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- Una psicóloga clínica explicó que el paciente puede sentirse tentado a recibir respuestas rápidas a un problema emocional con inteligencia artificial, aunque esa retroalimentación no necesariamente implique una solución
La inteligencia artificial (IA) se está convirtiendo en una herramienta de apoyo en distintos campos de estudios, pero también funciona como respaldo en tareas cotidianas. Un ejemplo de ello son los chatbots entrenados como ChatGPT que son capaces de interactuar con respuestas complejas a largas conversaciones.
Esta herramienta recibe comandos también conocidos como prompt, en los que el usuario puede personalizar con palabras clave el resultado que necesita en texto. Ante las facilidades que brinda esta herramienta puede existir la tentación de usarla para reemplazar la función de especialistas como médicos y terapeutas.
A la pregunta de si es recomendable usar ChatGPT como terapeuta virtual, tanto el chatbot como la psicóloga clínica Elizabeth Leiva coinciden en que la herramienta no puede reemplazar las funciones de un profesional calificado en temas de salud mental.
¿Por qué es importante la terapia con un profesional?
Leiva explicó que la terapia es una herramienta para abordar momentos de crisis, pero también puede utilizarse de forma preventiva o simplemente para mejorar aspectos emocionales en la cotidianidad.
La especialista comentó que la psicoterapia ha sido históricamente vista con prejuicios. Sin embargo, asegura que con la pandemia de covid-19 muchas personas dejaron de lado ese estigma y buscaron apoyo en esa área.
El uso de la tecnología permite que las consultas se puedan hacer de forma virtual a través de una videollamada. Leiva comentó que como paciente tiene más de 8 años haciendo terapia virtual y como especialista también atiende a varias personas bajo esta modalidad. Aclaró que la única excepción que hace es cuando debe atender a adolescentes con trastorno de déficit de atención (TDA), porque con ellos es más complejo seguir el ritmo de la terapia a distancia.
“No hay gran diferencia entre una y otra, realmente depende de si la persona prefiere ir a un lugar para sentir que la terapia funciona mejor, pero en realidad no significa que la presencial sea mejor que la virtual. En general ambas son efectivas”, añadió.
Inteligencia artificial como terapia virtual
ChatGPT recibe sin inconveniente el prompt de actuar como terapeuta profesional, ofreciendo una respuesta similar a esta: “¡Claro! Estoy aquí para ayudarte como terapeuta virtual. ¿Hay algún problema o preocupación en particular que te gustaría hablar o abordar? Estoy aquí para escucharte y ofrecerte mi apoyo y orientación”.
En principio no advierte cuáles son sus límites en este campo, pero el chatbot ofrecerá a lo largo de la conversación recomendaciones para calmar malestares o inquietudes emocionales de bajo impacto que generalmente funcionan y están recomendadas por expertos en el área. Algunas de esas sugerencias son hacer ejercicio físico, meditación, escribir los sentimientos, hacer una actividad que cause placer o practicar el agradecimiento.
La psicóloga explicó que el paciente puede sentirse tentado a reemplazar la terapia con la IA, debido a que estas herramientas siempre ofrecen respuestas complejas en corto tiempo, aunque no necesariamente estas respuestas implican soluciones.
La experta aclaró que en una consulta de salud mental ningún proceso da soluciones inmediatas. Incluso en la psicoterapia breve, que consta en promedio de seis sesiones, puede ser necesaria una extensión sugerida por el paciente o el especialista.
“El tiempo de la psicoterapia es subjetivo, porque depende de la persona. En la psicoterapia breve pueden aparecer otros problemas distintos al que motivó la consulta y para eso se programan más sesiones. También se da el caso en el que el paciente siente que aún necesita conversar más y pide otras citas, así como hay quienes deciden hacer de la terapia parte de su estilo de vida y su autocuidado”, detalló.
Los límites de ChatGPT
El chatbot admite que no puede reemplazar la terapia con un profesional, pero que está diseñado para brindar información y apoyo en general. Además, insiste en que su recomendación es acudir a un especialista capacitado en psicología o psiquiatría dependiendo del caso.
“Un terapeuta profesional puede proporcionar un enfoque personalizado y específico para abordar tus preocupaciones, y puede ayudarte a desarrollar habilidades efectivas para enfrentar y superar los desafíos. Además, un terapeuta puede brindarte un ambiente seguro y confidencial para explorar tus pensamientos y sentimientos”, indica ChatGPT.
Esta IA también puede brindar información que puede considerarse como primeros auxilios psicológicos en medio de una situación de crisis. Si se le insiste a ChatGPT dar esos primeros auxilios, también alerta que estas técnicas no pueden sustituir la atención médica o de salud mental en problemas emocionales más graves.
Si el usuario aún así intenta sustituir la terapia con el chatbot, la herramienta tiene la capacidad de analizar patrones de lenguaje y proporcionar información general sobre posibles señales de alerta de depresión o ansiedad en una conversación; aunque esto no significa que sea infalible, pues depende de lo que escriba la persona y hay signos de estos trastornos que solo son visibles al ojo humano.
Leiva destacó que una pregunta clave que suelen hacer los especialistas cuando ven algo que les preocupa en el paciente como un posible trastorno de ansiedad o depresivo es si la persona ha pensado en dejar de existir.
“Algunos dicen que sí y sabes que allí pasa algo, otros dicen que no, pero en el tono o la forma en la que responden se puede ver si la persona no está siendo sincera o no desea admitirlo”, explicó.
Sobre los riesgos
Al preguntarle si existe algún riesgo por sustituir a la terapia, el chatbot dice que en términos generales no hay riesgo por conversar con un modelo de lenguaje, pero insiste en que el apoyo proporcionado no puede reemplazar la atención médica o psicológica profesional.
La especialista considera que el hecho de limitarse a herramientas digitales sin buscar ayuda profesional sí puede representar algún tipo de riesgo. Señaló que si las respuestas que da la IA no le ayudan al paciente a sentirse mejor esa persona podría pensar que no tiene una solución a su problema.
“Hay un momento de pseudoterapias que han aparecido y que pueden tener este mismo problema. Esto ocurre con las personas que siguen a influencers no calificados que dan recomendaciones de salud mental. Un ejemplo son las personas súper positivas que dicen ‘el día es bello’, ‘debes sonreír’, pero si el paciente no siente ganas de sonreír ese discurso le puede hacer sentir peor y pensar que quien está mal es él”, mencionó.
Leiva precisó que las herramientas digitales, la inteligencia artificial y las redes sociales dan recomendaciones dirigidas a un público amplio, pero la psicoterapia siempre debe ser personalizada para obtener hallazgos y resultados concretos en cada paciente.
Pese a esto, la psicóloga cree que no se debe prescindir totalmente de la inteligencia artificial en las áreas de salud mental. Agregó que esta herramienta puede ayudar a los especialistas a mejorar sus campos de estudio.
“Creo que cualquier profesional puede complementar su carrera con eso. La inteligencia artificial te puede dar una serie de datos que quizás no tienes y te sirven para una investigación o para el uso diario, pero no debería ser exclusivamente su única herramienta”, concluyó.
