- La propuesta plantea que el área de Phoenix, Arizona, sea el punto de concentración donde las 30 franquicias disputen todos los compromisos de la campaña 2020, de acuerdo con ESPN
En medio de la pandemia del coronavirus de Wuhan, la Major League Baseball (MLB) y la Asociación de Jugadores (MLBPA) estudian inaugurar la campaña 2020 la primera semana de mayo, con el objetivo de que las 30 franquicias disputen los juegos en un mismo estado y así intentar facilitar los problemas logísticos.
La propuesta sería avalada por funcionarios federales de salud pública de alto nivel, y plantea que todos los compromisos se lleven a cabo en estadios del área de Phoenix, incluyendo el Chase Field de los Diamondbacks de Arizona y diez bases primaverales. Los juegos se celebrarían sin público y al aire libre, reportó la cadena ESPN.
En este sentido, se organizaría una pretemporada de dos a tres semanas para que los jugadores se pongan a tono y así dar pie a la campaña regular.
Asimismo, se implementarían protocolos de seguridad con los peloteros, gerentes, técnicos y árbitros, quienes permanecerían aislados en hoteles de Arizona y solo se les permitiría desplazarse hacia los estadios, de manera que se evite el contagio del virus.
De concretarse, a los Nacionales Washington les tocaría defender su corona de Serie Mundial en terrenos ubicados hacia el otro extremo de EE UU. En tanto, figuras venezolanas como José Altuve, Ronald Acuña Jr, Gleyber Torres y Miguel Cabrera se verían en la obligación de jugar lejos de sus seres queridos durante meses.

Rob Manfred, comisionado de las Grandes Ligas, afirmó en un comunicado que el organismo ha contemplado varias propuestas para iniciar el circuito ante la situación de contingencia.
No obstante, todavía no ha determinado jugar en una sede en particular ni desarrollar un plan en específico. Tampoco ha recibido ni solicitado el visto bueno de los oficiales del gobierno ni de la salud pública.

Restricciones
Para que esta propuesta se ejecute debería ampliarse de manera significativa el número de pruebas del Covid-19 en Estados Unidos, siempre y cuando esto no perjudique el acceso a los tests para la población general, dijeron a ESPN fuentes no identificadas. Por ende, algunos ejecutivos consideran más viable que el Día Inaugural sea en junio.
Pese a que existe la posibilidad de que un jugador o un miembro del cualquier divisa resulte positivo por Covid-19 —independientemente de que se mantengan aislados— las autoridades no creen que esto cause la cuarentena total de un equipo o que la temporada se cancele, informó la cadena deportiva según sus fuentes.
Además, las Grandes Ligas renunciarían a los ingresos anuales que reciben por taquilla, los cuales superan los 10.000.000 de dólares. El capital adicional se generaría por los juegos que añada la liga a su programación de televisión nacional. Por consiguiente, las redes sociales formarían parte de las transmisiones en vivo.
Otro de los desafíos que se avizoran es que los beisbolistas respeten las normas de distanciamiento durante los encuentros, lo cual podría solventarse si estos se ubican en las tribunas, a más de un metro de distancia, y no en el dugout, expresa el reporte.
Las elevadas temperaturas que invaden el área de Phoenix en verano —40 °C en junio, 41 °C en julio, 40 °C en agosto y 38 °C en septiembre— también podrían perjudicar el desempeño de los jugadores. El Chase Field es el único estadio de Arizona con techo retráctil y aire acondicionado.

Campeonatos suspendidos, calendarios reprogramados, atletas profesionales en aislamiento preventivo, partidos a puertas cerradas y reducción de salarios son algunas consecuencias que ha provocado el coronavirus en la industria deportiva.
Por muy engorrosa que resulte, las Grandes Ligas y el sindicato de peloteros se sienten motivados con esta alternativa, según afirmaron las fuentes de ESPN. De lo contrario, si no se toman cartas en el asunto, se corre el riesgo de que este año no se escuche la voz de “Play Ball” en el mejor beisbol del mundo.