó la pistola que su guardaespaldas dejó dentro del vehículo y se disparó en la cien.
Asimismo, informó que no hubo más disparos y que no es cierto que encontraron el cuerpo con dos impactos de bala. Petro agregó que Dávila deja a dos niños menores de edad y le envió condolencias a su familia.
“Su labor en presidencia era asegurar los sitios donde yo tendría que ir en cumplimiento de mis agendas”, enfatizó Petro.
Escándalo por interceptaciones de llamadas
Tanto el exembajador de Colombia en Venezuela Armando Benedetti como Laura Sarabia son investigados por presuntamente estar involucrados en un escándalo de interceptaciones telefónicas y posible abuso de poder. Petro anunció el viernes 2 de junio que mientras avanzan las investigaciones ambos debían separarse de sus cargos.
El caso se originó con el presunto hurto de un maletín de dinero que estaba en casa de Sarabia. La persona acusada por este hurto fue Marelbys Meza, exniñera del hijo de Sarabia.
Meza denunció que la obligaron a ir hasta una dependencia presidencial donde fue interrogada y sometida a pruebas de polígrafo sin una orden judicial. También se reveló que la Policía interceptó ilegalmente su teléfono, usando como fachada una operación contra la banda criminal del Clan del Golfo.
La niñera había trabajado anteriormente para Benedetti, pero la expareja del político había acusado a Meza de robarse una cartuchera con 5 millones de pesos. Sin embargo, la acusación fue desestimada porque fue sometida al polígrafo y no mostró señales de culpabilidad.
Pese a esa acusación previa, Benedetti recomendó a Meza para que cuidara al hijo recién nacido de Sarabia.
