Email
- Aunque pueda parecer desagradable, la infección por ese tipo de hongos suele ser manejable, pero solo con el tratamiento adecuado. Foto principal: Joyce Lee para The New York Times
Esta es una traducción hecha por El Diario de la nota How Do I Get Rid of Toenail Fungus?, original de The New York Times.
Pregunta: Parece que tengo hongos debajo de las uñas de los pies, ¿cómo puedo saber si es eso? ¿Este tipo de hongos desaparece por sí solo?
El color amarillento, la fragilidad y el aspecto poco común de las uñas de los pies pueden ser señales de que tienes una infección fúngica, denominada onicomicosis. Los expertos afirman que estas infecciones no desaparecen por sí solas y pueden propagarse fácilmente de persona a persona si no se comienza un tratamiento.
“Los hongos tienden a ser voraces”, advirtió Boni Elewski, presidenta del departamento de dermatología de la Universidad de Alabama en Birmingham. Si lo contraes por contacto cercano con alguien infectado o al caminar descalzo en un vestuario, por ejemplo, puede meterse debajo de tu uña del pie y propagarse hacia la una en sí, afirmó. El uso de zapatos húmedos y sudorosos puede fomentar el crecimiento del hongo.
Se estima que los hongos en las uñas de los pies afectan a 1 de cada 10 personas en todo el mundo y se vuelven más comunes con la edad, afectando a más de la mitad de las personas mayores de 70 años. Quienes tienen diabetes o sistemas inmunológicos debilitados también son susceptibles, según detalla Shari Lipner, dermatóloga del Weill Cornell Medical Center en la ciudad de Nueva York.
¿Se trata de un hongo realmente?
Los expertos afirman que el primer paso para recuperar una uña del pie que estaba sana es confirmar que efectivamente tienes hongos. Algunos signos reveladores incluyen uñas engrosadas, descoloridas, agrietadas, deformes y ocasionalmente que duelen y tienen mal olor.
Pero solo cerca de la mitad de las uñas de aspecto anormal se deben a hongos, dijo la doctora Elewski. El trauma en las uñas de los pies, ya sea por lesiones únicas o actividad repetitiva usando zapatos demasiado ajustados, también puede causar uñas descoloridas o gruesas. “Echar un simple vistazo no es suficiente para estar seguros de que se trata de onicomicosis”, afirmó.
Según la doctora Lipner, los médicos suelen confirmar los hongos en las uñas de los pies examinando una muestra de estas bajo un microscopio.
También pueden realizar una prueba de PCR o un cultivo fúngico para determinar qué especie de hongo infectó la uña. Pero estas pruebas no siempre son necesarias, porque la mayoría de las personas tienen un tipo de hongo llamado Trichophyton rubrum, explicó Lipner. Sin embargo, si el tratamiento no está funcionando, es posible que tu dermatólogo quiera obtener más información sobre el organismo que vive bajo tu uña.
Los antifúngicos recetados suelen solucionar el problema, pero es una mala idea tomarlos sin confirmar primero que en efecto tienes el hongo, según la doctora Elewski. El uso innecesario de antifúngicos puede hacer que estos medicamentos sean menos efectivos con el tiempo, contribuyendo a un problema creciente llamado resistencia a los antifúngicos.
¿Cuáles antifúngicos funcionan mejor?
Aunque algunas farmacias tienen secciones enteras dedicadas a ungüentos antihongos de venta libre, Elewski señaló que lo mejor que puede hacer un tratamiento sin receta o un remedio casero es mejorar la apariencia de tu uña.
Si realmente quieres eliminar el hongo, “la única opción es un antifúngico recetado”, afirmó Antonella Tosti, una dermatóloga que trata trastornos de las uñas en la Universidad de Miami Miller School of Medicine. Existen antifúngicos tópicos, que incluyen cremas, ungüentos o soluciones tipo suero, y antifúngicos orales, es decir, pastillas.
Los antifúngicos tópicos pueden ser útiles para casos más leves que afectan solo una o dos uñas de los pies, según Lipner. Pero una desventaja es que es posible que debas aplicar el medicamento durante aproximadamente un año antes de que el hongo desaparezca por completo.
Si hay hongos bajo varias uñas o si las uñas de los pies están muy gruesas, Lipner dijo que generalmente opta por las recetas orales. Pastillas como terbinafina o itraconazol pueden eliminar el hongo de las uñas de los pies en aproximadamente tres meses. Incluso después de que las pastillas orales eliminen el hongo, Lipner detalló que la uña del pie puede verse rara durante un año mientras crece una nueva uña sin infección.
Mientras tanto, algunos remedios de venta en farmacias podrían mejorar la apariencia de la uña al calmar la piel circundante o adelgazar la uña, comentó Elewski. También suele ser aceptable usar esmalte de uñas en la uña infectada mientras tomas antifúngicos orales, dijo Lipner. Pero no lo hagas si estás usando medicamentos tópicos.
Ya sea que te receten un antifúngico tópico u oral, Tosti dijo que es importante seguir el tratamiento todos los días. “Esto no es algo que puedas curar en unas pocas semanas”, dijo. “La adherencia es muy importante”.
Evita reinfecciones
Eliminar con éxito el hongo de las uñas de los pies no significa que no puedas volver a contraerlo, advierten los expertos. De hecho, se estima que el 25 % de las personas sufre reinfecciones.
Lipner recomendó lavar a fondo cualquier media u otra prenda que haya estado en contacto con tu primera infección y desechar o rociar con desinfectante los zapatos que usabas con frecuencia cuando tenías hongos en las uñas de los pies.
Para prevenir el hongo de las uñas de los pies en general, mantén tus uñas recortadas y evita caminar descalzo en vestuarios de gimnasios o alrededor de piscinas, recomendó Lipner. Si sudas con frecuencia en zapatos cerrados, usa calcetines que absorban la humedad y cámbiate a zapatos secos siempre que puedas.
Si la piel de tu pie se reseca, te da picazón, se vuelve escamosa o se inflama, podrías tener pie de atleta, que es causado por el mismo hongo que puede propagarse a tus uñas de los pies. Por lo tanto, es importante recibir tratamiento de inmediato. A diferencia del hongo de las uñas de los pies, algunos medicamentos de venta libre pueden ayudar con el pie de atleta.
“Pero no te automediques sin confirmar con un dermatólogo que estás tratando lo correcto”, advirtió Lipner.
Traducido por José Silva.
