• Los menores de edad que se encontraban entre los retenidos quedaron bajo resguardo de la Procuraduría de Protección de los Derechos de los Niños en Ciudad de México

El Instituto Nacional de Migración (INM) mexicano informó el 13 de noviembre que retuvieron a 246 migrantes de Centroamérica, Venezuela y Haití que estaban en la vía pública en el norte de Ciudad de México.

De los migrantes, 192 son adultos y 54 son niños y adolescentes, que estaban en aceras, parques y avenidas de la Central de Autobuses del Norte, detalló en un comunicado el INM.

“A solicitud del gobierno de la Ciudad de México y de la Alcaldía Gustavo A. Madero, el Instituto Nacional de Migración (INM) rescató en acciones de verificación migratoria, llevadas a cabo entre el viernes 10 y el domingo 12 de noviembre, a 246 personas”, reportó el organismo.

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Las autoridades trasladaron a los adultos a estaciones migratorias para iniciar el procedimiento administrativo correspondiente.

Los migrantes menores de edad quedaron bajo la tutela de la Procuraduría de Protección de Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes de la Ciudad de México, así como del Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF), hasta que los adultos resuelvan su estancia en el país.

“La actuación de la autoridad migratoria fue en todo momento apegada a las disposiciones de la Ley de Migración, su reglamento, así como en atención y salvaguarda del interés superior de la niñez”, aseguró el INM.

Miles de venezolanos permanecen en la frontera norte de México por miedo a ser deportados de EE UU
EFE/Luis Torres

Ola de migrantes sin precedentes

La Organización Internacional para las Migraciones (OIM) advirtió que la región afronta un flujo migratorio sin precedentes, que a inicios de noviembre registró un incremento anual de más del 60 % de la migración por vías irregulares que atraviesa territorio mexicano en lo que va de año.

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Los campamentos de miles de migrantes en Ciudad Juárez, en la frontera norte de México, desaparecieron tras la oleada migratoria de los últimos meses, pero activistas de la zona acusan al gobierno mexicano de violar los derechos humanos de los extranjeros con sus operativos, que incluyen bajarlos de los trenes y perseguirlos.

El borde del río Bravo, que en los últimos seis meses había sido el lugar donde más de 1.000 migrantes habían instalado campamentos, ahora se encuentra vacío.

Patrullas del INM de México circulan 24 horas toda la semana para evitar que los migrantes se acerquen al límite con Estados Unidos en un operativo que incluye bajarlos del tren conocido como La Bestia antes de que puedan llegar a esta frontera.

Autoridades mexicanas retuvieron a 246 migrantes que estaban en la vía pública 
EFE/Luis Torres

Denuncias de activistas en México

Activistas denunciaron que estas acciones de las autoridades atentan contra los derechos humanos de las personas en tránsito.

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“Es impresionante ver cómo vienen lastimados, sin acceso a las áreas médicas, en esas zonas donde son bajados del tren no hay dónde puedan ser atendidos y muchos de sus derechos están siendo aplastados”, señaló Rosa Mani Arias, representante de la organización promigrantes Abara, en una entrevista con la agencia de noticias EFE.

La activista agregó que se han encontrado a mujeres y niños lastimados, que necesitan y requieren medicamentos a la brevedad.

Francisco Garduño, titular del INM, justificó los operativos en declaraciones a medios locales al asegurar que con estas acciones se protege la integridad de los indocumentados y se ha logrado detener la crisis migratoria.

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Política migratoria

Garduño explicó que la política migratoria consiste en bajar a los migrantes del tren y evitar que acampen en el río, para ponerlos a salvo de la delincuencia.

“Afortunadamente el operativo que ustedes ya conocen en el ferrocarril que estaban tripulando La Bestia, hemos estado atendiendo los patios donde se bajaban”, dijo a medios locales.

Agregó que la presencia de migrantes en Juárez ha bajado mucho en estos últimos días gracias a estos operativos y a la actuación del instituto en el sur del país. Además, indicó que mantendrán un albergue cercano al Ayuntamiento donde tienen capacidad para 500 personas, dando alimentos y servicio médico, para atender a los que sigan llegando.

Con información de EFE

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